Brother ➷ Frerard.

❄ Capítulo extra; Feliz navidad ❄

(Flashback, Gerard; 6 años, Frankie; 8 años)

- ¿Qué quieres para navidad, Gee? - preguntó mi madre, estábamos en la sala principal de la casa. Y aunque trataba de sonar lo más interesada en mí, de verdad estaba mirando su computadora mientras escribía en esta rápidamente. La respuesta de esa pregunta ya la tenía hace casi 1 semana.

- ¡Quiero que Frankie se quede con nosotros por siempre! - exclamé rápido mientras me levantaba de un salto del sillón en el que estaba sentado, de verdad era lo único que quería para esa navidad.

- Gee- odiaba ese apodo, de verdad, al menos cuando mis padres lo decían - Frankie se va a quedar con nosotros, por siempre.

- ¿Por qué? ¿No tiene que volver a su casa nunca?

- Sí, no puede volver porque sus padres están lejos entonces ahora somos nosotros sus papás ¿Está bien? - yo asentí aunque no había entendido mucho de eso ¿Y entonces que le había pasado a sus papis reales? - Pero no importa, ahora ve a jugar con él un rato. ¿ Seguro qué no quieres nada más para navidad?

- No, no, no, nada más - le dije sonriendo mientras comenzaba a caminar fuera de ese lugar, pero la voz de mi madre me detuvo.

- Gee, es un secreto lo que te acabo de decir ¿Bueno? Frankie no sabe que sus papás están lejos y que nosotros lo vamos a cuidar ¿Ya? No le digas.

Asentí y salí corriendo a la habitación de Frank, antes era una pieza vacía donde guardaban un montón de cajas mis padres, pero ahora es la habitación de Frank, lo mejor es que queda enfrente de la mía, así que podía ir cuando yo quisiera. Abrí la puerta sin tocar y encontré a Frank sentado en la cama con un cómic entre sus manos pequeñas.

- ¡Ese cómic es mío! - dije alto mientras casi corría a la cama, donde le arrebaté el cómic de Batman de sus manos, él puso un puchero tierno.

- ¿Me lo prestas, por faaaaa?- murmuró mientras alargaba la a al final, yo asentí y se lo entregué, él puso una sonrisa que hizo que extrañamente, mi corazón comenzara a palpitar más rápido, últimamente, cada vez que Frankie sonreía o reía o me tomaba de la mano, me pasaba eso. Que raro.

- Frankie.

- ¿Uh?

- ¿Qué quieres para navidad? - pregunté con mi vocecita chillona, él subió la mirada del cómic con las mejillas sonrojadas,ni idea de por qué.

- ¿Y tú qué quieres?

Ahora a mi se me sonrojaron las mejillas - Quiero que te quedes aquí conmigo, por siempre.

- ¡Yo también! - exclamó dando un salto en la cama, Frank era un maldito hiperactivo.

- ¿De verdad? - pregunté y el comenzó a asentir, repetidas veces con una sonrisa tonta y tierna en su cara - Mamá dice que si quieres igual puedes pedir otra cosa, pero yo no pedí nada más.

- N...no quiero nada más- murmuró tratando de sonar seguro antes de devolver su vista al cómic.

-Bien.

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- Tengan cuidado afuera ¿Bien? - preguntó mi madre, yo y Frank asentimos - Y no pueden estar más de una hora ¿Ya? Si les pasa algo, griten y yo o papá iremos a ver qué pasa.

Esta vez ni siquiera asentimos ni respondimos nada, simplemente salimos de la casa prácticamente corriendo. Tal vez era la emoción ya que era la primera vez que nevaba en el año, y nuestros padres nos habían dejado salir al patio delantero a jugar por un rato, además era la primera vez que dejaban salir al enclenque de Mikey con 4 años de edad. O tal vez la real emoción era que ya era navidad, y como la mayoría de los niños en ese día, estábamos todos emocionados y felices.