Volteé a ver a aquél chico que tanto necesitaba, que tanto amé desde hace varios años y que pensé que jamás conocería, al cual ahora había dañado. Estaba mal por mi culpa y odiaba eso, quizás jamás me lo perdone, ni él ni yo.
Seguí viéndolo, lucía tan frágil, tan vulnerable que me daban unas ganas tremendas de abrazarlo, pero sabía que no podía, sabía que yo era la causa de que él estuviese así, si fuese otra persona me golpearía a mi misma, realmente me siento mal.
Luego de unos segundos tratando de encontrar las palabras adecuadas, o de solamente saber que hacer, él lo hizo primero.
-Si aún quieres conversar...-hizo una pausa- necesito a alguien que me aconseje -dijo curvando su labio haciendo que se le formara una pequeña sonrisa.
¡Definitivamente yo era la peor chica del mundo!.
-No creo que te de los mejores consejos, pero haré lo posible -sonreí débilmente.
-¿Podemos ir a otro lugar?- propuso.
Voltee a ver si encontraba a Marta, no quería dejarla sola pero seguro ella entendería la situación. Finalmente la encontré en la pista de baile con el mismo chico que les hablé al principio, se le veía feliz así que creo que no le importaría que me fuese o algo.
Accedí a ir a otro lugar con Justin, nos fuimos en la camioneta en la que él andaba, o más bien, lo traían, ya que íbamos con chófer. Esta vez no se trataba de Albert sino de un señor que no había visto jamás, pero no le tomé importancia. El camino fue algo incómodo y silencioso, así que mientras tanto decidí mandarle un mensaje a Marta explicándole que me había ido con Justin y que luego le explicaría todo.
El auto se detuvo y levanté la vista encontrando frente a nosotros la casa o mansión -como la quieran llamar- de Justin.
-¿Esto es una broma verdad?- le pregunté directamente a Justin.
-¿Crees que estoy de ánimo como para bromear?- dijo alzando una ceja.
Bien, un punto a su favor.
Bajé del auto obedeciendo a su señal de que lo siguiera dentro de su casa, ya en esta, me ordenó que me sentara en un piso del mesón de la cocina, el se sentó frente a mí.
-Y bien...¿en qué te puedo ayudar?-decidí preguntar.
-Ayudame a sacarte de mi cabeza -dijo dándome una mirada que parecía tan profunda.
-Justin yo...-buscaba las palabras correctas.
-Necesitaba verte, aunque no lo quisiera, te extraño demasiado.
-Entiendo que no quieras saber nada de mí, de verdad lo lamento Justin, no te pido que todo vuelva a ser como lo era antes, sólo que me perdones -dije sincera y agachando mi cabeza avergonzada- quizás no ahora ni mañana, pero que algún día lo hagas, sé que me equivoqué -dije sin poder evitar derramar algunas lágrimas- lo que menos quería era hacerte daño, creo que me merezco que me ignores y que no quieras saber nada de mí.
-Cuando te vi con Hayes... -dijo sin terminar la oración, sólo negó con su cabeza en forma de decepción.
-Hayes -repetí- no es su culpa, él no tenía la menor idea de que tu y yo...-¿que debía decir ahora?
-Entiendo -dijo Justin, él sabía a que me refería.
-Creo que ya debo irme, sólo quería que me escucharas y entendieras lo que siento, lo lamento Justin, de verdad.
-¿Y no quieres oír lo que yo tengo que decir?-preguntó.
O más bien, fue su forma de decir que me quedara un rato más.
Me acomodé nuevamente en esa gran silla para oír que sentía al respecto, estaba realmente nerviosa ante aquella situación.
-Sé que esa no fue tu intención, y menos la de Hayes al ver su reacción ante esto, pero las cosas ya fueron y ya están, no hay vuelta atrás. Quiero que sepas que esta también es tu casa a pesar de todo, que te extrañé cada minuto que no estuviste acá alegrandome los días, realmente te extraño cariño -dijo con una expresión tan triste que pareciera si me estuviese clavando miles de cuchillos en mi cuerpo- me haces falta ________, pero no puedo fingir que nada pasó...
Auch.
-...te perdono, y espero sigamos siendo como los buenos amigos que logramos ser.
Doble auch.
Esto era el fin de toda esa relación de "más que amigos", " más que ídolo y fan"...que habíamos establecido este último tiempo.
-¿Crees que funcionaría eso entre nosotros?- pregunté desconcertada.
-Si pudiste ser amiga de tu ex -se refirió a Javier- no logro entender porque nosotros no podemos, si no éramos...
-Entendí -lo interrumpí antes de que dijese algo que no me gustaría escuchar- definitivamente es hora de que me vaya, gracias por escucharme...
-Le diré el chófer que nos trajo para que te lleve a...-dijo dudando.
-Al hotel -dije dándole a entender en donde me estaba quedando.
-Claro, ahí le das la dirección, gracias por venir -dijo forzando una sonrisa.
Yo lo imité y sonreí con pocas ganas antes de dirigirme a la puerta de salida. Pero en esta me detuve sin voltear.
-Quiero que sepas, que con mi ex jamas sentí lo que tú provocaste en mí...buenas noches Justin, descansa -dije dándole a entender la importancia que él tenia para mí y lo que me causaban sus palabras.
Finalmente me retiré de aquella casa en la que hace un tiempo estaba viviendo tranquilamente y compartiéndola con mi ídolo.
Una lágrima calló nuevamente por mis ojos al recordar aquellos momentos tan buenos y que estúpidamente arruiné.
El chófer de Justin me llevó al hotel al cual le indiqué. Ya en este, me lancé a llorar desconsoladamente en la cama.
Como desearía devolver el tiempo y no cometer aquél error, haber detenido a Hayes cuando intentó besarme, y no haberme dejado llevar por sus encantos. De otro modo, al gustarme ambos debería haberme alejado de uno o de los dos, simplemente para no causar este tipo de daño.
Hablando de Hayes, ¿qué será de él?. Él merece una explicación de todo esto y una disculpa de mi parte también, quizás debía llamarlo o quedar en algún lugar para hablar.
¿Sería eso lo correcto o quizás luego me arrepentiré de ello también?.
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Company. » jb, 2016. [terminada].
Fanfic¿Te has imaginado ser algo más que sólo una fan para tu ídolo?, porque _______ jamás lo habría imaginado hasta que le sucedió. Periodista, fan, amiga y algo más de Justin Bieber. Pasar de vivir a millones de kilómetros de tu ídolo a vivir con él y f...