Capitulo 15

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Capitulo 15

Bryan

— Lo siento, pero no podre ir — Me negué por tercera vez.  Rick había llegado de Pennsylvania y me insistía para que despidiera el año con su familia.

Una familia muy rota por cierto.  No sería buena compañía.  Desde que Constanza se había ido me la pasaba de mal humor y nada me animaba.  Ya había perdido la cuenta de las veces que había insultado a mi secretaria.

Constanza no tenía corazón.  Ni siquiera me había llamado en estás tres semanas.  No entendía como se mantenía tan firme después de las cosas que le.había gritado.  En ningúna obtuve respuesta.  No sé que demonio me entro cuando le dije todo aquello, pero ya estaba harto de su manera de ser conmigo.  Solo la conocía de un tiempo, pero tan pronto me sumergí en su cuerpo siento que me perdí.

Me perdí en la miel de sus ojos, me perdí en ésas curvas que me hacen delirar.  La necesidad era urgente, pero mi ego y mi orgullo eran enormes. ¿Qué hombre aguanta que una mujer no te quiera su cama? Ninguno.  Me siento como un plato sucio que luego tirás a la basura o como algo que sabes que no es lo suficiente bueno para ti. ¿Acaso no soy bueno? Tal vez soy un desgraciado en ocasiones, pero nada justifica la manera en que me trata.

Por nada en el mundo me espera que ella llegará a mi departamento.  Me había ido furioso y busqué a Eve en su departamento.  Nos tomamos dos botellas de vino y le dije que mejor fuéramos a mi lugar. Quería borrar de mi mente que estuve dispuesto abrirle a ella las puertas de mi casa y que mejor que metiendo a otra.

Me sentí totalmente preocupado cuando la vi frente aquélla puerta.  Sabía que ella no aguantaría mierdas y que el minúsculo avance que había logrado se había ido por el caño. Yo le importaba tan poco que el que me viera con otra no vi que la haya afectado.

Hace una semana me di cuenta que me pasaba y la realidad me dio de lleno en el pecho.  Constanza me gustaba.  Desde el primer momento en que la vi me gusto, solo que la quize alejar tratandola como una zorra.  Además su actitud envalentonada me enfurecía y me hacía sentir más intrigado sobre ella.

Constanza no era una zorra, pero si una bruja sin sentimientos.  Tal vez me lo merecía por haber tratado a tanta mujer como una cualquiera y haber pisoteado muchos sentimientos.

— Estás muy raro, Bryan — comento Rick al otro lado de la línea.

— No me pasa nada. ¿Cómo va el proyecto? — pregunto deseando saber aunque sea un poco de aquélla rubia que me tiene desvelado.

— Más que bien.  Obviamente falta muchísimo, pero todo va sobre ruedas.

Hubo un momento de silencio hasta que no pude más.

— ¿Cómo la lleva la ingeniera? — pregunte tragando saliva.

— Bastante bien y el departamento fue de su gusto.  Tal vez solo se está muriendo de frío. Hubieron unas fuertes nevadas — respondió animado—. Creo que pronto lo lograré — añadió y podía saber que estaba sonriendo.

Como me gustaría estar allí para calentarla.

— ¿Por qué lo dices? — pregunte apretando los dientes.

— Porque siento que las cosas entre ambos están siendo mas cercanas.

¿Qué? ¿Qué tan cercanos?

— ¿A qué te refieres con cercanos? ¿Están saliendo? — pregunte intentándo ocultar mi ansiedad.

Rick soltó una risa llena de diversión—. No, pero siento que sera muy pronto.

¿Enamorado de la hippie? ¡No puede ser! - SNSRTE 4 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora