¿Enamorado de la hippie? ¡No puede ser! - SNSRTE 4

Capitulo 23

Capitulo 23

Bryan

- ¿Podrías llevarte a los niños a la playa? - pregunto mi hermana colocándose unas sandalias.

La miré como si le hubiera salido otra cabeza y me negué. Ya llevaba una semana en su casa y ya mañana me iría a Barcelona. Quería hablar con Lucas.

- No. Tus hijos son unos demonios en tierra. Imagínate como se pondrán en el agua. ¿No has pensado que podría dejarlos ahogarse a propósito? - dije divertido y ella me dio una de ésas miradas asesinas que no funcionan conmigo.

- Mucho cuidado con lo que dices idiota. Mis hijos son unos angelitos - dice tomando su bolso azúl eléctrico-. Además hoy son las pruebas de vestido y tal vez te traiga información de tu adorada hippie - añadió con una sonrisa burlona.

¿Constanza esta en Miami? Un sentimiento demasiado fuerte invadió todo mi cuerpo y deseé verla.

- No la llames así. Ya no es hippie. ¿Cómo estas tan segura de que estará?

- Obvio imbécil, Laura me dijo que su madre la había amenazado y que tendría que estar aquí un mes antes para probarse el traje.

Me quede tan pensativo que no me di cuenta cuando Dana se había largado dejándome con aquéllos dos demonios.

- ¡Tío, es playa time! - chillo mi sobrina mientras se acercaba a mi corriendo.

La muy picarona llevaba un traje de baño rojo de una pieza y dos lindas trenzas en su cabello castaño.

- Se nota que pasas mucho tiempo con Laura - Adriana se hecho a reír y yo la tome en brazos.

Una hora después estaba con los dos en la orilla de la playa. El lugar estaba muy concurrido así que no quería alejarlos de mi lado.

- Mamá dice que primero se unta bloqueador solar antes de ir al agua - dice mi sobrina cruzándose de brazos.

- Entonces sientese ahí y yo te lo aplicó - digo divertido y ella muy obediente se sienta.

Me acomodo a su lado con Bradley entre mis piernas. Buscó en la mochila donde había echado todo lo necesario y saque el bloqueador.

- Tío, ¿Estás triste?- pregunto Adriana mirándome con ésos lindos ojos inocentes.

Suspiré y con una sonrisa le aplique la crema en el rostro-. No estoy triste, Adri. Estoy muy feliz de estar con ustedes.

Adriana frunce el ceño y con su pequeña manita acaricia mi mejilla-. Yo te quiero mucho tío y se que estás muy triste.

- ¿Qué te hace pensar que yo estoy triste? - pregunto continuando mi tarea con sus brazos y piernas.

Adriana se pone en pié y niega con su cabecita.

- Porque estás aquí y tu no vienes mucho. ¡Ya se, hay que conseguirte una novia! - chillo emocionada mientras aplaudía.

Bradley decidió unirsele y comence a chillar mientras reía.

- Tío quiere besos - murmuro Bradley.

- Cierra la boca mocoso y tú, Adriana no necesito novia - digo desesperado antes de que comiencen a llamar la atención.

Adriana me dio una sonrisa maliciosa y comenzo a correr por toda la orilla de la playa.

- ¡Mi tío está buscando una novia! - gritaba a los cuatro vientos.

La madre que la parió. Coloque a Bradley debajo de mi brazo y en el otro brazo la mochila, para comenzar a correr trás ella.

- ¡Adriana, ven aquí!