Capitulo 1.

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P.O.V. Louis.

Ese día fue el típico día en el que no sabes que hacer, el típico día en el que no sabes que hacer donde te pica la curiosidad de que harán tus fans para quererte liado con tu compañero.
Maldita la hora en la que se me ocurrió leer la mierda de fanfic.
Lo peor de todo es que esas mariconadas me afectaron, así que, como de costumbre, me puse a la defensiva.

Sacudí la cabeza y miré el reloj... no era hora de comer pero tenía que entretenerme en algo que no fuera seguir leyendo.

Bajé y empecé a rebuscar en la nevera algo para comer.
Fue entonces cuando noté unos brazos a rededor mío.

Louis: ¿Qué haces Harry?- Le pregunté de mala gana.

Harry: Pues abrazarte Boo, ¿qué crees que hago?- Me dijo riéndose.

"Que adorables sus hoyuelos."

Sacudí la cabeza intentando alejar esos pensamientos de ella.

Louis: Pues no lo hagas más.- Enfadado por mis pensamientos, le contesté con mi famoso mal humor.

Harry: ¿Qué te pasa Boo? ¿por qué no quieres que te abrace? -Hizo un puchero adorable.- Antes decías que mis abrazos te hacían sentir bien...

Louis: ¿Que qué me pasa? ¡Que no quiero que me toques! - Dije casi explotando, pero lo peor es lo que dije a continuación.

Louis: ¡Por tu culpa esta mierda de Larry Stylinson existe! ¡Por tu culpa ellos creen que soy un maricón de mierda, Harry! ¡Por tu culpa mi novia sufre de los acosos de esas locas que se hacen llamar Larry Shippers! Si no fuera por la banda, Harry, no te dirigiría la palabra.- Cuando acabé esa frase me arrepentí al instante. Su cara derrochando tristeza, arrepentimiento, confusión y un poco de enfado hizo que algo en mi despertara, la compasión.

Harry: ¿Sabes que Louis? ¡Larry esta hecho por dos personas, igual que Ziam o cualquier otro bromance! ¡Tu también has hecho que lo crean! ¿no me quieres ver mas? ¡perfecto! ¡me voy de aquí! Prefiero estar con mi familia que se ve que son los únicos que me aprecian.- Susurró con la voz entrecortada antes de irse.

¡Joder! ¿por qué cojones he dicho toda esa mierda? Me dirigí a su habitación, asustado de la idea de que se alejara. Golpeé la puerta, nada. Supuse que no pensaba abrirla así que decidí hacerlo yo.
Vi una escena que no me gustó nada. Harry, mi Hazza Bear, mi Hazz, llorando a mares, mientras hacía la maleta, eso... Eso me rompió el corazón.

Me acerqué a el y le abracé con todas mis fuerzas, al principio se intentó zafar pero luego me correspondió al abrazo llenándome toda la camiseta de sus lágrimas.

Louis: Hazz... Lo siento mucho, no quise decir eso, por favor perdoname.- Dije al borde de las lagrimas.

P.O.V. Harry.

Entré en mi habitación sollozando y dejando mis lágrimas caer. Saqué mi maleta y empecé a hacerla a toda prisa cuando tocaron la puerta, pero no abrí, sabia que era él. Sabía que abriria la puerta como un gran cabezón que es, y lo hizo, claro que lo hizo.
Se coló entre la maleta y yo y después me abrazó y eso si que no me lo esperaba, intenté zafarme pero una parte de mi no me dejó.

Louis: Hazz... Lo siento mucho, no quise decir eso, por favor perdoname.- Me perdí en sus ojos por un momento. Me entró rabia, si, rabia de aguantar mis sentimientos siempre, de que me hiciera daño, de todo.

Lo empujé haciendo que cayera al suelo. Lloré aún mas por saber lo que estaba haciendo pero al mismo momento no me importaba.

Harry: ¿Que lo sientes? Si claro, seguro que has venido a disculparte por mi ¿verdad?- escupí con ironía- ¡JA! Mira, puedo ser tonto pero no tanto, ¿qué quieres?, ¿que no me vaya de la banda para que puedas seguir ganando pasta y comprarle regalos a tu novia? Lo llevas claro. Tranquilo, que no me vas a hablar porque me voy de aquí y así de paso te dejo tranquilo y no tienes que aguantar a un maricón que esta loco por ti.- Mierda, ¿qué he hecho? Mierda, mierda, mierda.

Louis: ¿Qué?- susurró mirándome con los ojos.

Harry: L-lo qu-e ha-has oído. A-adiós.- No pude evitar tartamudear. Cogí mi maleta y me fui de allí con la única idea de despedirme de la gente que me quería.

P.O.V. Louis.

¿Será verdad? ¿le gusto?- Susurré sin creérmelo del todo. No se porque, pero, sentí esperanza, y cuando fui a contestarle, me di cuenta que ya no estaba, se había ido. ¿Y ahora qué? Será mejor intentar contactar con el cuando me aclare.

I'm always here for you. Larry Stylinson. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora