MÍO

Capitulo 11

Foto: Maureen

POR FAVOR LEER LA NOTA DEL FINAL

Magnus

Seguía sin entender muy bien el comportamiento de Alexander, en un momento parecía darme cuerda, y al otro quería alejarse de mí.

A su mamá perecía haberle caído muy bien, hasta me había invitado a comer mañana. Aunque creó que piensa que soy novio de Izzy. Ella es muy guapa, pero, no es mi tipo. No es la persona que me gusta, la persona a la que quiero.

Caminamos entre la gente, a pesar de no tener una muy buena facha, había bastante gente aquí metida. En el escenario estaban acomodando algunas cosas, quizá por eso había tantas personas aquí dentro.

Llegamos con Izzy, y agradecí internamente que la mesa estuviera cerca de una ventana.

- Iré a buscar a alguien para que atienda nuestra mesa.

- ¿Ya conocías este sitió? –Alexander se cruzó de brazos, mirándola.

-Pues, sí. Y tú también lo harías si salieras más a menudo con nosotros. -Se encogió de hombros.

- ¡Hey! –escuche que alguien hablo atrás de nosotros, esa voz me sonaba de algo. Era Simón-. Viniste-dijo mirando a Izzy, Alexander la miro enarcando una ceja.

- Por eso querías venir aquí...

- ¿Querías volver ya a casa? –lo miro sonriendo-. Bien, nosotros-tomo del brazo a Simón- iremos por allá. -Comenzó a caminar más cerca del escenario. Dejándonos solos.

-Mmm... Tú... ¿Quieres quedarte? –me miro.

-Si nos vamos, tendrías que volver a tú casa. Y tú no querías volver. –Sonreí.

-Bien, sentémonos aquí. –Tomo la silla y la jalo un poco para tomar asiento-. Es el lugar menos... concurrido, y tenemos aire fresco.

- ¿Café negro? –un chico alto de cabello azul eléctrico, y un arete en el labio, estaba parado frente a nosotros.

-Si, por favor.

-Un moka blanco, y ... ¿tienes algún postre? –no sabía en que se especializaba aquel lugar, y tampoco nos había llevado la carta.

-Hoy tenemos pastel de zanahoria, brownies con doble chocolate, pastel imposible*1, galletas con chispas de chocolate, y galletas de coco.

- ¿Te gusta el chocolate? –mire a mi acompañante.

-Si.

-Brownies de chocolate.

El mesero asintió con la cabeza y se perdió entre las mesas.

- ¿Qué más te gusta?

- ¿Eh?

-La vez pasada quedamos en conocernos poco a poco.

-Oh eso...-sonrió de lado.

- ¿O es que te molesta? –negó con la cabeza, reí- bien, entonces...

-Me gusta leer, escuchar algo de música, salir a lugares... no tan concurridos...

- ¿Te aburriste el día de mi fiesta? –apoye los codos sobre la mesa, y mi barbilla entre mis manos, sin quitarle la vista de encima.

-Bueno... es la primera fiesta, así, a la que voy. No me pareció aburrida, fue... divertida. Aunque no tanto el incidente de los pantalones-frunció el ceño.

- ¿Qué te molesto más... el hecho de mojarte o usar mi ropa?

Pensó un momento-: La ropa... -me miro alarmado- ¡No! –agito las manos en gesto negativo- es decir, no me desagrada tu ropa, en ti se ve... genial, pero, no me gusta usar eso.