Capítulo 27: Necesitan saber

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Al día siguiente, el comedor volvió a sus originales raíces. Desayunaron unos waffles y unas tazas de chocolate derretido. Luego de eso, Cora se dirigió a su despacho y anuncio que no le molestasen por ningún motivo, que necesitaba analizar la situación. Se veia ansiosa, seguramente tendría muchísimas ganas de lanzarse por Porti y pasar al mundo de los sueños, extinguir a eso Efips y deshacerse de "La Mente". Ela antes la había visto hablando con Tyler, le mostro aquel aparato extraño que tenían en su cinturón de herramientas, este titilaba una luz verde, ambos se veían muy preocupados. El ambiente sin embargo se veia feliz, todos parecían por un momento olvidarse de sus preocupaciones, tal como pretendía Ian.

Los chicos, exceptuando Ian y Owen, le habían hablado esa mañana a Ela cuando la encontraron sola por los pasillos. Esta se dirigía al baño, pero al escuchar que la llamaban, se acercó a ellos. Ellos se veían emocionados y con una amplia sonrisa en sus rostros, pero a la vez esto inquietaba a Ela, ya de por si le había parecido extraño el hecho de que se habían comportado gentilmente al servirle su desayuna y recoger los platos, hasta le volvieron a llenar su taza de chocolate, aunque ella ya se encontraba llena y le ofrecieron un vaso de agua "para que baje todo".

-¡Chicos!- Dijo imitando una alegría terrible, ya sabía perfectamente que la estuvieron siguiendo por el pasillo -¿Qué uno no puede ir al baño sin...? –Hiso un gesto con su mano, en busca de la palabra -¡Sin caballería! Venga, ¿Qué necesitan? Es algo muy obvio que me requieren para algo, si no, hubiesen actuado algo más normal.

-Bueno- Dijo Tyler tomando la delantera, este estaba en el medio de los tres –Nosotros nos preguntábamos si... -Se tocó la nuca con su brazo –Bueno si...- Empezó a mirar para todos lados –Este...

-No muerdo ni le contare a alguien sobre lo que tengan que decirme, pero ¡Díganlo! No puedo ser adivina.

-¡Necesitamos consejos para conquistar a las chicas!- Dijo Park gritando a todo pulmón.

-Se supone que no tienen que enterarse Park- Dijo Kang en voz baja, dándole una golpiza en la espalda.

-¡Oh, es eso! Pues me lo decían y ya, ahora necesito antes hacer una urgencia muy seria- Indico la zona del baño –Vayan a mi celda e iré en unos minutos ¿Vale?- Ellos asintieron y se dirigieron a las escaleras, Ela entro al baño y pudo ponerle fin a su necesidad baja.

Cuando entro a su celda, encontró a los tres sentados en su cama y mirando el suelo, en cuanto la vieron se colocaron derechos y le prestaron suma atención. Ella hiso aparecer una silla, donde se sentó y se quedó observándoles -¿Y bien? ¿En que los ayudo?

-Pues estamos requiriendo consejos para mujeres, como tú eres amiga de ellas, pensamos que podrías ayudarnos con impresionarlas en lo que les gusta, más tu don, bueno eso- Dijo Kang, quien estaba con sus manos frotándolas en sus piernas, se veia inquieto.

-Es algo muy tierno de su parte, pues...- Ela se quedó pensando –En si es algo que depende realmente de cómo es cada persona.

-¿Nos puedes ayudar verdad?- Dijo Park abriendo los ojos.

-Claro, pero ustedes tienen que poner la parte esencial, su pizca – Se veían confundidos y Ela continuo –Verán, para sorprender a una chica, no solo deben hacerlo con cosas que a ella le gusten, si no, también elegir sus gustos en cada cosa. De esta manera, a ella le impresionan con su gesto y empieza a conocerlos de a poco por las pequeñitas cosas que dejan conocer de ustedes. Es decir, si a tu chica le gusta que le regales flores, tú lo haces pero eliges también un tipo de flores que a ti te gusten y crees que a ella también le podrían gustar y ¡Puf! Coincidencia de gustos.

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