Ω∑εの∂verseツ~ Jainicø&Ędnaikø

Danza rota. Especial

Unas horas después de lo sucedido, el Naiko no había asistido a clases el resto de la semana y no contestaba las llamadas de sus compañeros  de aquél día y Edgar no decía nada.

El obviamente había tratado de comunicarse con él, sólo logro contactar con sus padres a través de su padre, eran socios, pero solo pudo decirle que era muy delicado de salud y que por ello era fácil que cogiera algún resfrío.

Esto lo calmo un poco, pero no del todo sabía que algo andaba mal con su "amigo" y eso lo inquietaba bastante.

Aparte esa semana le habían dado una noticia impactante, sus padres hace tiempo buscaban una "nuera"(progenitor) para ellos, su querido hijo pequeño no tenía pareja y sus padres le habían advertido ya.
"si no encuentras a un Omega que sea de tu gusto y desee estar contigo, nosotros nos veremos obligados a buscar un progenitor para nuestros nietos, ya estas avisado Edgar".

Ya sentenciado eso, la semana había sido frustrante, el conocía aún omega y de hecho era amigo de Nicolás, la pareja de su amigo.

Dada la situación en la que se encontraba y lo descabellado y malévolo que era, no podía dejar que sus padres lo atrapasen así, tampoco quería compartir el resto de su vida con alguien totalmente desconocido, así que engañándose así mismo se acercó más a ese joven tierno a su  parecer, para conocerlo más, y... ver que se teje.

Era viernes de la semana siguiente, apareció una Naiko rejuvenecido totalmente, como si todo esos "malestares"  desaparecieran totalmente y así fue,  paso sus 6 días de celo en su habitación especial para esas temporadas.

Tenía que ir a dejar la licencia medica a la jefatura de profesores, y de paso se encontró con sus viejos amigos, el pecho y el bestia que andaban de vagos por ahí.

Estaban tan cercanos como siempre, esto ultimo enternecio mucho al joven, los miraba mientras caminaban junto a el preguntándole como había estado su periodo especial.

El joven sabia que ellos estaban al tanto de su situación, por aquel fatídico día del accidente en la media, ya que ellos se conocían desde 3ro medio y fueron ellos dos quienes le ayudaron cuando su primer celo llegó*. Los únicos que me aceptaron como era y apoyaron sabiendo que yo no tenía idea aún en aquel entonces de mi condición.

Llegaron a la jefatura y el Naiko entró dejando atrás a los dos chicos que venían en su compañía, hablo con su profesor y este recibiendo la licencia y algunos papeles mas que se les hizo entrega cuando las ojeo y en su expresión se veía que todo estaba en orden, este solo de despidió y el Naiko se retiro de aquel lugar.

Como era viernes les tocaba clases a las doce cincuenta, y faltaba poco para entrar, decidió ir a dar un vuelta al campus con sus amigos con la esperanza de encontrarse con el edgar y... y poder hablar.

Camino un poco y lo vio, ahí tan radiante como siempre pero con alguien en su compañía, un muchacho de pelos claros y algo bajito, quien no tenía miedo dar a  conocer su interés por el alfa y parecía que este no mostraba rechazo alguno, también estaban el Jaime el amigo del edgar junto a su ''prometido''.

Nicolás notó la presencia  de sus dos amigos Beta y con alegría los llamo, el Naiko se sintió algo incomodo cuando el par lo arrastraban hacía con los demás, el edgar lo notó y claramente su semblante se trono un poco serio, no le quitaba la vista de encima junto con el Jaime, el Nico noto esto molestándolo un poco, pero lo dueño pasar.

El Naiko saludo y los chicos lo presentaron al Nico, quien saludo cordialmente, y al Manuel quien saludo alegre, ese chico si que era simpático, el Jaime lo saludo un poco seductor al gusto del edgar y el Nico, y luego el edgar se le acerco simulando un beso en la mejilla, diciéndole a la vez -tenemos que hablar-  al separarse un poco,  el Naiko lo vio con una expresión serena, esto lo perturbo un poco, no sabía que es lo que le diría, tal vez le pediría explicaciones por su modo de actuar, o tal vez algo peor...