Are We A Team?

Capítulo 28.

Haymitch

Me mantuve despierto toda la noche esperando que Effie volviera a cerrar los ojos.

Sus uñas se clavaron en mis brazos, temblaba e incluso tenía los ojos más rojos de lo normal. No podía irme con ella en este estado. Solo podía oírla susurrar que no era culpa suya y que Clary no podía estar muerta.

Para cuando salió el sol, supe que ya era algo tarde para dormir. Su cabeza seguía sobre mi muslo, estaba dormida por fin y me dejaba más tranquilo verla de esa manera. Mis manos se encargaban de jugar con su cabello, era relajante para ambos. En el fondo esperaba poder encontrar a la pequeña sana y salva. Ese era el único pensamiento que abarco mi mente por un largo rato.

Comencé a sentir que Effie despertaba, no tuve otra que cerrar los ojos y fingir que dormía. Sus labios se posaron sobre los míos antes de recostarse en mi pecho.

Sin duda esta no fue una de las mejores noches que tuvimos.

—Se que no estas dormido Haymitch—la oí susurrar—. Debiste dormir. No tenias porque cuidarme.

—Solías hacerlo por mi—suspiré—.¿Quieres hablar sobre eso?

—No, por el momento solo quiero olvidar.

Asentí comprendiendo si no quería recordar una pesadilla. Yo más que nadie sabia que no era algo agradable de hacer.

—Me daré un baño, ahora solo quiero descanses un poco—se incorporó en la cama, girando a fijar su vista en mis ojos—. Gracias Mitch.

Aunque no quiera demostrarlo se que sigue angustiada y que solo busca que no me vaya de aquí preocupado por ella. Me pare dispuesto a vestirme, y una vez listo me deje caer en la cama nuevamente. Mis ojos se fueron cerrando de a poco.

Solo unos minutos, pensé.

Abrí los ojos apenas oí la puerta abrirse. Katniss estaba apoyada en la pared, cruzaba de brazos y junto a ella, Peeta. Effie apareció minutos luego, tenía el cabello atado en una coleta, vistiendo tan solo una de mis camisas.

—Si ya dejaste de tomar tu siesta del día, ¿podemos irnos?—pregunta Peeta.

—Es temprano, dijiste medio día muchacho.

—Es más de medio día—gritaron ambos.

¿Mas?, pero cómo es eso posible...si tan solo fueron unos minutos. Mi mirada seria cayó en Effie y en como se mordía el labio por los nervios.

—Es mi culpa—admitió—, anoche tuve una pesadilla. No dormimos nada bien, solo deje que durmiera lo necesario.

Demonios princesa. Me pase ambas manos por la cara antes de ponerme de pie.

—Podrás seguir en el tren, ahora muévete Haymitch—me ordenó Katniss.

—Siempre tan agradable...—suspiré—. ¿A que hora exactamente sale ese jodido tren?

—Dentro de 20 minutos—añadió el chico del pan—, es por eso que debemos irnos ahora.

Esperamos a que Effie se pusiera algo más que una simple camisa, y a paso rápido salimos de la casa directo a la estación. Empezaríamos buscando a la supuesta familia de Ryan, eran los únicos que podían dar la suficiente información de él.

Llegamos justo a tiempo, el tren ya estaba por irse. Aparte a Effie de los muchachos para darles su espacio.

Podía ver lágrimas otra vez caer por sus mejillas, se aferró a mi pecho para después levantar la mirada hacia mi, apegando nuestras frentes.