TRATANDO DE ALCANZAR ALGO QUE NUNCA TUVO

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~*~

Sentían como si ya no hubiera nada más que decir, cómo si las palabras de repente se hubieran terminado después de convertirse en ese mar de tristeza, cómo si ya no hubiera nada más que hacer.

El sol alumbraba indiferente a ese vacío que se hacía un poco más grande mientras recorrían esas mismas calles, rumbo al que sabían era el final de todo.

Nada más los unía, no tenían nada pendiente, no existían más razones por las que tuvieran que volver a encontrarse, todo indicaba que era el final de esa historia que parecía haberse alargado demasiado tiempo. Y la única razón por la que seguirían viéndose parecía simplemente impensable aunque rondara una y otra vez sus pensamientos.

Una idea imposible.

Y no todo era posible, no cuando tenían una historia como la que arrastraban y con seguridad jamás olvidarían.

La misma idea que resonaba en ambas mentes, en sus corazones y sus cuerpos, esa que al mirarse no saben cómo interpretar. Aunque en realidad no era necesario que lo hicieran, lo sabían, lo podían entender pero no querían admitirlo, no querían aceptar que ese sentimiento aun perdurara después de tantas cosas.

Un beso fugaz en los labios que sabe a despedida, un sabor que no quieren aceptar.

Sin embargo en el corazón de Minho al verlo bajar de su auto sin mediar palabra, simplemente entiende que no debe esperar nada, no después todo aquello, no después de todo lo que le hizo sufrir; era indiscutible que Taemin nunca volvería a su lado y todo empeoraba al verlo entrar sin siquiera darse la vuelta una vez. Nada.

Resignación Choi Minho.

Era ese sentimiento que se apoderaba de su corazón aunque no quería aun aceptarlo, porque lo añoraba demasiado, porque en él estaba su felicidad y quería sentirlo una vez más y que se extendiera, aunque sea, hasta el día de su muerte, no pedía la eternidad, porque sabía que no la merecía.

*

*

*

Un mes entero pasó desde la última vez que lo vio y aun siente el tacto de su último beso sobre sus labios. No importaba que su prometida lo llenara de besos, eran diferentes, siempre lo fueron, aunque eso no implicaba que no le gustaran, pero ese beso era incomparable, desde la primera vez que lo besó supo que él sería el único que le haría sentir de esa manera cuando lo besaba. Siempre lo supo.

Besos.

Acaricia sus labios una vez más y vuelve a sentirlo una vez más.

Aun después de todo lo ocurrido, después de haberlo intentado odiar con toda su alma, después de haberse imaginado apuñalando su corazón mil veces, después de sentir que era el peor ser humano sobre la faz de la tierra, después de haberle arrebatado incluso a su hijo, aun así.

Aun después de todo seguía soñando con él.

Soñaba despierto.

No era necesario cerrar los ojos, porque su mente tenía el poder de recrearlo de una forma que creía imposible, pero con él era posible, tanto que se lo imagina justo delante suyo, acariciando sus cabellos, recorriendo con cariño sus brazos y luego posarse en su cintura, para luego robarle un beso y empezar esa locura que nunca parecía terminar.

Una y otra vez.

Key apenas entiende lo que le sucede, no después de que un día llegó y le dijo que todo estaba arreglado y que Minho desaparecería de su vida para siempre. Pero lo que veía todos los días era todo lo contrario, de tanto que Taemin lo pensaba podía sentir incluso su energía, como si realmente estuviera ahí, justo donde Taemin tenía la mirada perdida.

¿QUÉ ERES PARA MI?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora