Parte 35

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Estaban casi todos sus familiares, estaban algunos de sus amigos. Al llegar, Danny me abrazó.
―¿Te he dicho antes que te amo?
Mi pobre corazón se agitó.
Me levantó del piso.
Me besó.
―¿Funcionó? ―le pregunté.
―La noticia está siendo expandida por todos mis amigos y contactos. Esperamos que de aquí a mañana la denuncia ya esté formalizada. Tenemos pruebas suficientes según nuestro abogado, sólo necesitamos comprobar que este maldito trabaja para Tottenham y será todo.
Me besó de nuevo. Me dejó en el piso.
Todo el mundo estaba mirándonos. No conocía a la abuela, Dan nunca quiso llevarme con ella porque era intimidante de verdad.
Ella caminó despacio hasta nosotros con ayuda de alguien a quien no conocía.
―Debes ser Grey Bancroft.
Tomé la mano de Dan.
Asentí.
Estaba muy seria, también yo.
―Mi familia está en deuda contigo.
―Yo estoy en deuda con su familia ―le corregí.
―No más ―dijo.
Su voz era áspera. Dan apretó mi mano.
―Eres astuta. También eres completamente bienvenida a la familia. Nuestra familia te brindará protección por siempre, a ti y a tu familia.
Me extendió sus brazos, y me abrazó y me soltó.
―Quiero gente en ambas casas, un guardaespaldas designado para cada miembro de su familia y cinco agentes en la empresa de Monique Bancroft ―dijo, con su áspera voz a un tipo que había visto antes en una cena.
Se alejó de nosotros. Danny volvió a abrazarme.
―Gracias.
―Quien te haga daño no es digno de una sonrisa hermosa ―dije.
Me besó.
―Bien, todo el mundo a trabajar o a dormir, mañana es un día largo para todos nosotros ―dijo, separándose de mí.
Se movió todo el mundo y yo fui con Josh, quien seguía viendo su laptop con la grabación.

Llevaron a Josh a casa, habían algunas personas vigilando allí.Obviamente le informaron a papá y a mamá.
Los amigos de Danny se quedaron un rato, pero yo ya estaba algo cansada y mis pies dolían. Malditos Louboutines, eran tan hermosos y tan dolorosos.
―Bien, saben que deben tener extra precaución ahora ―dijo―, son de las personas más cercanas a mí, pueden hacerles daño.
―¿Qué hay de Su? ―preguntó Gwen.
―Ya hay alguien cuidando de ella. Es hora de dormir, chicos, Grey está muriendo de sueño.
Sonreí.
Me tomó en brazos, y me llevó escaleras arriba. Me dejó en su cama, y cerró la puerta.
Fui a ver por la ventana. Habían algunas personas vestidas de negro paradas cada cierta distancia.
Él me abrazó por la espalda y le bajó el cierre a mi vestido.

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Siento mi ausencia, mi horario nuevo es horrible, así que lo más probable es que suba los jueves que tengo libres y los domingos :( obviamente si me queda algo de tiempo los otros días subo :) 

Novios Falsos 1: Nunca dices lo que sientesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora