Mr. and Mrs. Fantasma

T r e i n t a

Al día siguiente, Camil y yo creímos conveniente ir al hospital a ver como se encontraba Johanna, en él trayecto, Camil se mostraba emocionada.

—Ya quiero llegar —exclamó—. Ojalá todo esté bien con ella y su pequeña.

—Llamé a Matthew está mañana y me dijo qué estaban bien, qué la darán de alta en unas horas.

—Eso es genial —sonrió.

Al llegar, en la sala de espera estaba Matthew esperándonos.

—Hola, qué bueno qué han llegado —dijo al vernos llegar.

—¿Johanna como está? —pregunté

—Algo cansada por él parto, pero es normal.

—¿Podemos entrar a verla ahora? —dijo Camil

—Claro Camil, es aquella puerta —señaló—. Por cierto Ían, debo hablar contigo ahora.

—Me adelantaré —dijo Camil antes de irse.

—De acuerdo ¿qué ocurre Matthew?

Comenzamos a caminar a paso lento.

—Bueno verás...no lo quería decir frente a Camil pero...

—¿Ocurre algo malo?

—No, es solo qué ella podría tomarlo a mal.

Entramos a la habitación donde se encontraba Camil sentada a un costado de la cama de Johanna, quién sostenía entre sus brazos a su bebé.

—¿Por qué lo dices?

—Bueno es qué, como ya todos sabemos ella es muy celosa y quizá esto le incomode a ella —susurró.

Estábamos en él otro extremo de la habitación donde Camil no pudiera escuchar.

—¿Qué sucede? —respondí en voz baja.

—Se trata de Olivia...

—Ya veo

—No te lo he dicho pero ella, salvó a Camil de morir aplastada. Ella fue quién me llamó ayer y me dijo qué estaban bien, me pidió de favor qué fuera a buscarlas ya qué estaban pérdidas.

—¿Qué?

—Sí, eso mismo...y no sé sí sepas o Camil ya lo sepa pero...ayer después de qué dejé a Camil en tu casa, traté de sacar tema de conversación con ella y no sé...

—¿Qué te dijo?

—Se me ocurrió preguntarle el por qué no quiso tratar directamente contigo en vez de llamarme a mí.

—¿Y...?

—Trato de ocultarlo inventando una excusa muy estúpida de qué estaba molesta contigo, pero....tuve la diminuta sospecha de qué ella empieza a sentir cosas por ti...¿Lo sabías?

—Sí, me lo dijo ayer, después de cederme él control completo de la empresa.

Se impresionó ante mi confesión.
—De acuerdo la actitud de Olivia comienza a asustarme. Ella nunca ha tenido ese tipo de 'detalles' contigo ni con nadie qué yo sepa.

—La señora témpano de hielo resultó tener sentimientos después de todo. Me dijo qué se iría de la ciudad.

—¿Y a donde?

—No lo sé, podría estar en cualquier lugar ahora.

—Esa mujer nunca dejará de ser misteriosa.

Avril entró a la habitación y nos saludó al vernos, luego se dirigió a la cama de Johanna.

—¿Crees qué sí Camil se entera de esto intente algo contra Olivia? —prosiguió hablando.