sixteen

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Josh se encontraba en el bar con Alex, en la ultima mesa del lugar esperando a Patrick, como toda reunión normal de amigos, lastima que ellos no eran amigos y uno estaba demasiado resentido. Estuvieron esperando una hora prácticamente, llena de quejas de parte de Alex y Josh solo lo ignoraba, como las mayorías de las veces que su amigo se pone así.

Después de una hora y media de tanto esperarlo, el pelirrojo apareció por la puerta del bar, solo, con su cigarro en la boca y su campera de cuero, típico de el. Josh sintió un pequeño escalofrió, que hizo pasar al instante, porque aun que el lo niegue, Patrick siempre sera ese horrible recuerdo el cual jamas queres repetir, y si es posible, borrarlo para siempre.

El se acerco a su mesa, con toda la confianza que siempre se tuvo a si mismo, y pidio una cerveza. Miro a los dos chicos y sonrió, una sonrisa orgullosa. Alex lo miraba tan molesto, el no le tenia miedo, pero si odio, demasiado. Y Josh solo lo miraba, sin ninguna expresión, neutro. Estuvieron unos minutos asi, sin hablar nada, solo mirarse. Alex ya estaba demasiado nervioso y molesto, sentía que estaba perdiendo todo su tiempo y eso le irritaba mucho mas.

-¿Vas a hablar o te vas a quedar mirando como un idiota?.-pregunto de mala manera el rubio.- Porque si es así, me voy.

-Tranquilo princesa.-dijo sonriendo, tomando un sorbo de su cerveza.- ¿Quieren preguntarme algo?.

-Yo si.-dijo Josh saliendo de su mundo.- ¿Como sabes tanto de Tyler?.

-Sabes muy bien que tengo ojos en todas partes.-dijo con esa sonrisa que un día Josh había admirado tanto sin saber de que trataba.

-No es el punto por el que yo estoy aquí.-dijo Alex antes de que Josh vuelva a preguntar.- Me importa una mierda todo lo que tengas, lo único que quiero saber es que quieres de nosotros para dejarnos en paz, porque no tenemos muchas ganas de empezar a jugar contigo.

-Ya le dije a la ratita.-dijo y Alex interiormente estaba riéndose a mas no poder, porque nunca pensando en algo serio.- Quiero lo que me deben, y también, divertirme un poco, tal vez.

-¿Que te debemos?.-pregunto Alex.- Ya habíamos aclarado que nosotros no teníamos nada que ver contigo.

-¿No lo recuerdas? Ese día en el que Josh llego llorando a tu departamento, dios, eran tan estúpidos los dos, ¿pensaban que podían entrar y salir tan rápido de esta mierda?.-pregunto.

-Mira, nosotros salimos limpios de esto, lo sabes. No vengas a querer relacionar tu frustración de amor con nuestro acuerdo, ¿si?. ¿Quieres volver con Josh?, haz algo de ti, no seas la misma MIERDA que fuiste siempre.- dijo ya cansando, dando una calada a su cigarro.

-Eso no te interesa, Rey Alex.-dijo tranquilo.- Mi "frustración de amor" la hablare a solas con el. Ahora, de ti y de Josh lo único que quiero es que paguen todo lo que me deben, no se quieran hacer los imbéciles ahora, porque puedo recordarles muy fácil todo y tu lo sabes, mi querido. Porque encima de todo, puede ser que dejaran de trabajar para otros grupos y para mi, pero ustedes siguen robando, siguen siendo las mismas personas miserables que eran cuando los conocí, así que, no se que tanto quieren olvidar, si siguen en lo mismo, idiotas. Pero, si quieren hacer eso, vuelvo a repetir.-sonrió.- Puedo recordarles con un solo paseo a la ciudad en donde mierda se metieron y que esto no es ningún juego.

-El problema es con nosotros, Patrick, no con Tyler.-dijo Josh por fin.- No quiero que lo metas a el en esto, porque no sabes de lo que soy capas.

-Claro que se de lo que eres capas, mi linda rata o te olvidaste que yo estuve esa noche contigo.-dijo sonriendo al saber que ese recuerdo siempre le afectaba a Josh.- Y con Tyler, no prometo no jugar un rato con el hasta que los dos me paguen lo que deben.

kîng(1 Y 2 Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora