Capitulo 45: finales felices

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Fui a dar una vuelta, pasando la tienda de regalos llena con rosados claros y azules, mirando los azules y preguntándome por qué había querido un hijo en primer lugar, mi pequeña niña es maravillosa. Me encontré a mi mismo caminando de regreso al cuarto de lali, después de no se cuanto tiempo que había pasado. Parecía como si había sido una eternidad desde que habíamos llegado aquí, y ese probaba ser el punto.

Dentro del cuarto, lali estaba durmiendo silenciosamente, y para mi gusto, rochi estaba profundamente dormida en la cama al lado de ella. Le sonreí a mi amiga, acababa de pasar por todo esto también. Noté que una diminuta cama estaba al lado de lali, mi preciosa hijita dentro, y en una incubadora estaba el bebe de rochi , las enfermeras ocupadas revisando todo el equipo colgando alrededor de él.

-Esto es asombroso- escuché a alguien susurrar a mi lado, y me giré para encontrar a poli, su cabello completamente desordenado y su cara roja por llorar. Me sonrió y luego señaló hacia una enfermera poniendo un pequeño bebe en la incubadora, cerca de mi hija.

-Ese es mi hijo- me contó pablo. Solté mi respiración. Por mucho, esta era el día más feliz de mi vida. Me giré hacia mi amigo y sonreí, dándole un cálido abrazo.

- Christopher ignacio martinez igarzabal - suspiró pablo, sonriendo a través del vidrio.

-Ese es por mucho el nombre más largo en todo el mundo- le dije bromeando, pablo me rodó sus ojos pero se rió. Sabía que los dos nombres eran por su abuelo y el de rochi.

Mientras me paré ahí con uno de mis mejores amigos en este mundo, Mientras mirábamos a nuestros hijos, me sentí nuevo, Me sentí diferente, cambiado. Estaba listo para esto. Estaba listo para todo. Estaba ansioso, sostener ese bebe de nuevo en mis brazos, y asegurarme de que nunca jamás algo le lastimara.

-Quien sabe,-dijo pablo en un tono liviano. -Tal vez esos dos terminarán juntos un día.- Empujó mi hombro suavemente y perdí mi balance. Le di una buena mirada envenenada, cruzando mis brazos.

-Mantén a tu hijo lejos de mi nena- refunfuñé, pero ambos lo olvidamos y sonreímos.

Dos años después.

 cuenta lali 

¿Cómo describes los momentos más felices de la vida? ¿Cuáles son tan especiales que están clasificados de tal forma? 'Los más felices'.

Para mí, cada sencillo día era el más feliz de mi vida.

Mi bella hija. Alegra era tan inteligente. A los dos años, ya se estaba hablando tanto. A veces casi tenía sentido, pero ella continuaba balbuceando. Era la pequeña niña de papá como a mi esposo le gustaba señalar. Alegra amaba ayudarme en la panadería, pero en el momento en que su padre estaba en casa difícilmente dejaba su lado. A piter le fascinaba. Siempre tenía la más grande de las sonrisas en su cara, y amaba absolutamente siempre que ella hacia sonar fuerte el piano.

Estábamos casados cuando alegra tenía cinco meses y me veía casi normal de nuevo. Usé un vestido blanco simple, adornado sencillamente a través del los pechos y el torso por encaje y bordados. Para nuestra luna de miel, fuimos de regreso a Inglaterra, visitando a sus padres con la pequeña alegra por unas semanas, antes que ellos se hicieran cargo de ella mientras volábamos a Paris por unas noches, de modo que realmente pude echarle un vistazo, no como la última vez que había estado allí.

Increíble. Mi vida era simplemente increíble. Ahora, dos semanas después del segundo cumpleaños de alegra y chris, estaba de siete meses de embarazo con nuestro segundo hijo. piter no sabía, pero yo sabía que estábamos teniendo un niño esta vez. Quería mantenerlo como un secreto, pera ver cuán feliz estaría. Por supuesto, había dejado las sutiles insinuaciones aquí y allí. Las ropas azules y verdes, las cobijas, el borde alrededor del cuarto blanco al otro lado del de alegra.

Y rochi...Ella y pablo habían tenido otro bebe. ¡Bueno, bebes, supongo! Tuvieron gemelos el año pasado, dos pequeñas niñas llamadas marianella y valeria . Christopher estaba absolutamente divino. Él nene más lindo que jamás había visto. Al menos hasta que vi como se vería el hijo de piter. Era diminuto, seguro, ¡pero era tan listo! Estaba leyendo y hablando tan rápido que me asombró. Por supuesto, no podía recordar nada, como cualquier niño, ¡pero aún así era tan dulce!

Cande y vico se casaron el año pasado. Una boda absolutamente hermosa. Para mi, fue pasarse de la raya, pero así es como siempre había sido cande. Ahora estaban tratando de tener un bebe, pero estoy bastante segura que de todas formas a cande le gusta toda la actividad que estaba teniendo.

nico y euge toadavia estan viendo si casarse , pero tienen a un linda bebe llamanda Rufina es muy tierna rubia como ambos y cumplio un año hace unos dias. 

Mery y Benjamin se casarian en una semana mas. Mery andaba como loca viendo los arreglos y por cierto cande, euge y yo somos las madrinas. Benjamin siempre fue un desagrado, pero con el tiempo empezó a cambiar bastante, bah, mery lo cambio totalmente. Se empezó a unir cada vez mas al grupo de amigos.

Hoy era un maravilloso día veraniego. Pablo me estaba trayendo a casa después del un evento, y ambos estábamos colgando de las ventanas, por así decirlo. Mi cabello volaba alrededor mío mientras miraba con los ojos entrecerrados contra el brillante sol, sosteniendo mi gran vientre bajo el ancho vestido negro. poli me miró y sonrió. Ambos habíamos pegado fotos de nuestros hijos dentro del espejo retrovisor de la van, cada vez que las veíamos nos animaban un poco más.

Paró en la entrada, al lado del carro de piter y me ayudó a salir, como el caballero que era. Ya estaba a punto de llorar por lo dulce que era, pero me alejó. Él podía decir cuan emocional estaba. Me reí mientras retrocedía en la entrada, enviándome una tímida mirada, y me dirigí hacia dentro.

-¿Hola?- llamé, poniendo mi chal sobre el mesón. Silvestre vino rápido hacia mi y sostuve mis brazos abiertos mientras el saltaba dentro de ellos. ¿Dónde estaban todos? Eché una mirada alrededor de la casa. No estaban en la cocina o en la sala. -¿piter?- llamé. Caminé por el pasillo y revisé todos los cuartos. Pero aún no estaban allí.

Fui hacia el piano y entonces los vi. Estaban sentados en la playa, alegra estaba corriendo alrededor mientras piter construía un castillo de arena, todavía usando su ropa de trabajo, lo que simplemente se veía adorable. Ella estaba vestida con un lindo vestidito de verano, escapándose de las olas antes de caer sobre su colita y reír. Cada vez que eso pasaba, piter la ponía en su regazo para asegurarse que estuviera bien.


A kilómetros de distanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora