Capítulo 1

454 10 0
                                    

Llegamos a un viejo muelle, hacía frío y estaba desolado.

¿Qué hacemos aquí Diego? — nos bajamos del auto —

¡Vaya pero que obediente eres amor! — apareció Ana, quién se bajó del auto apuntando con un arma

Ana ya basta de este juego, devuélveme a nuestro hijo — le dije acercándome sin pensar en las consecuencias, mostrando mis manos vacías — llévame a mí si quieres, pero déjalo en paz

— Alina ni un paso más — susurraba Diego a mi espalda —

Mis planes son otros Alina — respondió ella —

Metió la mano en su bolsillo y sacó un objeto del tamaño de un labial

¿Sabes que hay en el auto, además de tu indefenso hijo? — Agregó tomándome del brazo — una bomba — susurró —

Una lágrima bajó por mi mejilla y un frío invadió mi cuerpo.

 Ana sostenía el arma con una mano apuntándome y en la otra mantenía el botón que haría explotar el coche bomba 

No tenía manera de moverme sin lastimar a alguien o moría yo por un disparo o el auto explotaría con mi hijo adentro.

Ana no debes hacer esto — le decía temblorosa — sí la policía te encuentra nunca saldrás de la cárcel —

— Pero la policía nunca me va encontrar — decía con risa malvada — por eso hice que Diego te trajera hasta mí, él sabe que un paso en falso y se quedará sin familia —

Ana alejó la pistola de mi cabeza y empezó a disparar a la nada y a desvariar.

No, tú estás muerta — decía — yo te maté. No existes, yo te maté, te maté y te tire al río

¡Dios esta mujer de verdad está mal! — Pensé — que palabras tan escalofriantes.

Le agarré el brazo y con mi codo golpeó su nariz provocando que ella botará la pistola y el botón de la bomba lejos.

¡Diego ve por el niño! — le dije mientras forcejeaba con Ana —

¡Nooo! — gritó furiosa tomándome de la pierna (caí) —

Se subió encima de mí y puso sus manos en mi cuello.

Con mis pocas fuerza me la quite de encima y ahora los papeles estaban invertidos, me enfureció tanto, todo lo que me ha sucedido por su culpa.

Este es por mi hijo — le dije golpeando su cara con fuerza— este es por mí — otro golpe más — este por Diego — su nariz empezó a sangrar — Por Amalia, por lo que Andrés tuvo que pasar en la cárcel por tu culpa, ¿Creíste que no iba defender a mi familia de ti maldita loca? — la golpeaba con todas mis fuerzas, mientras más la golpeaba, más recordaba todas sus maldades —

Alina detente — gritó Diego con el bebé en brazos — la policía viene en camino. Ellos se encargaran

Sus palabras me distrajeron, Ana tomó el botón e hizo explotar el coche. Era muy tarde estábamos cerca...

Años antes 

Cuando el sol se asoma y toca mi ventana, sé que es hora de comenzar un nuevo día, lo primero que veo al despertar es a Oscar, mi esposo con quien llevo 4 años de casada.

Buenos días mi amor ¿cómo amaneció la mejor esposa del mundo?
¿Bien y tú? — respondí mirando fijamente sus ojos —

El Tiempo Después De Ti ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora