Capitulo 39

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Ki Bum (POV)

Camino por el pasillo del Centro de Rehabilitación rumbo al comedor de visitas. La verdad es que estoy emocionado porque Hyung Jun ha venido a verme. ¡Dios! No sabía cuánto podría extrañar a mi hermano, estar tres meses prácticamente solo recibiendo cartas fue una tortura.

Quiero saber todo lo que ha pasado en este tiempo. Saber porque amá no ha venido a verme desde que autorizaron las visitas.

— ¿Ki Bum? – me congelo a mitad del pasillo.

Mi corazón se acelera al escuchar esa voz. Me detengo de la pared al sentirme un poco mareado por la impresión.

— ¿Eres tú? ¿Corazón? – muerdo mi labio al escucharlo llamarme así.

Me giro para verlo de frente. Eli está parado a mitad del pasillo, muy sorprendido de verme ahí.

— Así que aquí fue a donde te trajo tu hermano... - sonríe y se acerca a mí.

— Eli... - murmuro.

No sé qué hacer. No estaba preparado para esto. Inconscientemente vuelvo a mi hábito de rascar la piel en mi muñeca.

— Corazón, te extrañé...- me dice.

Su mano sujeta mi barbilla para levantar mi rostro.

— Ese día, salí por más "provisiones"- obviamente se refiere a las drogas— pero cuando regresé ya no estabas. Fui a buscarte a tu casa, pero nunca apareciste.- niego con la cabeza.

— Estuve en el hospital- le digo— tuve un aborto.

Eli suelta mi barbilla y da un paso atrás sorprendido.

— ¿Qué? ¿Un aborto? ¿De qué hablas?

— De que estaba esperando un bebé tuyo Eli- aprieto los labios, mi voz quiere quebrarse— pero yo... yo no quería reconocerlo, seguí consumiendo lo que me dabas y caí varias veces al piso ese día, ¿lo recuerdas? – asiente con la cabeza, aun puedo ver la sorpresa en su rostro— bueno, pues maté a mi bebé- frunzo el ceño— y tú me ayudaste a hacerlo.

Aprieto fuerte mis manos en puño. De pronto me siento muy enojado con él, pero no quiero ocasionar problemas, así que simplemente me giro y empiezo a alejarme.

— ¡Espera!- Eli me sostiene del brazo — corazón... yo no sabía... - aprieto los labios sin voltear a verlo.

Fijo la mirada en una de las paredes intentando contener las lágrimas.

— Lo sé...- respiro hondo — pero fuiste para mí una mala influencia, fuiste quien me dio las drogas, me hiciste compartirte... tú...

— Pero yo te quiero corazón...

Parpadeo sorprendido ante lo que me ha dicho. Escucho un jadeo frente a mí, desvío la mirada de la pared y al final del pasillo veo a Kevin observándonos fijamente con lágrimas en los ojos.

— ¿Kevin? – Eli lo ha visto también.

— Oh rayos...- murmuro.- Kevin...

Doy un paso hacia él, pero Kevin simplemente se gira y camina rápido alejándose de nosotros. Me siento como un mal amigo y no estoy muy seguro de porqué.

— ¿Era Kevin? – Eli pregunta.

Respiro hondo, me giro a verlo a la cara. Tengo que empezar a madurar, y he decidido a hacerlo desde este momento.

— Sí- le digo— Y no te atrevas a acercarte a él por su embarazo. Si no tienes nada bueno que aportarle, lo mejor es que lo dejes en paz.

— ¿Es mío? – aprieto los labios.

Bajo el mismo cieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora