Piso 5

Capítulo 26: Pensamientos nocturnos

Christopher la levantó y la dio vueltas por los aires.

Cuando la bajo Dulce no pudo evitar pensar que había cometido un error, pues en la mañana se había prometido alejarse un poco de él para enfriarse la mente y pensar bien las cosas. Enamorada era una palabra muy fuerte y Dulce le había atribuido ese pensamiento al consumo de alcohol.

Pero necesitaba esto también. El salir y despejarse un poco era algo que le haría bien ahora. Se perdería ir a ver el vestido de novia con Any, pero ella seguro que se lo perdonaría.

-Bueno voy a escribir mis columnas para enviarlas con anticipación- dijo Dulce apuntando a su oficina personal.

-¿Te hago la maleta?- preguntó Chris.

-Luego la revisaré para ver que no me hayas metido drogas o ropa no adecuada- advirtió Dulce.

-Tranquila- y fue hacia su habitación.

Mientras el hacia su maleta Dulce trató de concentrarse en las columnas. En realidad ya tenía trabajo adelantado por lo que solo tenía que hacer del domingo y lunes. Cuando acabó la primera decidió llamar a Anahí y a Maite para contarles que se iba a ausentar ese fin de semana. Any no se preocupó por lo de su vestido de novia. Ambas la molestaron "Cuidado con las noches" "Ojalá descanses, aunque creo que no lo hagas mucho" "Usen protección, no queremos dos embarazadas" y cosas así. Luego le envió un mail a su directora disculpándose por la ausencia que iba a tener esos dos días, pero que iba a tener todo el trabajo a tiempo. Por último terminó la columna culltural que le faltaba.

Decidió ir a ver como estaba Christopher con el tema de la maleta, cuando llegó a la habitación este estaba guardando ropa interior.

-¡Hey! Pensé que el hacer las maletas significaba solamente la ropa- dijo quitándole las bragas y sujetadores de las manos. Las metió a la maleta y la cerró para que no pudiera verlas.

-¿No pensabas llevar ropa interior? -preguntó Christopher sonriendo.

-¡Claro que si! Pero de esto me quiero encargar yo- se defendió.

-¿No me digas que eres de las chapadas a la antigua que no dejan que los hombres vean su ropa interior?- la picó Chris.

-¡No claro que no! -respondió orgullosa- Es solo que no te tengo la suficiente confianza contigo-.

Christopher se hizo el ofendido.

-¿No nos tenemos una suficiente confianza? Pero pensé que ya habíamos superado esta etapa-.

-¿La etapa de la ropa interior? No se si los amigos acostumbran a verse la ropa interior-.

-Entonces creo que no cabemos en el molde de amigos ¿No te parece?- le preguntó Chris acercándose a ella.

Dulce se puso tensa.

-¿Por qué lo dices?- dijo mirándolo a los ojos queriendo demostrar valentía, aunque por dentro estaba hecha una jalea.

-Porque ambos nos hemos visto en paños menores ¿Acaso ya olvidaste como nos conocimos?¿Ya no te acuerdas de la broma de la toalla? ¿Sacaste de tu mente cuando tocaste mi puerta en la madrugada para que dejara de tener sexo? ¿O cuando te besé y nos fuimos a la cama? Yo creo que todavía no nos hemos visto desnudos pero me preguntó cuanto faltara para eso-.

La única intención de Christopher para decir eso era una broma, pero Dulce lo malinterpretó todo.

-¿Me llevas de viaje solo para tener sexo conmigo?- concluyó Dulce enfadadísima.

Christopher abrió los ojos entendiendo que ella había malentendido lo que el dijo.

-No ¿Qué? Dulce- trató de buscar la manera de explicarle.