Nos conocimos, incluso descubrimos de nosotros mismos cosas que no habíamos imaginado.
Crecimos, opinamos, peleamos, gritamos, sonreímos, lloramos... Pero sobre todo, nos aceptamos completamente como éramos. Con nuestros defectos, virtudes, sueños, miedos, gustos, disgustos, con nuestro pasado y con todo lo que nos constituía para ser lo que éramos hasta entonces.
Supimos nuestras historias y aún así allí estuvimos. Simplemente así era, nos aceptábamos y éramos felices con todo y nuestros errores.
ESTÁS LEYENDO
Un Último Recuerdo
Short StoryTodo fue tan rápido e intenso que algunas veces un lado de mi mente se preguntó si eso pasó en verdad. En cambio, el otro lado repitió con intensidad aquel dicho que un día alguien dijo sabiamente: Lo que rápido y fácil viene rápido y fá...