A kilómetros de distancia

Capitulo 48: hijos

-lali está en la cocina terminando la torta- le dije a rochi y poli

-Será mejor que tenga algo sobre lo que pueda sentarme- masculló cande. -Y algo que pueda comer, ahora!!!- Me corrió como si fuera un perro y entró balanceándose de un pie a otro a la cocina mientras poli empujaba suavemente a su hijo hacia la sala con los otros niños. A veces el chico era tan tímido que era casi triste.

-¿Qué le pasó a tu cabello?- Pregunté, agachándome para mirar de cerca lo verde en éste. Chris se sonrojó y agachó la mirada, dando pataditas con sus pies.

-Christopher ayudó a alai y paloma a cobrársela a leon- susurró alegra, escondiéndose detrás de mi pierna.- alai falló y le dio a él en cambio.- pablo y yo simplemente nos reímos y sacudimos la cabeza, mandando a los niños a jugar con sus hermanos.

Fue entonces cuando noté lo mucho que se parecían los niños a sus padres. alegra era la viva imagen de lali lo que me hacía increíblemente feliz, y suertudo, al tener dos hermosas chicas junto a mí. Santino, sin embargo, había heredado mi densa y rebelde maraña de cabello. Sus ojos eran de un verde brillante y ardían con curiosidad. Sus labios, sin embargo, eran los de su madre. Rellenitos y como si estuvieran haciendo un puchero constante, lali juraba y  que algún día sería un rompecorazones.

No estábamos seguros si su tamaño sería entorpecido por ser prematuro, o si simplemente iba a ser delgado como su padre, pero Christopher era un niño saludable, aún si estaba un poco del lado flacucho. Él se veía igual a pablo, incluso en el cabello cafe castaño y medio ondulado. Las gemelas tenían ambas el cabello rubio y ondulado el cual rochi se negaba a cortar como el suyo. 

-lali, me disculpo de antemano si mi fuente se rompe y arruino cualquier mueble,- suspiró cande, sentándose en una silla, aceptando felizmente un bizcocho que le pasaron.

-¿Entonces como Christopher llegó dos meses antes, ahora este niño va a estar dos semanas tarde?-Se rió lali, poniendo una mano sobre la barriguita de cande. -Nuestros niños son alborotadores- cande sonrió con el bizcocho en boca y rochi y lalise rieron.

-Compramos un terreno- dijo pablo parándose junto a mí y mirando los niños.

-¿En serio? ¿Vas a construir en él?- Él asintió.

-Fue un poco tarde la verdad, pero con la panadería cerrando mientras cande no está por licencia de maternidad, pensé que podría tenerlo terminado. rochi y con ayuda cande puede decorar cuando nos mudemos.-

-¿Dónde es? - Pregunté, mirando a adela largarle una muñeca a un Christopher fastidiado.

-Al lado.- Mi cabeza se giró a mirarlo por la sorpresa.

-¿Estás bromeando? -pablose rió y sacudió la cabeza. -¡Eso es fantástico! falta que euge y cande se muden y estamos todos juntos hablando de ellas donde estan ? - mire a cande

- estan por venir - respondio mientras miraba a alegra

-Será bueno tener a los chicos creciendo juntos- dijo con una sonrisa.

-¿Hola?- Una fuerte voz retumbó desde la entrada. -¿piter? ¿Están en casa, chicos? Será mejor que todavía necesites mi ayuda. Por mucho que no quiero que tu y lali sucumban bajo bandejas, de verdad quiero ir a casa antes de que mi esposa reviente y salga un niño.-

-¡Sorpresa!-Gritó alegra saltando desde la sala emocionada. vico la miró completamente confundido hasta que el resto de nosotros gritamos '¡sorpresa!' y lali sacó la torta, velas ya encendidas.

Tomó un momento aclarar que de hecho, nosotros no necesitábamos ayuda con entregar bandejas, sino que era su fiesta de cumpleaños.

Ese noche fue la primera noche que noté como Christopher actuaba diferente alrededor de alegra. Le dio su segundo trozo de torta, la dejó jugar muñecas con él, y cuando se cayó y se golpeó su rodilla, él acarició su espalda hasta que ella dejó de llorar.

Fue la primera vez que lo noté, pero definitivamente no fue la última.