Estoy sola y con mucha hambre después del largo camino que hemos recorrido, pero a la vista observo que ya estábamos llegando al lugar...Cuando escucho que uno de los guardias les ordenó a todos que bajáramos de la camioneta y que formáramos filas para poder entrar en orden, me desperté de una pequeña siesta cansada por el viaje. Era un lugar enorme con tres edificios y muchos guardias por todos lados custodiando el lugar con sus rifles en mano y uniforme de color negro. A todos los chicos que estamos aquí, nos dieron comida y nos dirigieron a las duchas para luego darnos a cada uno el lugar que nos corresponde, luego de ser interrogados uno por uno después de entrar al enorme lugar y me di cuenta de que tratan de no mirarse a los ojos. Después de unos momentos, escuchamos una voz femenina hablar por una bocina en la pared cuando yo estaba en la cafetería comiendo algo y aquella voz decía que dentro de diez minutos todos los recién llegados debían reunirse frente al edificio número tres. Estaba en dicho lugar junto a varios chicos más. Llamaron a los jóvenes en un orden que, a mi parecer, era aleatorio, hasta que llegó mi turno.
Fui guiada por un guardia hasta una oficina que estaba ubicada en la parte baja de aquel edificio y cuando entré, me encontré con una mujer sentada en un escritorio escribiendo algunas cosas en un papel de tantos que había sobre dicho escritorio.
—Hola, ¿cómo estás? — Me preguntó una mujer alta de ojos azules que parecían grises a la vez y el cabello negro y largo. Admito que la mujer tiene una apariencia muy hermosa, pero hay algo en su mirada que me hace sentir incómoda. Tiene esa mirada regia y fría puesta sobre mí como si quisiera desaparecerme de la faz de la tierra, pero trataba de ser amable conmigo con esa voz fingida lo cual hace que confíe aún menos en ella.
—Estoy bien, gracias.
—Ah, qué bien me alegro. ¿Qué edad tienes, Linda?
—No... no lo sé...— Balbuceé, mientras bajé un poco la cabeza y empecé a ponerme nerviosa.
—¿Cómo que no sabes? —me preguntó la mujer con un tono un poco desagradable para mí.
—Es que lo único que sé es mi nombre, lo demás no lo recuerdo.
—Hmm... interesante, ¿Sabes? A ti te tendré en un lugar especial, luego te examinaré.
—¡Guardias! — Llamó la mujer. "Llévenla a la sección de enfermería para que la estudien y luego guíenla a su respectivo lugar. Yo trataré con ella más tarde. Y por favor hagan pasar al siguiente".
El guardia me guió hacia la puerta y me dirigió a la sección de enfermería. Mientras estuve allí, me hicieron varios análisis y detectaron mi falta de memoria de inmediato. Solo espero que no me hagan preguntas extrañas porque realmente me pondría mucho más nerviosa y echaría todo a perder con mis balbuceos. Más tarde fui a ducharme y me puse la ropa que me habían dado, luego fui a la cafetería a comer algo para cenar.
Observé que todos aquí siempre lucen muy tensos, como si quisieran escapar... Terminé mi comida y fui al cuarto que me habían asignado. Admito que esto parece una prisión, quizá no podre recordar mi información personal pero mis ideas y pensamientos para reconocer las cosas se sienten muy claros y esa mujer definitivamente me es muy familiar.
Al día siguiente me manda a llamar la señora Walker. Cuando entro a su oficina, seguida por uno de sus guardias, por supuesto.
—Hola, ¿cómo estás?
—Bien, ¿y usted?
—Yo estoy bien, gracias— Dijo la mujer con una sonrisa fingida.
—¿Por qué me mandó llamar, señora Walker?
—En primer lugar, llámame, Sandra, ¿sí? Te mandé llamar porque tengo que hablar contigo jovencita.
—¿Conmigo? ¿De qué o sobre qué?
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Los Secretos de Betania [Completa]
General Fiction-Mi mejor amiga está desaparecida, y yo... no la recuerdo. -Me acusan de su desaparición, no entiendo que pasa, no sé quién es ella. -Daría lo que fuera sólo por tener mis recuerdos devuelta. Betania es una chica huerfana de 16 años de nacionalidad...