-Narras Karen
Desorientado y tambaleándose, él se apoya contra el marco de la puerta de entrada. Esta con su cabello despeinado y bastante borracho, bastante borracho.¿Simulará verse sexy al estar parado de esa manera? Esperen... hasta borracho lo es.
Alex me mira a los ojos y sonríe con su sonrisa de millonario y...
Karen.... —Dice con su voz aterciopelada y baja. Corro hacia él al ver cómo avanza y presiento que se caerá
-Joder Alex... ¡donde estuviste!
-Oh... babe... —Ríe. Entrecierro mis ojos y niego con la cabeza ¿Habla en serio?
-Esto es en serio Rodríguez... no puedo creerlo. —Sí, no puedo creer que estoy con un gran nudo en el estómago por imaginar cosas en donde estaría y él se va emborrachar, magnifico.
-Shhhh.... —Me calla poniendo su índice en mis labios.—Te extrañado... —Dice y él se acerca tanto a mí que puedo oler su aliento a alcohol, ¿Qué mierda ha dicho? quiere tomar mi rostro con sus ambas manos para hacerme no sé qué, pero lo detengo.
-¡Basta Alex, estás borracho! —Grito en un susurro, al miedo de despertar a medio mundo aquí.
Nuevamente sus piernas quieren perder el equilibrio, entonces rodeo su cintura con su brazo en mi hombro para apoyarse en mí, mientras nos dirigimos a las escaleras. Aun no entiendo, ¿Por qué se habría emborrachado de esa manera...? ¿Y solo? Y si manejo... o si estuvo con alguien. Rápidamente siento electricidad por mi cuerpo al imaginarme cosas...
-Oh diablos, estás pesado... —Me quejo al intentar enderezarlo y camine.
-Te puedo cargar yo y llevarte en mi camaa... —Dice entre risitas. Joder, en serio que esta borracho.
-Nada de eso Alex. Vamos, apóyate en mí. —Me esfuerzo para subir una por una de las escaleras mientras el sube ruidosamente... El cae en las primeras cuatro y hace que me caiga también. No hace falta que su apantallante sonrisa sea visible en segundos y a pesar de la oscuridad pueda verla tan blanca y reflejada en mí.
-¡Alex! —Lo regaño pero su risa es contagiosa que quiere que logre reírme también.
-Ya... ¿vamos a la cama sí? —Digo. Su sonrisa sigue visible
-Está bien —Dice e intenta levantarse. Parece que sus fuerzas son inútiles o de verdad no quiere levantarse y quedarse aquí, ladea la cabeza con sus labios entre abiertos y sus ojos ebrios pero matadores. El me mira a los ojos, su mirada se pierde en mí, entonces yo le correspondo con mis ojos también. Mira mis labios y lame los suyos, oh mierda. Vuelve a mirar mi pupila y perderse en ella. Su mirada me está haciendo sentir¡TODO! Sin importar que este ebrio, sus ojos me están revelando todo, no sé si es amor... o deseo, pero conozco ese tipo de miradas. Mis labios, mis ojos, mi todo, me estudia. Entonces también tendré que soportar su mirada tan fija en mí que casi puedo sonrojarme, y quiere hacer que voltee hacia otra dirección, pero decido que debo aguantar y mirarlo también.
¿Debería aprovechar el momento?Entonces él se acerca a mí, y yo a él tan lento posible. Miro sus ojos perforados en los míos, después alzo mi mano despacio, y la yema de mis dedos tocan su rostro delicadamente. La deslizo lentamente hasta tocar toda su mejilla.
Alex cierra sus ojos, como si estuviera disfrutando de mi tacto, entonces aprovecho para mirarlo perfectamente, mirar sus labios mojados y carnosos, me dan las ganas de besárselos. Alex toma mi mano que está tocando su rostro y la deja allí sin abrir los ojos.
Segundos después los abre y se revelan sus ojos color avellana y su iris bastantes dilatados. No puedo con esto. No, no después de lo que paso esta noche.
-Vamos. —Digo fría.
-¿Qué?
¡Arriba! Vamos Alex, tienes que descansar y quitarse esta borrachera...—Aunque me duela esto, aunque muera por besarlo, ya no seré tan estúpida.
-Quedémonosss aquí... —Suplica en un susurro mientras toma mi mano y entrelaza los dedos. Mierda por qué haces esto... para mi significa mucho que alguien tome mi mano de esta manera y más... si es la persona que estúpidamente quiero.
Saco mi mano de él y el frunce el ceño confundido.
-Ven, levántate.
-Es por el ¿verdad? —Dice. Quiero decir de qué hablas, pero automáticamente sé a quién se refiere. Me doy cuenta que es preferible quedarse callada.
Lo empujo con cuidado y el cae en la cama dando un grito de confort con sus manos extendidas pero desde aquí puedo ver su
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The Best (La Apuesta) Emilio Alexander Rodríguez & Karen Elena Pujors
Ficção Adolescente¨hice esa apuesta antes de conocerte...... antes de conocerme¨. ¿Alguna vez en tu vida, te has llegado enamorar de alguien que rara vez se acuerda de ti ? ¿Te has puesto a pensar si en realidad le gustas? O ¿realmente puede llegar a quererte de la m...