Cuando tu mejor amiga te deja.

93. FINAL.

—No puedo creerlo—digo, el corazón me late al cien.

—Pues creelo—dice Ana— Ahora eres tú.

—¡Lo sé!—grito.

—¿Alguien tiene comida? —pregunta Karla.

—Siempre piensas en la comida—respondo.

—Mejor no digas nada—dice— Casi no entras en el vestido por comer a cada rato.

—Shh...era un secreto—digo y Andrea comienza a reír.

—Te entiendo—habla Andrea— Me pasó lo mismo en mi boda ¡Es horrible!.

—Hemos llegado—dice el chofer.

—¡Preparate!—Karla sale de la limusina . De inmediato comienzo a escuchar las voces que dicen "Llegó la novia". Estoy muriendo de nervios, sólo imaginar a Dominik con traje hace que me tiemblen las piernas.

Sale Andrea de la limusina y detrás de ella Ana, ahora me toca a mí. Respiro hondo y salgo.

Lo primero que veo es a mi madre y a Sara, la madre de Julieta juntas, las dos sonríen.
Miro hacia la iglesia y veo a Dominik sonriendo, le devuelvo la sonrisa y entra a la iglesia.

Observo cómo todos entran a la iglesia y me dejan afuera con Jakub.

—¿Me permite?—pregunta.

—Claro—respondo, él entrelaza su brazo con el mío.

—¿Nervios?—pregunta mientras caminamos.

—Sí—estamos en la puerta.

—Tranquila—a cada paso que damos nos adentramos más en la iglesia.

Todos están de pie y sonríen, trato de miralos mientras oculto mis nervios, doy gracias que no escogí tacones si no ya estaría en el suelo. Veo a mi madre, sus ojos están cristalinos, a un lado está Sara sonriente,¿Verá a Julieta en mí?.
Desvío un poco la mirada y veo a Karla,Andrea y Ana, ellas están con su pareja, Axel está muy tranquilo sonriendo.
Miro hacia enfrente y veo al padre con su cara seria ¿Todos serán amargados?.
Estoy a unos cuantos pasos de Dominik, él me espera ansioso y sonriente, no se le notan los nervios, al estar junto a él, Jakub me suelta del brazo y nos sonríe.
Ahora estoy frente al padre esperando a que empiece la ceremonia,  éste ya comenzó todo su sermón y blah blah.

¿Que voy hacer ahora que esté casada? .

¿Será todo diferente?.

¿Y si luego Dominik ya no me gusta?.

Siento que todo está transcurriendo rápido a comparación de la boda de Andrea, bueno ella ya tiene un hijo...

Es hora de ponernos los anillos. Karla y su novio son los encargados de eso, miro hacia Karla quien busca los anillos desesperadamente al igual que su novio,Ana estira la mano y mueve dos dedos el novio de Karla toma los anillos de los dedos de Ana y se los da a su pareja.

Nos ponemos los anillos, miro con ternura a Dominik y sonrío. El padre vuelve a hablar y ....

—Puede besar a la novia— dice al fin. Espero sentir los labios de Dominik, cierro los ojos y espero, poco a poco siento que se acerca, hasta que me da un beso en la frente y me abraza. Todos aplauden.

—Te amo muchísimo —habla en un susurro.

—No sabes cuánto te amo yo— contesto.

Todos salen de la iglesia, Dominik toma mi mano y comenzamos a caminar a través del pasillo, todos están ahí, frente a nosotros, sonríen, me siento tan feliz, Sara llora no se si es por felicidad o tristeza. Por un momento veo a Julieta con un vestido azul, está aplaudiendo y sonríe, la saludo y ella también lo hace, parpadeo, no hay nadie.

—Es hora de la fiesta—dice Ana.

Subimos a la limusina que nos lleva al salón de la fiesta.

—Estaba nervioso—confiesa Dominik.

—¿Enserio?—digo.

—Uff...no sabes cuanto— ríe.

—Yo igual— comienzo a reír — Casi me caigo.

—Tonta—suelta una carcajada.

—¡Oye! No me digas así.... Tonto.

Llegamos al salón ¿Cómo rayos todos llegaron antes que nosotros?.

—¿Cómo llegaron antes que nosotros?—pregunto a Dominik.

—Ni idea— responde— Vamos a bailar— me jala del brazo.

Comenzamos a bailar, aunque no sé, luego de un rato nos sentamos.

Miro a cada una de las personas que están aquí.

Betha, Gretel y Julia, no se veían desde hace años y aunque fueron mejores amigas hace tiempo han cambiado demasiado, me alegra que estén aquí aunque admito que fueron injustas conmigo.

Chris, él pues ...no a cambiado demasiado.

Ana y Arturo, vaya ellos creo que planean irse a España, genial.

Andrea y Jakub, bueno, jamás pensé que llegaran a ser una pareja y tener un hijo, los dos se ven felices con el pequeño Axel.

Sara y mi madre, las dos no tienen pareja es por eso que son mejores amigas, que ironía ¿No? .

Karla y Dominik, no piensan casarse, dicen que es para locos, Karla abrió un local en donde hace tatuajes muy geniales.

Miro a Sara y de alguna manera me recuerda a Julieta, ella tenía ideas geniales para su boda, una boda que jamás se lograría ....Hank está sentado solo, mirando una fotografía. Me acerco hacia él y me siento a un lado.

—Hola—digo.

—Hola—contesta.

—Oh, en la foto está Julieta —sonrío.

—Si—contesta—Ella quería que en su boda  cantara para ella....y canté en su funeral.

Platicamos mucho rato, hasta que tenía que partir el pastel, lanzar el ramo y blah blah blah.

—Personas que hoy nos acompañan— digo a través del micrófono — Antes de que esto termine quiero decirles que esta fiesta no sólo es por mi boda, es para festejar que hace unos años conocí a la mejor amiga del mundo, Julieta. ¡Sé que estás aquí en algún lugar! ¡Y ESTO ES POR TI! JULIETA.—regresé a mi lugar.

Salgo del salón y voy al parque, me siento en los viejos columpios a los que solía ir con Julieta.

—Gracias a ti logré esto—murmuro— Esto es para ti— me levanto del columpio y voy hacia el cementerio. Una vez ahí saco una fotografía de mi vestido— Aquí nuestros recuerdos están —retiro la invitación que había puesto de mi boda— Sé que algún día las dos seremos huesos y aunque ya estés muerta siempre serás la mejor.
Aquí nuestros recuerdos yacen, esta fotografía inició todo, una montaña rusa, un algodón de azúcar y un parque de diversiones. Un día me preguntaste por que quería ser tú amiga a lo que yo contesté que era un secreto, bien aquí la respuesta, fuimos amigas en un curso de verano, sólo fue una semana pero no lo olvidé. Todo esto se hubiera evitado si hubiéramos hablado. Los tiempos han cambiado, ya no somos aquellos adolescentes con ideas inmaduras, con remordimientos , no sabes cuanto me arrepiento de no hablar contigo desde que el problema comenzó, si lo hubiera hecho ahora estaría hablando contigo y no con una lápida.

[Meses después].

Llevo unas rosas blancas y camino indecisa hacia aquella lápida, la lápida de Julieta. Me arrodillo y arranco la hierba que ha crecido. Pongo las rosas.

—Bien, hoy termina todo, no cómo quisiera pero la vida no es perfecta. Hoy nuestros recuerdos los tendré en mi corazón, siempre te recordaré y nunca me olvidaré de ti. Hoy puedes irte en paz, hoy te digo adiós, mejor amiga.