Are We A Team?

Capítulo 10.

Effie

Era conciente de que haría Haymitch con tal de que no me fuera. Estaba convencida en realidad de todo lo que podría ser capaz, pero no quería decírselo hasta verlo con mis propios ojos.

Trate de ser rápida al vestirme, gracias a Katniss ahora tenía otro punto de vista con respecto a lo que debía usar para no ganar una fractura en ese bosque.

Baje de prisa al ver que la habitación había quedado vacía. Y ahí lo encontré, esperando en la puerta con una canasta en la mano y una mochila en la espalda. Sonríe de lado al verme, me asegure de devolver esa sonrisa.

Al salir de la casa mis niños nos esperaban afuera, les tomo dos minutos reclamar por el griterío que hubo antes de dejarnos ir. De camino trate de mirar a Haymitch, intentando deducir que es lo que se traía entre manos, pero me rendí.

Me cuesta creer que todo lo que creí perfecto se perdió en una simple pelea. Pero aquí estamos intentando nuevamente, podría decirse que estos somos nosotros, diferentes, pero necesitando siempre la cercanía del otro. De lejos ya se podía ver el lago, también note como en varios árboles estaba marcado mi nombre.

Esto debe ser obra de los niños, pensé, con una sonrisa de oreja a oreja.

Me solte de Haymitch para sacarme la chaqueta al estar por fin frente al lago. Me moje un poco la cara y darme la vuelta me llevo la sorpresa de que esta armando una tienda de acampar.

-¿Pasaremos la noche aquí?

-Tratare de que no lo olvides preciosa.

-Sorprenderme no será fácil.

-Nadie dijo que seriá fácil, pero me quiero arriesgar.

-¿Que traes aquí?-le pregunte, mientras reviso la mochila-. No puede ser, ¿esto es real?

-Son un regalo de parte de tus vencedores.

-Nuestros.

Asentí en respuesta, regresando a mi trabajo.

-Se ven deliciosas.

-Las fresas bañadas en chocolate siempre fueron tus favoritas.

-Pensé que lo habías olvidado.

-Olvidar no es algo que se pueda hacer fácilmente.

-Paso mucho tiempo desde que comí una de estas-suspiré, antes de probar una-, definitivamente son una delicia, anda come.

-No, son tuyas.

-Pero no quiero comer yo sola. Me sentiría mal de saber que me comí todo, pudiendo compartir.

Lo vi rodar los ojos con molestia al venir hacia a mi para poder colocarle una fresa en la boca, y me acerqué a morder la mitad antes de capturar sus labios.

Solo era una excusa para poder besarte Abernathy, pensé. Logro inmovilizarlo en la manta que saque minutos antes de descubrir el postre.

Estaba a horcajadas sobre él, disfrutando de sus caricias e intentando limpiar todo el chocolate que había alrededor de sus labios. Le guiñe un ojo antes de alejarme para dejarlo volver a lo suyo.

-Si vuelves a besarme de esa manera no responderé ante todo lo que sería capaz de hacerte Trinket.

-¿Qué es lo que deseas hacerme?

-Se lo que intentas, y te recomiendo no andar de coqueta.

-No planeaba hacerlo-agregue con voz seductora-. Tenía curiosidad, es todo.