Are We A Team?

Capítulo 27.

Effie

Peeta me tomo de ambos brazos para sacarme de la habitación. Haymitch se quedo dentro, arrodillado.

No pude ver que es lo que esa nota tenía escrito. Solo sabía que Clary no estaba en esa cama, la ventana estaba rota y que mis lágrimas eran interminables. Estuvimos vario tiempo en las mismas posiciones. Peeta apoyado en la pared, Katniss en el marco de la puerta, y por último estaba yo sin poder dejar de caminar en círculos.

Ryan estaba en mi mente. ¿Cómo se atrevió a llevarse a mi pequeña?

Esa de esperarse que no se daría por vencido, y nosotros fuimos descuidados. Me prometí a mi misma no dejar que nada le ocurriera, ¿cómo deje que esto pasara?. Intente dejar mis pensamientos de lado al notar que Haymitch por fin había decidido salir del cuarto, pero aquella mirada suya solo expresaba algo que no me agradaría oír.

—Princesa—se dirigió a mi—, quiero que respires muy profundo y me escuches, ¿de acuerdo?

Asentí con la cabeza en respuesta, mientras los muchachos se mantenían atentos a lo que diría.

—Las posibilidades de encontrarlo son pocas, y con respecto a la niña es mas...

—Alto—interrumpió Katniss—, aun no sabemos lo que planea hacer con ella.

—Hacernos daño, eso es lo único que quiere—respondió molesto—. Debí golpearlo hasta matarlo.

—Quizá eso fue lo que lo provoco—insinuó Peeta—. Si recorremos los distritos tal vez podamos agotarle los lugares de escondite.

—El problema es que ni siquiera sabemos si en realidad salió del 12—suspiré—, ni por cual podrían empezar.

—El 11 es nuestra primera opción—fijo su vista en mi, nuevamente—, no podemos sacar conclusiones nosotros solos. Necesitamos pistas, todo lo que podamos averiguar sobre él.

Todos nos miramos entre sí. Sabíamos que no seria fácil pero no perdemos con intentar.

—Esta decidido entonces—rompió el silencio Katniss—. Deberías descansar Effie, si es que quieres acompañarlos.

—Ella se queda.

Mi mirada de pronto se centró en Haymitch. No podía creer que estuviera decidiendo por mi, de ninguna manera me quedaría aquí sin hacer nada.

—No hay excepciones cariño. Te quiero a salvo junto al bebé, y exponerte es un riesgo que no estoy dispuesto a correr.

—¡Se la llevó lejos mío!—levante la voz—, es mi niña. Iré con ustedes quieras o no.

—No lo harás.

—Me tendrás que atar para poder detenerme.

—Te quedaras aquí, fin de la discusión.

—No estoy de acuerdo—me cruce de brazos, molesta—, dame una sola razón para no...

—¡No quiero perderte!—gritó, sujetando mis hombros.

Las lágrimas volvieron a inundar mis ojos. Sabía que esto era peligroso y que yo solo seria una carga, pero quería ayudar...necesitaba sentirme útil, solo anhelaba encontrarla.

Se alejó de mi, golpeando la pared.

—Tiene razón—resaltó Katniss—, si algo malo te pasa necesitaríamos volver y eso le daría más ventaja a Ryan.

—Solo quiero que regrese.

—Nos quedaremos—decidió, intentando abrazarme—, veremos la forma de ayudar sin llevarte directo a su trampa.