Piso 5

Capítulo 49: Pero no somos novios

-¡Lo sabía, lo sabía! No puedo creer que finalmente este pasando -chilló Maite cuando Dulce le terminó de contar todo.

-Créeme que todavía estoy en estado de shock- sonrió.

-No sabes lo que me alegro por ti -la abrazó- por ambos en realidad-.

-Igual estamos recién entonces tampoco quiero hacerme tantas ilusiones- recalcó Dulce más para ella misma que para Maite.

-Pero entiende que ustedes son diferentes. Ya han convivido como pareja, casi que viven juntos Dulce. Creo que esa etapa en donde la relación esta en prueba para ver si funciona o no ya esta más que aprobada- la animó Maite.

-¿Tú crees?- preguntó Dul.

-Claro -sonrió segura de su perspectiva- Pero oye, no me has contado como te pidió que fueras su novia-.

A Dulce el semblante le cambio de inmediato.

-No me lo ha pedido- dijo seria.

-¿Entonces son como esas parejas que nunca se les pone nombre pero están juntas?- preguntó Maite un poco extrañada.

Dulce se aclaró la garganta.

-Supongo- comentó no muy segura de la respuesta.

La verdad Dulce no había pensado en ese punto. Quizás Christopher no quería ponerle nombre a lo que estaban teniendo. Pero para ella era importante tener un nombre, así sentía que tenía seguridad y que podían estar bajo una credibilidad que se podía dar a conocer. Y aunque fuera algo patético e infantil definitivamente era algo que necesitaba.

Maite entendió que a Dulce la pregunta le había afectado y decidió cambiar de tema.

-Te quiero pedir una cosa-.

-¿Qué me quieres pedir?- preguntó mirándose las uñas pensando.

Maite suspiró. -Necesito que me ayudes a buscar un nombre para la pequeña que llevó en el vientre-.

Dulce levantó su mirada y sonrió de inmediato.

-¡Si! Es lo que he estado esperando hace mucho tiempo-.

Maite sonrió.

-Si, bueno pero dejémoslo para después. Ahora es mejor que te pongas a trabajar porque tienes mucho trabajo. Yo igual en realidad, así que con permiso- se paró del escritorio de Dulce en el cual estaba apoyada y salió de la oficina.

Al día siguiente Dulce y Christopher se levantaron temprano.

Christopher quería cargar su cámara y Dulce quería leer los informes de información que explicaban lo que querían que documentara este año.

Ayer Dulce y Christopher habían hablado con sus amigos para juntarse a las 12 afuera del edificio de ambos ya que este solo quedaba a unas calles de donde iba a empezar el festival.

Ya eran la hora y ambos bajaron vestidos y equipados para el día.

-¿Tu crees que se demoren mucho?- dijo Christopher tomando a Dulce de la cintura.