Parte 24

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- ¡Bruk, espera!- lo escucho gritar pero sigo caminado sin mirar atrás y entro a mi casa, subo a mi habitación y me tiro a la cama a solamente llorar.
Siento como tocan mi puerta pero no tengo ganas de pararme. Abrazo mi almohada y siento como la puerta se abre después de unos tantos toques.
- Bruk, ¿Que pasa?- Aiden me habla desde alguna parte de la habitación pero no hago ningún esfuerzo por mirarlo.- ¿Es por Natsu?.- se queda callado esperando seguramente mi respuesta. No le digo nada, Siento como se sienta en la cama.- ¿No me quieres hablar?- le escucho decir y después suspira.- O ¿no tienes ganas de hablar?
- No quiero hablar con nadie, porfa vete y dejarme sola.- le contesté para que se fuera.
-...¿Te declaraste?- me dice con cierta tristeza.
- Si, y le di un beso.- dije por fin recordando la expresión de Natsu.
-¡Un beso!- grito derepente Aiden.
- Si, un beso.- escucho como se reí.- No te rías por favor.- lo miro con los ojos llorosos por recordar la cara de Natsu.
- Bruk tu eres fuerte lo superarás.- me siento en la cama y Aiden me da un abrazo.
- Gracias... te quiero Aiden.- le dije mientras me abraza.
- Yo también Bruk.- me apretaba más fuerte.- Entonces... ¿el te rechazo enseguida?.-me separo de Aiden y lo miro a los ojos.
- No... yo salí corriendo después de confesarme, mejor dicho no le di la oportunidad.- miro hacia otro lado cuando siento que voy a llorar.
-¿Sabes que tienes que enfrentarlo?- me dice con una voz de preocupación.
- Si...- solamente eso respondo antes de que en mi garganta se hiciera un nudo. Después de lo que le dije a Aiden el solo me abrazo una vez más y se fue. Cerré los ojos y abrace mi almohada.

- Hey... - escucho como alguien me llama pero no quiero ver quien es.- Vamos es hora de levantarse.- me mueve y abro los ojos lentamente, viendo quién era.
- ¿Mamá?- digo mirándola.
- Bruk tienes que levantarte... se que te rechazaron se que es duro, a todas nos han rechazado alguna vez.- Me dice.
- No me han rechazado... escape antes de que me dijera algo.- me tapó completamente.- Mamá ¿Te puedes ir? No tengo ganas de hablar.
- Está bien.- escucho sus pasos y la puerta cerrándose. Me destapó y miro mi habitación, veo la ventana por donde se filtran pequeños rayos de luz a través de las cortinas, busco mi celular y veo la hora.
- 8:30... alcanzó a llegar al colegio.- me levanto, me baño, me visto y tomó mi mochila. Bajo a tomar desayuno encontrando a Aiden hablando con mamá pero al verme se calla y se sienta a la mesa.
- Hola Bruk, tan linda como siempre.- lo miro extrañada y el sonríe.- ¿No te miraste en el espejo?- dice mientras apunta con el dedo al espejo en la pared.
- ¿Tan mal estoy?- le digo a lo que él asiente con la cabeza. Camino al espejo y me veo, tengo los ojos rojos, estoy pálida y con ojeras.- Demonios voy a tener que maquillarme.- camino de vuelta a la mesa y me siento.
- Toma desayuno Bruk ya se te hace tarde.- deja un tazón a Aiden y a mi.
- ¡Mama!- dijimos Aiden y yo al mismo tiempo lo cual asustó a mamá que estaba lavando los trates.
- ¿Que pasa?- se da vuelta y nos mira extrañada.
- Tengo yogur en mi tazón, nunca me a gustado.- dice Aiden mientras levanta su cuchara.
- Y yo tengo leche, sabes que la odio.- mamá mira nuestros tazones.
- ¡Oh! Es verdad lo siento estoy distraída.- se da vuelta y sigue lavando, Aiden y yo cambiamos los tazones.- Bruk, Aiden son las 9:10 llegarán tarde si no se salen ahora.- nos dice mirando su reloj.
- ¡Mierda! De prisa Bruk.- se echa unas cucharadas de cereal con leche a boca.
- ¡Espera ni siquiera lo probé!- me tira del brazo, toma su mochila y yo la mía.
- Si llegó tarde otra vez me van a castigar.- salimos y entramos al auto.
- No comí nada, tendré hambre todo el día.- prende el auto y partimos.
- ¿Para que tienes amigas? Si no son para alimentarte.- me dice.
- Yo no tengo amigas para eso.- lo mire y después fijé mi mirada hacia el paisaje pensando que la conversación se había terminado.
- Oye, ayer Natsu me llamó y preguntó por ti.- me dice mientras mira al frente.
- mmh... ¿Y que le dijiste?-no dejo de mirar el paisaje y me muerdo el labio.
- Que habías estado rara y eso.- me dijo.
- ¿Nada más?- le dije y lo mire.
- En realidad me dijo que te dijera que lo esperes afuera del colegio... quiere hablar contigo.- me mira y después vuelve a mirar el camino.
- No lo voy a esperar.- dije por última vez.
- Deberías esperarlo, escucha lo que te tiene que decir.- después de lo que dijo Aiden nos quedamos en silencio.
Después de un rato Aiden me dejo en el colegio y se fue. Empeze a caminar en dirección a mi salón.
- ¡Bruk espera!- veo quien me llama es Mila que corre en mi dirección.
- ¡Rápido que llegamos tarde!- corre lo más rápido que puede y se detiene justo frente mío.
- Me vengo corriendo desde mi casa.- me dice mientras intenta respirar más calmada.
- Corres desde que tenías 10 no debería sorprenderme.- le digo dándole un pequeño golpe en la espalda.
- Mejor vamos ya me recupere.- comenzamos a caminar, subimos al segundo piso, vemos que la puerta está cerrada y nos miramos.
- Estamos muertas.- digo y Mila toca la puerta.- nos van a matar, el profesor Ignacio se me había olvidado.
- ¿Estas son horas de llegar señoritas?- nos mira con superioridad.
- Lo sentimos profesor, yo me quedé dormida.- dice Mila.
- Yo me retrasé, porque tuve un problema familiar.- mentí para que dejara pasar.
- Está bien, señorita Bruk pase.- Miro a Mila y al profesor. No se porque pero siempre e sospechado que entre Mila y el profesor hay algo.
El profesor sale de la sala y cierra la puerta dejando a todos en una incógnita.
-¡Bruk!- me doy vuelta y todos me miran, veo a Nora que mueve las manos para llamar mi atención. Paso la mirada por todos y me siguen mirando.
- ¿Que me miran?- hablo alto para que todos me escuchen.
-¡Bruk, ven!- Nora se para y me lleva a mi asiento, saca un estucher lleno de pinturas.- Maquillate tienes una cara horrible.- tomó el espejo.
- Mierda se me había olvidado.- me puse base, me pinté los labios y me delinie los ojos.
Después de un rato el profesor llegó junto con Mila la cual está feliz. Las horas pasaron y pasaron, Aiden me llamó para asegurarse de que no me escapara.
- ¿Que voy a hacer?, no lo quiero ver.- hablé y Nora me miro.
- Tranquila va a salir bien, y si no... bueno estaremos aquí para ti.- me dio una sonrisa y la campana para salir sonó.- ¡Fuerza Bruk!- me gritaron ambas y se despidieron con una sonrisa.
Caminé con la esperanza de que él se arrepintiera, pero ahí estaba con una chaqueta negra ajustada, su cabello rojizo peinado hacia atrás y unos pantalones que le apretaban el trasero. Me mordí el labio mientra me acercaba, se dio vuelta y cruzamos miradas, caminé un poco más rápido y quedamos frente a frente.
- Hola Bruk.- me dice con una sonrisa.-¿Como estas?
- ¿Como crees tú?- le dije y miro hacia otro lado.
- Lo siento eso fue estupido.- suspiro y siguió.- Tenemos que hablar muy seriamente sobre lo que pasó ese día.- lo mire directamente a los ojos y apreté mis labios.
- Está bien, pero... vamos a otro lado, por favor.- dije casi sin voz porque se lo que viene a hora....
 

Bueno bueno eso es todo perdón por la demora pero tengo demasiada tareaa y no me a dado tiempo de escribir, eso es pues y adios..
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Mi raro y loco amor (yaoi/gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora