Los siguientes seis minutos fueron los más largos de mi vida hasta entonces.
Pensé que a pesar de mis gritos nadie me había escuchado.
Pensé también en mi mejor amiga, Caroline, y lo estúpida que fui al no escucharla cuando me advirtió que él no pintaba ser alguien bueno.
También pensé en mi papá.
Pensé en mil cosas, sinceramente, porque no quería que mi mente se enfocara en lo que sucedía realmente.
Pero nunca imaginé a esas cuatro personas entrando bruscamente a la habitación.
Agradecí al cielo porque él hubiese olvidado colocar el seguro.
ESTÁS LEYENDO
Un Último Recuerdo
Short StoryTodo fue tan rápido e intenso que algunas veces un lado de mi mente se preguntó si eso pasó en verdad. En cambio, el otro lado repitió con intensidad aquel dicho que un día alguien dijo sabiamente: Lo que rápido y fácil viene rápido y fá...