Bajo el mismo cielo

Capitulo 08

Jong Hoon (POV)

-Gracias Kyu Jong! Eres el mejor jefe que he tenido!- me río cuando veo a Hyung Joon abrazar efusivamente a Kyu y éste sonríe amplio mientras corresponde su abrazo

-Lo sé...- le contesta.- sobre todo porque soy el primer jefe que has tenido.- me carcajeo al igual que mi hermano y Gyori que estamos en la barra del café

-Pero aún así eres el mejor.- le sonríe

Niego con la cabeza, coloco varias tazas y vasos con café para llevarlos a las mesas correspondientes, me giro un poco sorprendido cuando escucho el ruido de una de las charolas golpear en la barra.

Hong Ki ha dejado caer sobre la barra su charola, observando enojado a Hyung Joon. Respiro hondo. Desde que Joon entró a trabajar en "Capuccino" a Hong Ki no le agrada, y el hecho de que ahora Hyung Joon le esté pidiendo permiso a Kyu de irse temprano no ayuda en nada.

En realidad sé que Hong Ki está molesto porque ese chico que le agrada siempre está aquí buscando a Joon, cosa que a mí me tiene sin cuidado, lo que me tiene con los nervios de punta es que Hong Ki esté siendo tan insistente con ese tipo.

Le entrega el pedido a Gyori que con el ceño fruncido por su actitud empieza a preparar los cafés, los coloca uno a uno en la barra.

-Hey... - mi hermano llama mi atención- se van a enfriar.- me dice señalando los cafés en mi charol

-Oh... si...- me había quedado distraído observando a Hong Ki

Levanto la charola y camino hasta la mesa en donde se los entrego a cada uno de los clientes, converso con ellos un poco, sonrío intentando ser amable. Veo salir a Hyung Joon de la cafetería, al parecer tenía un asunto familiar o algo así, por eso pidió salir temprano.

Tampoco es como si la cafetería se fuera a caer a pedazos si uno de los meseros pide un día libre, antes de Hyung Joon solo éramos Hong Ki y yo, así que nos las arreglaremos.

Sigo atendiendo mesas, Hong Ki sigue de mal humor así que intento hacerlo reír, no tengo mucho éxito, solo sonríe un poco pero continúa haciendo su trabajo. Siento una aprehensión en el pecho cuando lo veo sonreírle a los clientes, como siempre siendo coqueto con ellos.

A veces me pregunto si lo hace propósito, portarse seco conmigo porque sabe que me gusta, y coquetear con todos en frente de mí. Tal vez debería dejar de prestarle tanta atención.

La puerta de la cafetería se abre, un jovencito delgado de cara conocida entra, ve a su alrededor hasta que localiza una mesa para dos, lo más alejada de los demás clientes, camina directamente hasta ahí y se sienta.

La mesa está entre las que me toca a mí atender, así que tomo mi libreta y pluma, me acerco, limpio la mesa, coloco una carta enfrente de él.

-Buenas tardes- lo saludo

Viéndolo más de cerca, en verdad su rostro me parece conocido, sin querer ser muy obvio me le quedo viendo fijamente hasta que lo recuerdo.

-Oh!- sonrío- Eres el jovencito que se sintió mal el otro día- el chico levanta la mirada, parece un poco desconcertado, pero poco a poco sonríe amable

-Si...- se sonroja.- soy yo, de nuevo, gracias por tu ayuda.-

-Espero que estes mejor- desvía la mirada

-Si... lo estoy...- parece un poco preocupado

Su mirada fija en el menú frente a él. Se ve incómodo con mi presencia, así que decido alejarme para que pueda elegir.