Capítulo 31.

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Narrador Lucy Johnson

Estaba sola con Michelle acompañando a Sibila. Quién estaba en la jaula con mucho nervios y asustada. De la nada ella se reía de una forma siniestra, temerosa, luego empezaba a hablar con un lenguaje que nadie conocía. 

-Está relativamente loca.- me dice Michelle y yo asiento con la cabeza.

Veo como la luz del ascensor verde se prende dos veces, eso significa que alguien esta bajando. Se abren las puertas y es Dalila. Agarro el brazo de Michelle y nos escondemos detrás de unas cajas de cartón. 

Dalila trae una falda roja, una blusa blanca, una chaqueta roja formal, un labial rojo brillante en los labios, zapatos blancos y un peinado tomate hecho por una trenza. Ella camina en el piso de metal haciendo que el sonido retruene en el lugar.

Sibila nos queda mirando y le hacemos una seña para que no diga que estamos acá.

-Vaya, vaya. ¿Pero qué tenemos acá?- dice Dalila, sonriendo de oreja a oreja cínica.

Sibila se agarra de los barrotes riéndose siniestramente. Ella esta completamente transpirada y sudada de tanto moverse y hablar con nadie. Dalila baja las escaleras y se va caminando pero con una gran velocidad a la jaula de Sibila. Michelle abre la boca e intenta escuchar todo lo que hablan, yo estoy mirando y escuchando ya que asomo mi cabeza antes las cajas.

-Que pena que no puedas escapar de tu jaula.- dice la roja, haciendo un falso puchero y luego se ríe mostrando sus perfectos dientes blancos.

Sibila salta y se agarra de los hierros de arriba, luego coloca todo su peso en sus pies y cae en el suelo con los hierros rotos en sus manos. Lo tira entre los hierros de lado con una precisión perfecta para que puedan pasar. Salta y sale del agujero de hierros rotos. 

-Si sabe escapar ¿por qué no lo hizo antes?- me pregunta susurrando Michelle.

-Creo que se comporta como un animal. Cuando no esta en peligro esta calmada y actúa "normal" pero cuando alguien tiene malas intenciones se le activa toda su energía.- dije no susurrando, si no en voz baja.

Seguimos escuchando la conversación entre Dalila y Sibila.

-¿Escuchas eso?- dice Sibila y Dalila levanta una ceja - Quieren que te asesine.- Sibila sonríe de oreja a oreja dando un sentimiento de miedo a todos los que la escuchamos.

  «Se supone que Dalila es buena, nos quiere ayudar. Algo no me encaja en este rompecabezas »

Michelle se levanta a una velocidad increíble, yo la quedo mirando y levanto mi cabeza asomando para ver que fue a hacer, le aprieta una parte única del cuello y Dalila cae en el cemento desmayada. Sibila queda con los ojos bien abiertos, da un salto hacia arriba y se mete otra vez en su jaula como si nada hubiese pasado. Se coloca en posición fetal acostada en el suelo y empieza a balbucear cosas como en el momento anterior.

-Tenemos que llevarla a su habitación como si nada hubiese pasado.- dice Michelle y la toma en brazos pero hace una mueca algo así como de dolor.

-¿Qué ocurre?- ella cierra los ojos y luego la bota otra vez.

-Es demasiado pesada para subir las escaleras. ¿Qué tal si me ayudas?- yo asentí con la cabeza.

Michelle la toma en brazos y yo la quedo observando. Sentí como un raro escalofrío que paso por mi columna vertebral. Vi como Michelle se elevaba de una forma tan suave y fantástica hasta llegar arriba con Dalila.

Narrador Gerson Hodgson

Estaba aun acostado en la cama. Victoria esta parada con las manos cruzadas sola mientras que mira fijamente como una doctora me esta curando la herida... o al menos procurar que no se infecte. Por fortuna ya me saco la bala que tenía dentro, fue un gran dolor pero Victoria me ayudo a no gritar y aguantar mis molestias apretándole fuertemente su delicado y frágil mano con los dedos entrelazados.

Lucy: Empatía es venganza.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora