El testigo de Andrés «mb»

9.

 ______________ Vega 

Mi cuerpo se tensó.

¿Cómo qué no íbamos a ir al instituto?

Éste esperma de orangután con retraso estaba loco.

Yo nunca faltaba a la escuela, y aún si tuviera fiebre o una enfermedad mortal yo nunca, nunca, faltaba. Era casi para mí un pecado hacer eso.

— ¿Por qué estás tan pálida? —me preguntó Mario curioso.

— ¿Todavía tienes el descaro de preguntarme?

— ¿Por qué te molesta tanto?—bufó. —Como si nunca hubieras faltado a la escuela...

Lo miré entre mis pestañas inclinado mi cabeza hacia abajo.

Y el entendió todo.

Una sonrisa sorprendente-mente maliciosa apareció en su rostro.

— ¿No...? ¿Enserio? —alzo sus cejas. — ¿Tú nunca faltaste a la escuela?

Mi silenció me delató.

—Wow, esto...esto no lo puedo creer. —negó divertido.

Una sonrisa se comenzó a formar en mi cara pero la desvíe hacia la ventana.

Tal vez después de todo si era una nerd.

Pero él no lo podía saber.

Mario Bautista 

Sonreí.

Está chica era un caso perdido.

Nunca había escuchado de alguien que "nunca falto a clases"

Sentí otra sonrisa malvada aparecer en mis labios.

—Hoy es el día. —le dije.

Giró su rostro hacía el mío.

Esperé su mirada y se me hicieron eternos los segundos que tardo en conectarla en la mía.

—No. —chillo.

Sonreí a su cara disgustada, aunque yo la encontraba completamente tierna.

—No es un delito faltar un simple día a clase. —hablé. —Al final del día me terminaras agradeciendo, te la pasaras bien.

— ¿Contigo? Lo dudó.

—Eso lo veremos.

* * *

Llegamos al muelle de Santa Mónica.

Sin duda era lo que más me gustaba de California.

Tal vez un parque de diversiones pueda hacer sonreír por lo menos un momento a esta chica.

O solo tal vez...yo quería ver su sonrisa.

— ¿Un Parqué de diversiones?—me preguntó más que obvia.

—Te hacen falta gafas, nerd.

Rodó los ojos.

Y yo reí.

Puede sonar malvado pero hacerla enojar era bastante divertido.

—Okay, ya entendí. —se cruzó de brazos molesta.