Peligrosa Atracción III (Siempre)

Capítulo 31: Volviendo a nuestro lugar.

En multimedia: Shawn Mendes- Always been you.

~Ethan~

Me cuesta trabajo creerme que los que están enfrente son mis amigos, apenas minutos estaba quejándome y siendo un sentimental de mierda por haber salido primero y ahora resulta que están aquí, libres, como yo.

Sé que no debería emocionarme tanto, pues sabía que saldrían antes o después, es solo que, de alguna forma, durante todos estos años, aunque no los obligué a nada, sé que muchas de sus decisiones y sacrificios fueron en nombre de nuestra amistad, del cariño que sentían y siguen sintiendo por Blair.

Pero, entre tantas emociones juntas, hay una sola que prevalece; la paz que siento de volver a ver a mi madre, así, tan repuesta, claro que los años le han pasado factura, pero no es ni la sombra de la mujer que encontré con tantos nervios, miedos y traumas, su mente ha regresado a la normalidad y yo agradezco al cielo haber tenido esta oportunidad, regresar a ella.

Se aparta de la multitud y camina hacia mí incluso antes de que yo termine de reaccionar. No dice nada, pero vaya que llora como si todas las veces que fue a verme, se aguantara para no preocuparme y ha decidido sacarlo todo hoy. Enseguida la abrazo muy fuerte y le doy tantos besos en las mejillas como me es posible.

—¡Mamá! —soy el primero en decir algo—. Mamá... —repito.

—Sabía que el cielo haría su trabajo, que tendríamos tiempo, Ethan, que volvería a tenerte así, mi niño —dice y lo último realmente me conmueve, ¿niño? Sigo siendo un niño ante sus ojos y yo me siento como niño frente a ella.

—Vamos a tener tiempo, mucho tiempo. La vida tiene que recompensarnos. Haremos tantas cosas, mamá, te llevaré a tantos lugares. Te daré el mundo, te lo juro —hablo muy en serio.

—No me jures nada, no es necesario. Lo único que quiero que hagas es que vivas, que retomes tus sueños, tus metas, que hagas muy, muy feliz a esta señorita —dice mientras se aparta y toma la mano de Blair y la une con la mía—, quiero verlos juntos, quiero que formen un hogar, Dios, quiero ver a muchos nietos corriendo por esta casa. Tienen que hacer las cosas bien esta vez, ¿me lo prometen? —nos habla a ambos.

Blair me mira a mí y luego a ella, asiente con su cabeza un tanto ruborizada.

—Claro que sí, mamá. Te lo prometemos, en cuanto esta preciosa mujer me acepte por completo de nuevo en su vida, lo primero que haremos será casarnos y darte muchos nietos. ¿Cierto, Blair?

—¡Aprovechado! —escucho gritar a mis amigos.

—Al menos, pídeselo como un puto príncipe, que te ha esperado ocho años, sin vergüenza —me regaña Kim y todos se sueltan a reír.

—¡Cállense! —bufo—, ¿cierto, Blair? —repito, solo estoy preguntando si existe la posibilidad de que eso se cumpla, no que se case conmigo, cuando lo haga, seré el hombre más cliché del jodido planeta, porque lo merece.

—Claro que sí, Marina —le responde a mi madre—, seremos una hermosa familia, todos.

—Eso me deja más tranquila, ahora, pasen de una vez, que he hecho mucha comida para mi hijo, su futura esposa, y sus hermanos —comenta mamá sonriéndole a todos. Qué cómplice más hermosa me ha tocado, porque no voy a mentir, si solo dependiera de mí, me casaría ahora mismo, pero tenemos que ir lento, al menos intentarlo, esta vez todo tiene que salir bien y, además, debo aprender que no siempre se hará mi santa voluntad.

Soy un hombre completamente normal ahora, no el jefe de antes, a quien todos tenían que obedecer, menos Blair, claro, con lo que me costaba que me hiciera caso la muy caprichosa, ahora menos.