- No me mates - murmuré - No le he hecho nada a nadie.
- Será rápido, me han mandado y si no lo hago, me matarán a mí.
- No es justo, yo no he hecho nada malo, por lo menos explícame porqué.
- No te voy a decir nada, yo sólo cumplo órdenes.- rugió...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Estaba llorando. Me senté en la cama con la vista perdida, mis labios temblaban. Pasó su mano por mi cabeza, lo miré. -estabas llorando, llamando a tu madre.- se sentó frente a mi.
-soñé con ellos, soñé que los mataban, fue horrible.- me tapé la cara y comencé a llorar.- esto es demasiado, ya no puedo más, solo soy una chica, no puedo con todo esto que me está pasando.- lloré desenfrenadamente, me siento sola en esto, siento que todo queda en mis hombros, yo ni sé que hacer con mi vida y ahora esto. Por Dios.
Estoy desesperada.
-te digo la verdad.- me dijo, ni siquiera me lo preguntó.- ni siquiera sé de lado estoy.- susurró, lo miré. -siento que tengo que ayudarte y eso es lo que iba a querer mi familia.- alzó sus hombros.- y te soy sincero, Jo.- miró a mi alrededor.- no soy buena persona y nunca lo he sido, soy sádico, soy asesino, he matado a personas sólo por diversión, solo por que hasta me han hecho una mueca que me disgustaba, les quitaba la vida. Así por así.- expresó.
Lo miré detenidamente.
-no sé porque no me importa en lo absoluto.- dije sincera. -te veo y solo veo a un hombre incomprendido, que nunca lo han tratado con el amor que se merece.- alcé mi mano inconcientemente y peiné un poco de su cabello que estaba en su frente. Me miró y aún su mirada no me decía nada.-gracias por no matarme aún.- sonreí cansada.
-siento tratarte como te trato.- se disculpó. -nunca había conocido a alguien tan frágil y eso me molesta.- sonrió. Yo reí alzando una ceja.
-oh, perdón, señor tenebroso.- reí, él solo sonrió, pero al mirarme serió su cara. Lo miré detenidamente.- me estás mintiendo.- susurré.
-¿en qué?.- nuestras miradas se conectaron.
-me da la impresión de que si sientes.- cerró sus ojos por un segundo. Negó.
-el hecho de que tenga que tratarte, no implica que me agrades, porque no lo haces.- Junté mis cejas.
-osea... ¿Qué?.- me pregunté sacudiendo mi cabeza.-me confundes, ¿sabes?.- le pregunté. -primero, me haces sentir como si te agrado, son muchas las cosas que haces que me quedo pensando en eso. Me has salvado, me ayudas. Me tratas con... cariño.- abrí los ojos mirando el piso. Si. Era eso. Escuché su risa, lo miré de inmediato.
-¿cariño?.- preguntó riendo, como si fuera la cosa más estúpida que había dicho en mi vida.- por Dios, Jo, eres la cosa más insignificante del planeta.- abrí la boca indignada. Sentí un remolino de pensamientos malos acerca de él.
-¿Cómo puedes decirme eso?.- pregunte.- eres la persona mas bipolar que he conocido, que bipolar, ¡tripolar!.- a una velocidad me aprisiona contra su cuerpo. Lo miro con temor, pero me suelta.
-que no queda la menor duda de la diferencia que hay entre tú y yo, debes de mostrarme respeto, yo soy más que tú.- no puedo creer lo que están diciendo sus labios.