La madre de Lennor estaba pasando por el pasillo en ese momento cuando él la interrumpío para charlar con ella. Su madre era de esas mujeres que amaban las cirugías, estaba operada de la cabeza a los pies.
—Madre, necesito hablarte.
—Oh, mí bebé. ¿pasa algo?
—¿Crees que soy gay?—aquella mujer puso los ojos como platos, era extraño que un adolescente tuviera esa confianza con su madre.
—La pregunta es, ¿Sientes que eres gay?
— No se lo que soy, creo que estoy atrapado en un cuerpo prestado.
—Entiendo, he escuchado casos así. Pero necesito que sepas que en cualquiera de tus decisiones yo te apoyo sin juzgarte, puedo llevarte a donde un psicólogo para que nos confirme esto.
—Gracias madre, se que puedo confiar en ti.
—Llamaré a mi psicóloga ella es genial y atiende a sus clientes en casa.
Cuándo aquella señora llegó Lennor estaba súper nervioso de que lo mirara como si él fuera algo extraño, se sentía raro, esa mujer hacia todo tipo de preguntas pero lo que mas le incomodaba era que con cada respuesta que le daba ella lo miraba como si fuera algo extraño .
—Puedes tomar como opción el cambio de sexo, ¿Te gustaría? — comentaba aquella mujer, él pensaba en que esa mujer estaba loca. Lennor creía que la idea dada por la psicóloga era antinatural pero la idea se metió en su cabeza devorando todos sus conocimientos acerca de lo que era correcto o no, lo que era natural y lo que no lo era.
—Seria maravilloso, conozco los mejores cirujanos del país —añadió la madre con una sonrisa la cuál no podía ser fingida.
—Su hijo necesita de todo su apoyo y a ti Lennor, no te cierres al mundo tu ser interior es una muy hermosa chica y ojala pueda algún día verla exteriormente — dijo mientras se marchaba de la casa.
—Mamá —miro a su madre con ojos de confusión.
—Oh bebé, debes investigar sobre todo esto, yo te apoyo pero necesito saber si estás seguro de que quieres dar este gran paso —dijo colocando la cabeza de Lennor en su pecho.
Había pasado una semana, y Lennor no salía de su habitación solo investigando sobre el famoso cambio de sexo, los datos decían que para cambiarse de sexo no era necesario ser gay o lesbiana. Supuso que era algo de encontrarse así mismo no de ser una mujer. Había vivido su vida siempre inconforme sintiéndose vacío. Pero era el momento de cambiar ,de ser quién en realidad era. Porque él estaba seguro que no era lo que veía al espejo. Se apresuró a bajar las escaleras para hablar con su madre, ella estaba sentada en el sofá mientras leía sus revistas.
—Lo haré —dijo mientras la miro con gran seguridad.
—No entiendo —respondió confundida era obvio no entendía de lo que le estaban hablando.
-— El cambio de sexo.
—Dios mi niño —Corrin abrazo tan fuerte a su hijo que le transmitió una seguridad y confianza superior.
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Soy yo
RandomA los 16 años intenté descubrirme a mí mismo y me di cuenta de que era una persona totalmente diferente, estaba en un cuerpo que no era el mío.