Capitulo 42: Padre

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cuenta peter

Estaba esperando por ello.

Cualquier día ahora y habría una llamada. 'Estamos en el hospital', 'rompí fuente'. 'Arranque estúpido, te voy a matar si no inicias ese carro'.

Cualquiera de ellas serían buenas noticias. En la primera semana de agosto estaba más que listo para que lali valla a tener a nuestro hijo. Más que listo para que nuestro bebe llegue al mundo. Más que listo para ser padre.

it's not time to make a change,

Just relax, take it easy.

You're still young, that's your fault,

There's so much you have to know.

Padre

Siempre que pienso en ese término inmediatamente pienso en mi propio padre. Realmente, él es la única persona a la que puedo imaginar en el rol. Hizo un trabajo tan espectacular como el mío, que no podía ver a nadie más que encajara en el trabajo, especialmente yo. Y, en unos pocos días, o semanas, habría una pequeña persona respetándome. Yo sería su padre.

La gran sonrisa estaba dispersa a través de mi cara antes que me diera cuenta.

Y, por supuesto, una vez me di cuenta, también noté que estaba parado en el medio de la oficina, papeles y un café caliente en mi mano mientras miraba perdidamente el espacio, soñando despierto sobre el día que estaba esperando viniera pronto.

-Em, ¿Sr. lanzani?- luna, mi recepcionista, preguntó suavemente. -¿Está usted bien, señor?- Salté y bajé mi mirada hacia ella, completamente confundido. ¿Por qué estaba ella en mi fantasía de una vida en familia?.

-Oh, si, muy bien- respondí, sonriendo débilmente. -Sólo pensando, eso es todo- luna me sonrió burlonamente.

-No se preocupe, señor- dijo. -Estoy segura que no falta mucho hasta que esté camino al hospital y tomando vacaciones- Sonreí. Había una buena razón por la que había contratado a luna. Poniendo de lado el hecho de que mi otra recepcionista era una idiota y completamente incompetente, y que luna había sido contratado sólo para que yo pudiera despedir a la otra , luna era una buena trabajadora y estaba probando ser una buena amiga.

-Hola, piter- mi ex recepcionista, inclinándose sobre su escritorio y moviendo despacio sus párpados hacia mi. Arrugué mi nariz y retrocedí un poquito. luna me rodó sus ojos y se giró de regreso al computador, adyacente al de la a mery . ¿Cuándo iba a tener el coraje para despedir la chica?

-Hola - mascullé y caminé dentro de mi oficina. Me senté y comencé a trabajar concentrado, reprogramando una reuniones y recibiendo llamadas de pablo y benjamin. vico acababa de dejar unas notas cuando luna llamó dentro de la habitación.

-piter, hay alguien aquí para verte,- su voz vino aburrida desde el altavoz.

-Hazlo entrar- dije, no quitando mi vista de las hojas que había recibido.

-Dije que podía, pero tu recepcionista lo está haciendo físicamente imposible. Lo cual probablemente no es una buena idea ya que su visitante está increíblemente embarazada y luciendo un anillo de compromiso bastante encantador.- Mi humor se levantó por completo y prácticamente me lancé a través del cuarto, tirando abierta la puerta y saliendo hacia la oficina.

-Escucha estúpida imbécil plástica. Me voy a casar con el chico, y tu no- lali llevó su mano izquierda hacia su cara. -Ahora estoy muy hormonal y muy enojada y definitivamente es una buena idea dejarme ver piter- Sonreí mientras escuchaba a la recepcionista morder su goma y cambiar su peso, sacando un lado de la cadera mientras descansaba sus manos en ella. luna se rió con disimulo y sacudió su cabeza, dando clic en el computador.

-Mire, señora- comenzó la molesta recepcionista en esa molesta voz. Se que lali me vio, pero aparentemente también estaba interesada en como avergonzarla. -¿Usted cree que es la primera persona en entrar fresca y tratar de reclamar a este chico? He estado tratando de obtener su atención por meses, y créeme, no va a estar interesado en su trasero embarazado.- Oppsss. No debería haber ido allí.

Hábilmente caminé alrededor de ella y le sonreí triunfante a lali, envolví mis brazos alrededor suyo y me incliné, besándola porque si. Mientras me alejaba le di una amplia sonrisa y ella me devolvió el favor, su sonrisa iluminó el cuarto. Aparté los flecos de sus ojos y la besé de manera inocente antes de girar mi cara hacia mis secretarias.

- me gustaría que conocieras a mi prometida, lali- dije felizmente. La sonrisa de ella cayó y su cara se empalideció mientras le daba la espalda. -Estoy muy complacido de verte- le dije a lali. -Incluso si es inesperadamente.-

Ella sonrió. -No había estado aquí antes, y pensé que debería venir antes de traer al bebe algún día.- Ambos nos reímos y sus ojos revisaron el cuarto. Se presentó a si misma ante luna mientras la recepcionista trataba de dar la idea que estaba trabajando, sentándose y levantando el teléfono.

poco para el final :) 

A kilómetros de distanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora