A la mañana siguiente Christopher despertó en la misma posición en la cual se había quedado dormido en el sillón. Estaba enojado consigo mismo por su comportamiento. Ayer había desquitado su rabia con Dulce cuando no se lo merecía, necesitaba hablar con ella y arreglar las cosas.
Se vistió rápidamente y fue al departamento de Dulce. Tocó el timbre pero no le contestaba, quizás no quería hablar con él. Pero no se rendiría fácilmente. Tenía que hablar con ella, así que decidió ocupar su llave.
Cuando abrió la puerta buscó por todas partes pero al parecer no estaba por ningún lado. Vio la hora. Eran las 11 de la mañana ¿Dónde estaría Dulce? Decidió llamar a Maite.
-¿Alo? ¿Christopher?- contestaron del otro lado.
-Si... hola Maite ¿Cómo estas?- preguntó sentándose en el sillón de Dulce.
-Bien ¿Y tú?-.
-Bien también. Oye te quería hacer una pregunta ¿Estas con Dulce?- se rascó la cabeza.
-No ¿Por qué?- preguntó preocupada.
-No es nada de eso es que... -¿Le contaba o no? Quizás ella sabría qué hacer- Ayer nos peleamos y bueno hoy la vine a buscar a su departamento y no está. Pensé que podría estar contigo-.
-No, de echo no he hablado con ella desde ayer cuando me fui del trabajo ¿Pero qué pasó? ¿Por qué pelearon?-.
Christopher respiro profundo y decidió contarle toda la historia. Como llegaron los invitados por sorpresa, la conversación con Rodrigo y su desquite con Dulce.
-Mmm- pronunció Maite al final.
-¿Qué crees que debo hacer?- preguntó Christopher.
-¿Por qué me preguntas a mí? Créeme que en relaciones tengo poquísima experiencia-.
-No importa, yo no tengo nada de experiencia. Pero me ayudaste cuando le pedí que fuera mi novia y si me podrías ayudar también en esto sería genial- admitió.
Maite suspiró -Esta bien, aunque sinceramente no se qué decirte. Fuiste un imbécil al desquitarte con ella cuando el tema era otro. Pidiéndole perdón se le pasará. Ah y dile la verdad también. Si eso no funciona, pues anda a una consejera matrimonial para que te ayude- bromeó.
De repente la chapa de la puerta empieza a sonar y entra Dulce toda roja y con ropa de deporte. Había estado corriendo.
-Gracias, te hablo luego- y cortó. Christopher se paró del sillón.
Dulce lo miró pero no dijo nada, sino que pasó de largo. El la siguió.
-Dul...- le tomó el brazo.
-¿Qué? ¿Vas a venir a enojarte conmigo por culpa de Rodrigo o vas a buscarme para que te golpee la puerta como idiota por media hora más? ¿No tuviste suficiente? ¿O quieres mayor humillación para mí?- dijo enojada y cruzándose de brazos.
-Dulce, amor perdóname- le tomó los brazos y se los separó.
Dulce por su parte con el solo escuchar que le decía amor lo podría perdonar, pero necesitaba saber porque se había puesto así.
-¿Qué te dijo Rodrigo?- preguntó.
Christopher sabía que tenía que decirle, había sido el consejo de Maite, pero simplemente le daba vergüenza.
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Piso 5
Teen FictionDulce sabía que había hecho lo correcto. Había tenido todo su futuro planeado con su ex prometido, pero ella se enteró que tenía una amante y lo dejó de un día para otro. Toda su familia había estado en contra de su decisión: -Tu futuro es más i...