Entre el amor y el odio ©

{Capítulo 37}:

Llegué al instituto y a fuera me encontré a Young con Hoya.

-Hola, chicos-los saludé y ellos me devolvieron el saludo con una sonrisa.

-Hoya: ¿Y Jimin? ¿No vienes con él?

-No, ya regresaron mis padres y volví a casa, pero supongo que no tarda en llegar.

-Young: Vaya, qué pena, ¿verdad?-me miró y esbozó una sonrisa pícara.

-Cállate.

-Hoya: Bueno, esperaré a que venga que tengo que hablar con él. Adelantaros vosotras, chicas.

-Young: Está bien. Nos vemos después, amor-le dio un beso.

Una vez solas, Young me comenzó a sacar cosas sobre Jimin y nuestra "relación", por llamarlo de alguna forma.
Seguimos caminando hacia la entrada mientras nos reíamos y de pronto Young se detuvo y miró hacia delante.

-¿Qué pasa? ¿Por qué no sigues caminando?-la miré a los ojos y observé su extraña expresión facial. Miré hacia el frente y no pude creer a quién tenía delante.
Mi sonrisa se desvaneció en ese preciso instante y me quedé perpleja.
Mi corazón comenzó a latir súper deprisa y mis manos comenzaron a sudar. Básicamente estaba en shock.

-Taemin: Hola, Ji.

Sentí como una descarga eléctrica se apoderaba de todo mi ser. Un montón de sentimientos que no sabía realmente identificar se desbordaban en mi interior.

Él había vuelto...

Taemin se encontraba frente a mí, algo diferente ahora. Su apariencia no era la que recordaba, incluso su mirada parecía distinta. Tenerlo delante era indimidante.
No pude pronunciar ninguna palabra, verlo de nuevo no era algo que esperaba, ni quería...

Él me observó a los ojos y sin dudarlo se acercó y me abrazó, un abrazo al cual yo no le correspondí.

Miré a Young, la cual tenía un rostro semejante al mío. Ambas parecíamos haber visto a un espectro o algo por el estilo.

-Taemin: Te he echado mucho de menos todo este tiempo-mi corazón comenzó a latir aún más deprisa.

Taemin observó que yo no tenía intención de responderle al abrazo y se separó de mí para volver a mirarme.
Me armé de valor y lo miré a los ojos, encontrándome con una mirada algo menos segura que antes y sorprendida por mi falta de correspondencia, quizás.

-¿Qué haces aquí?-escuché una voz neutra, detrás de mí.

Mierda...

Cerré los ojos con fuerza, sabiendo, claramente, de quién se trataba. Jimin.

-Taemin: Creo que a ti no tengo porqué darte explicaciones de lo que hago.

Dejó de mirarme y dirigió una fría y misteriosa mirada a un Jimin defensor que se ponía a mi lado, dispuesto a atacar en cualquier momento si era necesario.

Agaché la cabeza y me fijé en las manos de Jimin, apretadas en forma de puño.
En cuestión de segundos estaba comenzando a sentirme como antes, con ese miedo cada vez que ellos dos se encontraban. Me temía lo peor...

-Young: Ji, ¿me escuchas? ¡Ji!-me zarandeó y me hizo salir de mis pensamientos.

-Sí...-dejé salir un pesado suspiro y la miré, un poco culpable, por no haberla escuchado.-¿Qué decías?

-Young: ¿Sigues igual por lo de esta mañana?-olvidó lo que me estaba contando y me acarició el hombro.

-Sí...