{Capítulo 16}:

35 7 0
                                    


Pronto empezaron las clases para mí, por desgracia, aunque la verdad estaba deseando volver después del accidente”.

Ahora tenía más fuerzas, tanto físicas, como mentales, aunque por un lado sentí un temor por volver a encontrarme con las culpables de ese “accidente” que sufrí...

Me puse mi uniforme, me arreglé y me miré en el espejo.
Me gustaba mi cuerpo, no era el mejor, obviamente, pero estaba contenta con ello. Di una vuelta sobre mí misma y bajé abajo.
Terminé de desayunar y tocaron a la puerta.

—Mamá: Ese debe de ser Taemin.

Mis padres estaban al tanto de mi relación con él y estaban de acuerdo ya que era un buen chico que siempre estuvo atento a mí, así que apoyaban totalmente nuestro noviazgo.

—Sí, ya es la hora. Me voy, os quiero—les di dos besos a ambos. 

—Papá: Suerte hija.

—Gracias.

—Papá: Ji...

—Dime, papá.

—Papá: Ten cuidado, ¿vale? Y recuerda que todavía no estás recuperada del todo, así que no hagas esfuerzos.

—Lo tendré, gracias—sonreí.

Abrí la puerta y salí encontrándome a Taemin, con el uniforme del instituto, esperándome. Él sonrió.
 
—Taemin: No recordaba que el uniforme te sentase así de bien—me miró de pies a cabeza.

—Estoy igual que siempre—reí y le di un beso.

—Taemin: No, te veo más renovada. Cómo era la palabra...—se hizo el pensativo y me agarró de la cintura, elevándome hacia arriba.

—¿Qué haces?—decía entre risas.

—Taemin: ¡Ah, ya me acordé! Te ves mucho más preciosa—me besó en los labios, luego otra segunda vez. 

—Bueno, ¿me sueltas o nos quedamos así?

—Taemin: Yo no tengo problema—reí de nuevo y él me soltó.

Empezamos a andar hacia el instituto y Taemin puso su brazo alrededor de mis hombros mientras yo entrelacé esa misma mano con la mía.

Llegamos al instituto y nos encontramos a Young, esperándonos en la entrada.

—Young: Pero mira a quién vemos de lo más juntitos...—rió e hizo ojitos. 

—No te rías que tú sabías perfectamente de esto antes que yo. Estábais compinchados en esto—le recordé. Ella rió. 

—Young: Bueno, me declaro culpable—elevó la palma de su mano. Tuve mi parte en eso... ¿Y qué tal estuvo el desfile, tortolitos?—se refería al que vimos el día en el que Taemin y yo nos hicimos novios.

—Taemin: Bueno, estuvo bien...—me miró y sonrió. Yo le devolví la sonrisa y nos quedamos mirándonos a los ojos, totalmente enamorados, como un par de tórtolos.

—Young: Ejem...—hizo que tosía—sigo aquí.

—Cómo eres, ¡aguafiestas!—la acusé avergonzada, y ella posó su mano en su pecho fingiendo estar ofendida.

—Taemin: Bueno, vayamos a clase.—Dijo risueño.

Entramos y la gente comenzó a mirarnos. Llegamos al pasillo donde nos tocaba clases y parecía que pasáramos por donde pasáramos no dejaban de hacerlo y era normal, puesto que Taemin me llevaba agarrada de la mano.

Nos sentamos en los pupitres, Young delante y yo detrás de ella, junto a Taemin.
Entró el profesor. Comenzó a pasar lista y nombrar nombres.
 
—Profesor: ¿Park, Ji Min...?—Se formó un silencio. Nadie respondió, no había venido.

Entre el amor y el odio ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora