06.

3.1K 292 50
                                    

POV Omnisciente

Horas después, Nicolás despertó. Ya era de noche, bueno, todavía no había abierto los ojos, pero lo suponía. Y por qué Nicolás no quería abrir los ojos? Simple, sentía unos brazos alrededor suyo y una respiración en su cara. Cuando por fin se decidió a abrir los ojos, lo primero que vio era a Jaime durmiendo.

Si no sabían, porque vieron mucho crepúsculo, los vampiros si pueden dormir, y bueno, híbridos también.

Nicolás por fin tuvo la oportunidad de mirar cada rasgo de Jaime. Todavía no podía creer que Jaime fuera de alguna manera sobrenatural inmortal, y más aún que haya matado a gente antes. Si hubiera sido otra persona, claramente se hubiera ido corriendo, pero esta vez, no quiso hacer eso. Solo quiso quedarse ahí, y quería que Jaime le contará de que se trataba todo lo que el dijo.

Pero Nicolás en verdad se quería ir a bañar después de lo que paso. Sentía que alguien le hubiera atacado el cuello. Nicolás se movió cuidadosamente, intentando no despertar a Jaime. Cuando por fin se pudo soltar, se colocó en la orilla de la cama y se levantó. Pero unos brazos lo atraparon de sorpresa.

-Donde vas?.-Preguntó Jaime, con la voz ronca en el oído de Nicolás. El moreno se estremeció al sentirlo tan cerca.

-I-iba a mi cuarto.-Dijo Nicolás algo nervioso. Jaime lo dio vuelta para mirar a Nicolás a los ojos.

-Por qué tan nervioso?.-Pregunto Jaime, sospechosamente.

-P-porque estas muy cerca mío po weon.-Dijo Nicolás, buscando una excusa cualquiera. En parte era por eso.

Jaime escuchó los latidos del Nicolás más acelerados que antes, sabía que significaba eso. Nicolás estaba mintiendo.

Jaime se acerco peligrosamente a la cara de Nicolás y la acaricio levemente.

-Por qué mientes, cariño?.-Preguntó Jaime, casi susurrando.

-No estoy mintiendo.-Dijo Nicolás, separándose de las caricias de Jaime.-Me tengo que ir.

Y con eso Nicolás se fue casi corriendo de ahí, cosa que hizo sospechar aún más a Jaime.

Minutos después, Nicolás llego a su habitación, de inmediato cerró la puerta con seguro y se desvistió. Luego de eso, se fue a bañar.

Unos quince minutos después, Nicolás salió de la ducha, se miró en el espejo y pudo notar que en su cuello tenía marcas de dientes.

-Qué mierda.-Dijo Nicolás, extrañado.

Estaba muy seguro que esto tenía relación con lo que era Jaime.

Nicolás no iba a confrontar a Jaime y pedirle explicaciones. El plan de Nicolás era ignorarlo, hasta que Jaime por fin decida contárselo.

El moreno vio la hora, eran las 10 de la noche. Recordó que había una fiesta en el campus. Aún así no se la perdería.

Salió del baño, busco ropa decente, y se vistió rápidamente. Se echó algo de perfume y iba a salir de su cuarto pero la puerta estaba abierta.

Nicolás decidió ignorar eso y salió de la habitación.

Al parecer Nicolás no había recordado que le había colocado seguro a la puerta.

Cuando llego a la fiesta, ya había gente borracha o drogados. Creo que eso era lo típico en estos tiempos.

Nicolás no había visto a Edgar desde que había entrado a la habitación de Manuel, así que lo buscó por todas partes pero no lo encontró.

Mejor fue a buscar algo de beber cuando alguien chocó con él.

-Disculpa no te había visto.-Dijo el desconocido, mirando a Nicolás.

-Sí, esta bien.-Dijo Nicolás, con indiferencia. Se iba a ir pero el desconocido lo tomó del brazo.

-Cómo te llamas?.-Preguntó el extraño con una sonrisa.

Nicolás no quería hablar en realidad con el extraño, pero vio a Jaime mirándolos desde atrás del extraño. Así que...

-Nicolás y tú?.-Preguntó Nicolás, intentando concentrarse en el extraño.

-Me llamo David.-Dijo por fin el extraño.-Quieres bailar?.

-Eh.-Dijo Nicolás con una pausa, pensándolo.- Esta bien.

David tomó de la mano a Nicolás, y lo guio hacia como una "pista" de baile. David tomó las caderas de Nicolás con sus dos manos, y casi obligo a Nicolás a colocar sus manos al rededor del cuello de David.

Jaime miraba esto furiosamente esto. Miraba cada movimiento que hacia Nicolás.

Estuvieron varios minutos así, hasta que David decidió pasarse de listo, y le robo un beso a Nicolás. El moreno no se podía soltar, ya que David lo tenía asujetado con sus manos.

Hasta donde supo Nicolás, alguien lo estaba besando, pero después sintió que lo soltaban. Nicolás vio a David tirado en el piso, y Jaime miraba enojado a David, después de unos segundos miró a Nicolás.

Nicolás pudo notar que Jaime tenía los ojos rojos.

Antes los tenía dorado, porque estaba sacando su parte híbrida, pero ahora estaba sacando su lado lobo. Jaime era el alfa.

-Jaime, qué le pasa a tus ojos?.-Preguntó Nicolás, sorprendido, acercándose a Jaime.

Jaime, retrocedió un poco, cerró sus ojos fuertemente, para segundos después volver a abrirlos. Sus ojos habían vuelto a ser de su color original.

Jaime miró a Nicolás, estaba buscando alguna excusa. Nicolás se dio cuenta de eso.

-Si me vas a mentir, prefiero que no me digas nada, y que no me hables.-Dijo Nicolás, con otra pausa.-Hablemos cuando quieras contarme la verdad.

-Nico...

Nicolás se fue corriendo esta vez.

La fiesta no fue tan buena como el creía que iba a ser.

Hybrid. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora