Capítulo 9 "La Mente"

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Cuando Ela empezó a bajar las escaleras, sintió que no terminarían de descender nunca. Sin embargo ese hombre la alarmaba y no se atrevía a dirigirle palabra, bueno, a lo primero, la espera se iba haciendo más y más larga. Escalón tras escalón y sólo se escuchaban los pasos de ese hombre. Ella se arrimó a la barra y alzo su mirada, apenas era visible un pequeño agujero de luz, que era el pozo donde habían descendido.

-Cuidado, puedes caerte.

-Yo solo quería- No la dejo finalizar la frase.

-Ver cuán lejos estábamos de la superficie. Sólo los especiales hacen eso.

-¿Pocos? ¿A qué te refie... - La interrumpió nuevamente.

-Shh, ya lo veras todo.

Ela ya estaba teorizando en su mente: ¿A qué se refería con esos pocos? ¿Había más personas en este lugar extraño? ¿Quién era realmente este hombre? ¿Y si se había dejado llevar a un secuestro? No eso era imposible, si alguien quería secuestrarla, no tendría tanta "tecnología" al hacerlo. Aunque si era cierto, nadie la encontraría, debajo de un pozo ¿Quién la buscaría? Además, ni ella sabía dónde se encontraba exactamente.

El hombre levanto el dedo índice de su mano izquierda, en ademan de que ella parase.

-Ya llegamos.

-Pero si todavía hay escaleras que restan descender.

-Abre tu mente Ela. Abre tu mente.

-¿Cómo sabes mi...

-Yo lo sé todo.

-¿Quién eres? – Ela estaba alejándose ante esta respuesta, subiendo los escalones nuevamente.

-Por favor, no lo hagas difícil. De cualquier modo, tienes que estar aquí, ven fácilmente. Ya lo entenderás.

Ela dudó, de todas maneras reflexiono. Si ya le había mostrado "ese lugar" ya pensaba que no habría vuelta atrás, debía continuar. Volvió a donde antes se hallaba.

-Me alegro de tu decisión. Ahora observa. Sólo observa- Colocó su mano izquierda en el aire, de frente.

De repente, parecía como si un escáner la estuviese revisando y detectando sus huellas dactilares ¿De dónde habría salido ese escáner? ¿Qué pasaría ahora? Ela pensó que ya lo había visto todo. Se equivocaba, realmente el suceso del pozo era simplemente una especie de demo de un juego. Le faltaba mucho más por ver aún.

A su lado, también flotando del aire, había un porcentaje, cuando llego al 100%, el hombre aparto la mano y todo comenzó a temblar. A tal grado, que hasta los escalones temblaban. Ela se agarró de una roca de la pared que había sobresalido. El escáner había desaparecido y en su lugar se presentó un cartel de un tamaño mayor, que decía "Bienvenido de vuelta doctor, lo hemos estado esperando". Allí mismo, como cuando una puerta se abre, todo lo que había delante de ese estrecho pasillo, en el que seguían escaleras, se esfumó.

Adelante, ahora se abrió esa especie de puerta y había un pasillo de tan solo unos pocos metros de largo.

-Ven.

El hombre avanzó y entro en ese otro lugar, Ela lo siguió. Al ingresar, la puerta se cerró, ahora solo estaban en ese pasillo, que en su final, tenía una puerta. "Esto tiene más capas, que una mismísima mamushka" se dijo para sí.

-Lamentablemente, el régimen es así. Pero ya llegamos.

En ese momento, Ela divisa que unas compuertas se abren en la parte más alta de la pared, de allí salen ¿Flores? Si flores, las mismas que llevan los payasos en sus trajes y hacen esas bromas con agua. En ese momento Ela comprendió el fin de esas flores.

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