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"Y no hay mejor cosa que ver aquella luz en sus ojos, él podía siempre mirarlo y nunca dejaría de enamorarse"

Dos semanas después~~

Jong Woon no se sentía tranquilo del todo con la idea de regresar a Seúl, era demasiado arriesgado cuando estaban a punto de tener a sus hijos y no sabía en qué momento pasara aquello. Wook debía ser un poco más consecuente de sus peticiones pero él no quería negarle nada porque siempre era el egoísta desconsiderado que solo pensaba en sí mismo. En ese orden de ideas, realizó todos los trámites para su regreso a Seúl, lo mejor para él era pedirle ayuda a la policía, no era muy fanático de la idea, sin embargo prefería eso a que su familia estuviera insegura, más si aquel maniático estaba buscando a Wook para asesinarlo.

Era imposible tener una vida tranquila, sus sospechas de que Baek estaba planeando algo contra él y su familia eran cada vez más fuertes, Kangta hacia un trabajo estupendo como detective pero para Jong Woon no era suficiente información y comenzaba a pensar que la pesadilla nunca acabaría.

— ¿Woonie?

— Aquí estoy ¿Qué pasa Wook?—lo vio pálido y de inmediato corrió hacia él al ver que sostenía con fuerza su abdomen abultado

— Duele

— ¿Wook?

— Duele mucho, llama al hospital—asustado con la repentina situación Jong Woon marco el número de emergencias y como pudo hablo japonés para que se entendiera lo que estaba pasando ¿era el momento?, no podía ser estaba muy pronto tanto el cómo Wook esperaban que pasaran unas tres o cuatro semanas más antes de que los gemelos nacieran

— ¡Woonie!

— Respira amor, por todos los cielos no te vayas a desmayar—lo sostuvo antes de dejarlo acostado sobre la cama--¿hace cuánto estabas sintiendo contracciones?

— Esta madrugada pero eran muy leves por lo que no me preocupe—respiró de forma profunda para poder calmarse

— No te preocupes mi pequeño—habló en tono calmado al ver que Wook estaba comenzando a asustarse y las lágrimas se acumulaban en los ojos miel de su esposo, a eso era a lo que le temía si regresaban a Seúl en ese momento, aunque él también tenía muchas ganas de volver era consciente de que sus hijos nacerían en cualquier momento, el doctor se los advirtió en la última ecografía—es normal que los gemelos nazcan antes de tiempo, acabaste de cumplir siete meses y el doctor nos advirtió sobre ello

— Pero es que quería que esperaran un poco mas

— Pues al parecer quieren nacer en Okinawa—Wook sonrió levemente pero su gesto cambio a uno de dolor casi de inmediato, Jong Woon volvió a llamar al hospital donde le notificaron que la ambulancia se encontraba en camino. Mas asustado que el propio Wook espero a que las enfermeras llegaran

— Me preocupa que enserio sea el día—Wook lo miro con lágrimas en los ojos--¿Y si no nacen bien?

— Wook todo va a estar en orden, por favor no te preocupes por algo que no va a pasar

— Es solo que recordé lo que el medico nos dijo en Seúl, tengo mucho miedo—Jong Woon le dio un beso tierno ante de acariciarle los cabellos sudorosos

— Vas a ser un padre fuerte y si es el momento entonces tenemos que estar felices porque por fin conoceremos el fruto de nuestro amor

Ryeowook solo pudo asentir, estaba a punto de volverse loco por el dolor y las preocupaciones acumuladas. Desde el inicio todo fue difícil, no tuvo los cuidados prenatales como todos, Wook estuvo muy ocupado entre volver a confiar en su esposo y la aparición repentina del psicópata de su padre. Si el momento había llegado ahora el solo podía rezar porque todo saliera bien, quería que pasara más tiempo pero después de los últimos controles era probable que no superara el séptimo mes de gestación y ahora estaba a punto de conocer a sus hijos.

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