Mi camino ninja (Corrigiendo Y Editando)

capítulo 17

Capítulo 17

Narumi se encontraba frente a frente con su atacante, su ira ya era incontenible, poco a poco las heridas infligidas por el hombre serpiente se iban cerrando. El chakra del kyubi la cubrió por completo. 

Orochimaru había perdido la ventaja que tenía sobre la rubia. Una nueva pelea se desató entre ambos contrincantes, los reflejos y la velocidad de la pequeña se habían vuelto mucho mejores en cuestión de segundos. Esta vez era ella quien tenía la ventaja en la pelea, Orochimaru tenía que buscar la forma en deshacerse de ella, ya que se interponía entre su objetivo, trató de idear un plan, pero cuando ya supo que hacer la joven se encontraba frente a él propinándole una patada fulminante, destruyendo lo que parecía ser una máscara.

Narumi se detuvo al ver a ese ser extraño en el piso, rápidamente retrocedió cuando este se incorporó de nuevo, comenzó a realizar diferentes sellos consecutivamente confundiendo a la rubia que lo observaba expectante, pero esa persona se hundió entre las raíces de los árboles. Orochimaru había realizado el Hiru Banshō: Bōka no Jutsu, Narumi comenzó a buscar en todas direcciones, sintió a Sakura gritar cuando la rubia se volteó a ver Orochimaru había atacado a Sasuke, utilizó el Hiraishin transportándose frente a sus compañeros. Sakura fue la única, del equipo, que vio que los ojos de Narumi eran parecidos a los de Sasuke, la rubia percibió al enemigo cerca y corrió a atacar pero este le había tendido una trampa y Narumi había caído en ella. 

Orochimaru utilizó nuevamente su kusanagi esta vez se aseguró de inmovilizar a la rubia por completo, insertándose en el tronco de un árbol con la espada clavada en el pecho, la rubia grito del dolor lo que provocó que el chakra rojo comenzará a formar una cola, al ver lo peligroso que sería para Orochimaru arrancó la ropa de la parte superior. Sonrió de lado acercándose un poco a ella le susurro:

– Así que la que me hizo pasar un momento realmente difícil fue una mocosa. –Decía maliciosamente mientras tocaba la piel expuesta de Narumi. – Tienes una piel muy suave, es muy agradable al tacto. Eres muy hermosa, mostraste un gran potencial en el combate y despertaste el kekkei genkai heredado por tu abuela aún así no es lo suficientemente bueno para mis propósitos, tal vez debería disfrutar un poco más de esta delicada piel.  –Esas palabras hicieron que tanto Narumi como Sakura se sintieran horrorizadas.

– No me toques maldito bastardo. –Espetó la rubia mientras trataba de zafarse pero cada vez que se movía un milímetro la espada se incrustaba más y más.

 Nuevamente comenzó a formarse una segunda cola Orochimaru ya no podía perder más tiempo, extendió su mano derecha en la cual se formaron cinco llamas pequeñas la cual presiono contra el abdomen de la rubia sellando nuevamente el chakra del kyubi, Narumi perdió el conocimiento. Orochimaru retiró su espada de su pecho dejándola caer. 

– Si sobrevives, me tomaré las molestias de jugar contigo. –Dijo mientras desaparecía.

Sakura dejó a Sasuke en el árbol donde estaban y saltó para atrapar a la rubia que se estaba desangrando. Con el poco chakra que poseía realizó un kage bunshin y así poder cargar con sus dos compañeros hasta encontrar un refugio donde comenzar a tratar las heridas de sus compañeros. 

Después de caminar por unos minutos encontró una cueva donde pudo poner a salvo a sus compañeros, tomó la mochila de la rubia y comenzó a buscar entre sus cosas un equipo de emergencia, encontró muchas vendas limpias bastantes anchas, las tomó y miró a su compañero.  No pudo más y lloró de impotencia, no podía imaginarse lo que tuvo que pasar su compañera para ser educada como un chico había engañado a todos. 

Estaba furiosa con la rubia pero aun así sabía que no era toda su culpa. Recordó el día en que la regañó por utilizar de excusa su condición de mujer siendo que la rubia estaba en las mismas condiciones que ella. Se secó las lágrimas y comenzó a quitar el vendaje sucio del pecho de la chica, vio que la herida era muy profunda tomó una cantimplora que contenía agua y la vertió sobre la herida para limpiarla. Tenía muchas heridas en el cuerpo pero la más peligrosa era la que estaba en su pecho, sabía Sakura que una herida como esa debía ser revisada por un médico e incluso era posible que necesitarán someterla a una cirugía urgente, pero  como iban las cosas tendría suerte si pasaba la noche. Después de vendar la herida Sakura comenzó a montar guardia esta vez era ella la que debía proteger de sus compañeros, preparó algunas trampas por si se quedaba dormida y tratarán de atacarlos. Una vez terminada se sentó cerca de sus compañeros.