Cambiando tus Reglas TR#3 ✔️| DISPONIBLE EN FÍSICO

Tres adolescentes poco convencionales

#SemanaDeCTR

#FirmaSuLibro

#LosTresMosqueteros

Jax baja las escaleras corriendo, como si se tratara de una carrera más de las que hacíamos Los Reedus para ocupar el baño por la mañana. Ahora, que tengo a Denny y los chicos ya no van al colegio por las vacaciones de invierno, las carreras a muerte se redujeron a simples competencias de «Piedra, papel o tijera».

Yo voy detrás de Tenorio, con el libro en mano, siguiéndolo por las escaleras como puedo. Una vez abajo, me vuelve a tender la mano para ayudarme con los últimos escalones restantes que me quedan. Gesto que agradezco de su parte, y, a la vez, me resultan muy caballerosos. ¿Acaso trama algo? No quiero juzgar anticipadamente, pero que esté siendo tan "caritativo" con mi persona me resulta extraño. ¿Acaso quiere que le preste dinero? No creo que lo necesite. ¿Ayuda con algo? ¿Con qué?

—Sr. Reedus —habla Jax al llegar hasta la sala, donde papá está viendo Breaking Bad junto a Finn. Ninguno de los dos voltea la cabeza hasta que ponen la serie en pausa—, necesito pedirle prestado el auto —continúa Jax. Los tres pelirrojos (incluyéndome) arrugamos las cejas con incredulidad.

­—¿Cómo? —pregunta papá, arrugando todavía más las cejas. Se inclina hacia Tenorio y coloca una mano tras su oreja.

—Que le prestes el auto, papá —intervengo antes de que mi compañero de Expresión Vocal vuelva abrir la boca.

Dudo mucho que siendo Jax le preste su querida van, pero si lo hago yo, quizás funcione. Todo sea por la bendita firma.

—¿A dónde piensan ir? —Curiosea Finn, acomodándose en el sofá— ¿En un sitio donde no se puedan oír sus gritos? —Papá le da un codazo que hace que se retuerza y cubra su barriga entre los brazos.

Mi mirada de desaprobación al escuchar su pregunta cambia a una sonrisa torcida llena de gusto al ver como Primero se queja del dolor. Eso pasa por inescrupuloso y tener una mente retorcida.

—¿Para qué el auto? —pregunta papá, con calma.

Creo que la hora de victimizarme ha llegado:

—Hoy en la feria no pude conseguir la firma de Mika McFly, el autor que tanto nos gusta a Jollie y a mí. Fue una estupidez. Pero Jax es amigo de él y puede conseguir su firma, ¡hasta una dedicatoria! Es la única oportunidad que tengo para conseguir su firma y saber más de él, realmente lo admiro y con Denny mucho no puedo hacer.

—Ajá —Asiente Jax—, tengo mi moto pero como está el clima y con las toneladas agregadas que tiene el yeso, no creo que sea una buena idea llevarla. Será rápido, ir y volver.

Papá lo medita unos segundos. Bueno, varios segundos. Sinceramente, yo también lo meditaría cuando el clima está así de horrible y parece que el viento golpeando contra la casa se llevará de viaje el tejado. Pensar en ello no me da gracia, aquí entre nosotros, las tormentas de este estilo me recuerdan a los cuentos de terror que leíamos Finn, Jollie y yo bajo la cama de niños, cuando recién comenzaba a adaptarme con Los Reedus.

—Tengan cuidado —advierte papá colocándose de pie. No puedo evitar abrazarlo cuando saca de su bolsillo trasero las llaves del auto. Miro a Finn por encima del hombro de papá y le saco la lengua—. Cualquier cosa me llaman, y tú —mira a Jax entregándole las llaves, pero no las suelta, las mantiene en la palma de su mano— conduce con precaución. Un descuido con esta lluvia puede ser decisivo para sus vidas.

—No hay problema —accede Jax, cerrando el puño y resguardando las llaves.

Tomo el paraguas junto a la puerta, me despido de papá en la entrada mientras Jax corre hacia el auto y abre la puerta del copiloto. Una vez adentro, cierra la puerta y rodea el auto hasta abrir la puerta y entrar. Le hago una seña de despedida a papá. La ansiedad se aloja dentro de mi estómago cuando escucho el sonido del motor encenderse. Acomodo el paraguas junto a Denny, dejando que las gotas de lluvia escurran hasta la goma plástica bajo mis pies. Jax sacude su chaqueta de cuero mientras calienta el motor del auto para partir.