-TN… necesito que hagas un favor por mí.
Ella abrió perezosamente los ojos y clavó la mirada en él. Luego frunció levemente el ceño.
-claro.
-si un bebé llegara a nacer de esta noche… tuyo y mío… amalo por los dos. Por favor.
Los ojos de TN se humedecieron, pero ninguna lágrima se deslizó por su mejilla. Simplemente los cerró antes de que ello ocurriera y asintió.
-lo haré.
Y dicho esto volvió a besarla con ternura… como a modo de agradecimiento.
TN no veía pasar el tiempo, no existía junto a él. Y eso no era lo peor, lo peor era que no quisiera levantarse de esa cama y que deseara huir con él para siempre… una posibilidad que estaba latente en su cabeza. Pero hacia todos los esfuerzos para apartarla. Y así lo hacía…
Por fin después desde que se había acostado en esa cama se quedo dormida. Se sentía deliciosamente exhausta, consciente de él estaba a su lado, dormido boca abajo mientras que ella estaba boca arriba. Se giró un poco para verlo y pensó que jamás existiría alguien como él que la hiciera sentir de aquel modo… soltó un suspiro y se volteo hacia él. Se le veía tan tranquilo… tan sereno… como un ángel caído del cielo… pero TN bien sabia que Harold no era un ángel.
Un brazo se metió por debajo de su espalda para rodearla, ahí fue cuando despertó algo soñolienta. De ese modo quedó aún más cerca de Harry… tanto que su respiración le golpeaba suavemente el rostro. Con la mano que él tenía disponible le acarició el rostro, delineando también la comisura de los labios. Una tierna y delicada caricia… casi como el rose de una pluma. Luego le acaricio la nariz con la suya y se inclinó un poco más para buscar sus labios y besarlos como si fueran un preciado néctar.
Después se apartó y le quito algunos mechones de cabello de la frente.
-es hora de irnos-dijo Harry.
Y TN supo que la magia había terminado. Sabía que acabaría pronto, eso nadie tenía que decírselo.
Él se levantó y de repente la improvisada cama se enfrió. Poco después ella también se levantó y comenzó a buscar sus prendas de vestir. En absoluto silencio.
Al salir se dio cuenta de que en minutos amanecería. Debía darse prisa, aunque las doncellas no la despertarían hasta las ocho para comenzar a arreglar las ultimas cosas para partir, sabía que si no se iba pronto de ahí jamás se iría. Sin que pudiera evitarlo suspiró con tristeza, se giro sobre los talones y allí se encontraba él. Tan alto e imponente como siempre lo recordaría.
-supongo que éste es el adiós.
Harry asintió.
-supongo que sí.
Y jamás olvidaría su tono de voz… de sólo oírlo se estremecía. Dona se hizo presente sacudiendo la cabeza y relinchando. TN la miró a ella y luego lo miró a él… era como decidir entre el camino oscuro y entre la luz al final del mismo.
Un nudo amenazó con atenazarle la garganta, por lo que optó por irse antes de que las lágrimas hicieran su presencia también.
Pero antes de que pudiera avanzar un paso siquiera, se abalanzó sobre él y buscó sus labios desesperadamente para besarlos. Por suerte él no se vio impactado, y no se quedo tieso como una estatua… sino que le correspondió el beso con la misma pasión.
Se apartó poco después y se puso de puntillas para susurrarle, casi entre lágrimas:
-te amo.
Se lo había dicho, con el corazón hecho añicos, pero se lo dijo. Se alejo de él y antes de que pudiera subir el pie para montar a Dona…
-TN –dijo. Ella se atrevió a mirarlo, y supo que él también se encontraba en su misma situación. Era como si luchara contra sí mismo para dejarla partir. Habiendo otra parte que le decía que no quería dejarla.
Finalmente avanzó hasta ella, la sujetó desde la nuca y la atrajo hacia él para besarla del mismo modo que ella lo había hecho. Pero añadiéndole más profundidad. Como si quisiera robarle el alma… era justo lo que estaba logrando.
-siempre estarás aquí –sujetó la temblorosa mano de TN y la posó en su pecho- jamás te olvidare. Jamás.
TN simplemente negó con la cabeza y a duras penas contestó:
-yo tampoco te olvidaré.
Supo desde el primer beso que jamás se atrevería a hacerlo. La magia había acabo… para siempre.
Minutos después ya estaba dejando a Dona en su debida cuadrilla, y partió de allí lo más rápido que le permitían las piernas para llegar hasta la segunda planta del castillo y terminar en su habitación. Faltaba una hora para que sus doncellas llegaran a despertarla, y lo mejor que podía hacer era dormir ese corto lapso de tiempo para reunir fuerzas.
La tarde había llegado, y con ella… la pronta partida de su adorada TN. No quería presenciar cuando el carruaje del conde de Campion desapareciera por el sendero, sin embargo allí se encontraba junto a Caitlin, esperando que ellos llegaran para despedirlos. En la entrada los mozos estaban sujetando las maletas al carruaje. Soltó un suspiro de resignación, ello capturó la atención de Caitlin.
-¿Triste, esposo mío? También debo decir que me entristece la partida de los condes, aunque también podría decir que no.
Harry giró los ojos. Lo único que le faltaba.
Las tres doncellas pasaron delante de ellos e hicieron una reverencia antes de decir que agradecían las molestias tomadas por el hospedaje.
Luego de otra reverencia fueron hacia el carruaje que las llevaba a ellas. Después se hizo presente el conde. Aunque Niall no terminaba de agradarle… tenía el presentimiento de que la amaba tanto como él y que cuidaría de ella. TN también se hizo presente, colocándose a un lado de su marido, con Bonita en brazos.
-fue un placer hacer negocios con usted, majestad –dijo Niall con cortesía- mi administrador le mandara los últimos papeles a Lord Malik la semana que viene.
-muy bien. No hay problema.
-esperamos que tengan un buen viaje de regreso a vuestro castillo, milord, milady –dijo Caitlin con una sonrisa… falsa.
-muchas gracias por sus deseos, majestad –contestó Niall con una sonrisa de agradecimiento, obviamente ignorando la de Caitlin.
TN se limitó a asentir con la cabeza con una media sonrisa. Quizás quisiera que comprendieran que aún estaba demasiado triste como para parecer que nada había sucedido.
Bonita también quiso hacerse presente con un lloriqueo, un lloriqueo con la sencilla intención de captar su atención. Harry la miró y le brillaron los ojitos que estaban ocultos bajo una mata de pelo. Le dedicó una sonrisa y la pequeña se inquieto entre los brazos de su dueña. TN terminó entregándosela sin más, la sujeto ella comenzó a lengüetearle la barbilla. Harry rió y luego miró los ojitos de Bonita con tristeza.
-también te extrañare.
Bonita ladeo la cabeza y un raro sonidito se escapó de su garganta, le dio otro lengüetazo en la nariz y Harry le hizo unas cuantas caricias más antes de entregársela a TN. Y lo que vio en sus ojos terminó de desgarrarle el corazón… tenía una lucha contra sí misma para no llorar. El por qué de las cosas era algo que jamás terminaría de comprender…
Ambos terminaron de despedirse y Harry observó a TN junto con Niall al carruaje. Ella ingresó primero y Niall antes de seguirla los saludó con la mano y una sonrisa. Luego la puerta del mismo se cerró y el conductor agitó las riendas para que el caballo avanzara.
La última imagen que quedaría grabada en su alma para siempre era los ojos humedecidos de su adorada TN… ella era una ladrona, se llevaba consigo una parte de su corazón.
CONTINUARÁ...
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Espero que os guste este cap, beesos<3.
