MIENTRAS DORMÍA...
Lena despertó, sus párpados pesaban demasiado, su cuerpo se sentía adolorido, como si alguien la hubiera apaleado repetidas veces hasta dejarla fuera de combate. Su cabeza le dolía, pasó una mano por su cabello alborotado incorporándose. En ese momento se dio cuenta que estaba vestida con sólo su ropa interior, de inmediato se cubrió con la delgada sabana y miró con más atención a su alrededor sintiéndose confundida. ¡No era su habitación! ¿En dónde se encontraba? Frunció el ceño mientras a su cabeza llegaban imágenes entrecortadas de ella tomando su té favorito sentada en una mesa en ese agradable café mientras leía la ultima novela que había comprado en París la ultima noche que pasó en la cuidad. Entonces un hombre se sentó a su lado...¡Ryder King!
¡Oh Dios! Gimió cubriendo con sus manos su rostro sonrojado. ¡Él la llevó hasta su casa! ¡Estaba en casa de Ryder King! En su habitación... Y ella... ¡Estaba semidesnuda!
Sobresaltada se cubrió aferrándose a las mantas y con la mirada buscó por la habitación su ropa, esperaba que él no la hubiera ocultado para mantenerla en su casa. Cuando sus ojos la encontraron sobre uno de los sillones color magenta de una plaza y largo respaldo que formaban parte de la decoración. Pasó una mano por su cabello y el edredón se deslizó por su hombro; entonces cayeron sobre ella como agua helada escenas vergonzosas que la hicieron sonrojarse.
¡Oh Dios! Gimió dejándose caer en la cama y ocultando su rostro sobre la fresca almohada.
Se sonrojó al pensar en Ryder King desnudándola. Mirándola, nunca antes un hombre la miró desnuda o al menos con ropa interior. ¿Cómo se había atrevido? Había violado su privacidad, de la misma manera que hizo al instigandola a hablar de su vida, de su pasado. ¡No tenia derecho! Él no era nadie en su vida. Fue su jefe por dos años, pero la relación había terminado cuando ella presentó su renuncia y dejó la constructora. Nada los unía, ni siquiera por todo ese tiempo tuvieron una conversación formal acerca de como habían pasado algún fin de semana o de trabajo. Él sólo daba ordenes de lo que quería y ella obedecía procurando hacer lo mejor que podía el trabajo por el cual él le pagaba.
Lanzó un gemido en voz alta. Levantó la cabeza apartando su cabello del rostro. Volvió a sentarse en la cama aferrándose a las mantas mientras pensaba que hacer para salir de ahí.
El día a interior no se lo permitió, la mantenía secuestrada. Quizá si se apresuraba podría salir sin que Ryder King pudiera detenerla. Esperaba encontrar rápidamente su cartera en donde tenia sus tarjetas y un poco de efectivo para tomar el taxi y volver a casa.
Se levantó arrastrando con ella el hermoso edredón, se acercó a su ropa buscando su cartera tenia la esperanza de que estuviera ahí y así poder usar su móvil para hablar con Tatiana, ella la ayudaría...
Arrojó su suéter, sus pantalones, su chaqueta sin encontrar entre ellos sus otras posesiones. Maldijo en voz baja.
- Buenos días también a ti.
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SAGA KING'S
RomanceHijos de Frank King, un hombre que se había hecho a sí mismo, fundador de "Construcciones King". La fortuna y el nombre que había creado ahora pasaba a sus dos hijos mayores, Ryder y Panther King, que a pesar de llevar el mismo apellido y tener el m...