Bajo el mismo cielo

Capitulo 46

Min Hwan (POV)

— Aquí está la orden – Gyuri me dice mientras pone el café moka sobre la encimera

— Gracias.

— No hay de qué- me guiña el ojo antes de girarse a seguir preparando órdenes.

Rápido rodeo el mostrador, tomo el café y lo llevo hasta la mesa en la cual está sentado Seung Hyun.

— Hola amor – le doy un beso en los labios antes de sentarme junto a él, dejando el café frente a él.

— Hola.

— ¿Cómo te sientes? ¿No has tenido recaídas? – lo interrogo, Seung Hyun hace evidente su molestia rodando los ojos.

— Sí, sí estoy bien, ya te dije mil veces que estoy perfectamente bien. – hago una mueca

— Es que... - llevo una mano a su mejilla, en verdad luce demacrado— no luces bien.

Seung Hyun golpea mi mano a un lado y me frunce el ceño.

— ¿Le estas diciendo a tu novio que no luce bien? – hace un puchero, sonrío.

— No es eso amor... tu sabes a lo que me refiero...

— Estoy comenzando a molestarme — se inclina para darme un beso — mejor hablemos de otras cosas. ¿Qué vas a hacer al salir del trabajo? Mis padres tienen un viaje el fin de semana, ¿por qué no vienes?

— ¿El fin de semana?

— Si, yo sé que cada día es más difícil para ti vivir con esos tortolitos que tienes por hermano y cuñado- me río.

— Sí, tiene razón— me hago el sufrido — aun mis ojos están dañados por esa vez que los encontré en su habitación... o esa vez en la cocina... o cuando no cerraron la puerta del baño... o...

— Sí, sí... ya entendí — Seung Hyun empieza reírse a carcajadas

Observo a Seung Hyun reír, en realidad me encanta ver como su rostro se ilumina con su sonrisa. Suspiro hondo, rayos, realmente estoy enamorado...

De pronto mi veo como su rostro cambia de semblante, lleva una mano a su cuello y empieza a toser.

— ¿Seung Hyun? – me alarmo al notar que está teniendo dificultad para respirar. — Tu inhalador, ¿dónde está? – le pregunto.

Lo veo señalar la bolsa de su pantalón, rápido busco en él y saco el inhalador para ponerlo en sus labios.

— Tranquilo amor... trata de calmarte- le susurro.

He leído que lo más importante para un asmático es no perder la calma cuando tiene una crisis, así que intento hacer que no se altere, que se tranquilice para que así su respiración vuelva a la normalidad.

Lo veo dar un disparo a su inhalador, y luego otro, y otro... y finalmente otro, hasta que son cuatro. Frunzo el ceño. ¿Desde cuándo tiene que dar cuatro disparos a su inhalador? La última vez que lo vi usarlo, eran solo dos.

Lentamente lo veo recuperarse. Le doy un beso en la frente sintiéndome aliviado.

— ¿Te sientes mejor?

— Si...- susurra

— ¿Qué pasó?

— Nada, parece que olvidé tomar mi medicamento hoy...- su voz suena apagada y raposa

Niego con la cabeza. Me ha dado un susto de muerte. Necesito poner más atención, no puede olvidar algo tan importante como tomar sus medicamentos.