Una historia con Draco Malfoy [draco y tu]

Capitulo 42

A las siete menos treintena ya estaba bajando hacia las mazmorras. Para empezar, tenía mucho miedo de que me descubrieran. Si Peeves me veía iba a soltar la alarma y el señor Filch o cualquier otra persona podría venir y encontrarme fuera de la cama. Pero tambien tenía miedo de lo que iba a pasar si nadie me descubría.

Nunca me había acercado a lo que era la intimidad con la persona a la que amas, solo había leído algunos libros y escuchado hablar acerca de eso, pero de ahí a experimentarlo...

Cuando llegué a las mazmorras ya estaba sudando. Ubiqué el barril y  cuando lo saqué estaba el túnel sellado que Draco había mencionado. Lo abrí y pasé. Era una extensión muy larga, estaba muy oscura.

-lumos

Con la varita encendida seguí caminando unos minutos y luego llegué a lo que parecía ser una abertura cubierta con una puerta. Cuando salí del túnel el agujero de cerró dejandome encerrada, así que abrí la puerta con mucho cuidado cuando justo un alumno pasó. Cerré la puerta y mi corazón no dejaba de bombear rápidamente. Luego de unos segundo la volví a abrir ya que no se escuchaba ningún ruido. No había nadie así que salí rápidamente cerrando la puerta con cuidado.
Sigilosamente me dirigí al fondo del corredor buscando la última puerta.

-por favor que sea esta -dije despacio.

Y entré en un segundo cerrado la puerta bruscamente. Le volteé y Draco estaba ahí, sentado.
Sonreí y mi corazón empezó a latir aún más fuerte.

-¿qué tal la escapada? -preguntó mientras se acercaba a mí.

-fue.. -solté la puerta-. Facil.

-no te veo muy convencida -dice mientras se acerca hasta casi llegar a mi cara.

-es que... -rodeó mi cintura con sus manos, estaba cada vez mas nerviosa-. Fue complicado que nadie me viera...

-está bien -dijo mientras me besaba-. Todo está bien ahora.

-si... -besó mi cuello mientras me pegaba a la pared, mis piernas se debilitaron y soltaba pequeños suspiros-. Draco...

-____... -siguió besando mi cuello mientras pasaba sus manos por debajo de mi suéter, lo agarró y por encima de mi cabeza me lo sacó-. Ahora vas a ser mía...

Me dio un beso en la boca y sentí por un momento un tipo de magia diferente, era algo completamente satisfactorio... Simplemente mágico.

-ven aquí -dijo y me levantó de las piernas.

Me agarré a sus hombros y me sentó en una mesa que teníamos cerca. Cuando estaba ya sentada nos besamos nuevamente y empezó a desabotonar mi blusa. Cuando terminó metió sus manos por debajo de ella y acarició mi espalda, luego bajó a besar mi cuello y de a poco llegó a mis pechos aún cubiertos por el brasier. Los besaba y pasaba sus labios por ellos, tomó una de mis piernas con su mano e intenté seguir sacándole su camisa, cosa que él mismo terminó. Cuando vi su abdomen no pude evitar relajar todo mi cuerpo y morderme el labio.

-¿que pasa princesa? -dijo y retomó mis labios luego bajando nuevamente a mi cuello.

-es que... -solté otro suspiro.

Terminó de sacarme la camisa y me desabrochó el brasier, cosa que al parecer le produjo placer.

-dios ____ -dijo mientras me apreciaba-. Eres... Perfecta.

Sonreí y empezó a pasar su boca por mis pechos. Sentí como todo el placer subía en mí y enrolle mis piernas en su cintura.
Lamió uno y luego pasó al otro.

-Draco... ¿Pusiste algún hechizo silenciador? -pregunté y él contestó sin parar de lamer mis pechos.

-claro... Quiero que grites...

Al decir eso sentí aún más placer y sonreí involuntariamente.

Me acosté en la mesa sin parar de gemir y luego de un rato empezó a bajar su lengua por mi vientre. Cuando llegó y vio que mi falda seguía ahí, la levantó y me bajó las bragas con suma delicadeza. Cada tacto me hacía sentir más excitada, y cuando por fín logró sacarlas por completo me abrió un poco las piernas y comenzó a besar los lados de mis muslos.
Mi espalda se hizo una pequeña curva y sentí tanto placer que un gemido solté.
Subió su boca hasta mi feminidad y comenzó a besar pero solo superficialmente.
Solté otro gemido aún más fuerte y él también.

-mejor dejo eso para Después -dijo mirándome.

Me levanté y me volvió a coger de las piernas. Me agarré nuevamente de sus hombros y me soltó ya en su cama.

-ábrela -me indicó.

Hice caso y abrí las sábanas. Él se corrió hacia mí para quedar entre la abertura de las frazadas.

Cuando estuvo cerca desabroché su pantalón y cuando ya estaba hecho él se lo bajó y me acosté en la cama.

El se puso encima mío y se sacó los bóxers y aunque no vi nada, sentía su erección sobre mí.

-soy tan nuevo en esto como tú -dijo mientras me miraba-. Así que si te duele, tienes que decirme.

Lo miré y asentí. Tenía miedo, pero aún así lo deseaba.

Abrí mis piernas para facilitarle la entrada y sentí una pequeña presión en la entrada de mi vagina. Sentí algo duro dentro de mí y un dolor pequeño me azotó en la zona.
Hice un mueca de dolor.

-¿te duele? -dijo Draco.

-No -respondí-. Sigue...sigue.

Continuó. No dejaba de mirarme. Lo hacia despacio para que no me doliera, pero luego de un rato todo ese dolor se convirtió en placer y toda parte de mi cuerpo se relajó.

Soltamos gemidos a medidas que avanzábamos y luego de un rato comenzó a penetrarme más rápido.

Mi respiración era acelerada y cada vez iba más rápido. En un momento volvió a lamer mis pechos provocándome aún más placer. Sentía su miembro duro dentro de mí... No podía pensar en nada más que solo el placer.
Enrollé mis piernas a su cintura para sentirlo más adentro.
Ya luego de más rato iba muy rápido. Draco no dejaba de gemir y mi espalda se curvaba cada vez que lo hacía fuerte. Cada vez un poco más adentro.

-Draco... -gemía-. Más...

Pero no fue necesario terminar la frase ya que empezó a hacerlo más rápido nuevamente. La cama hacia crujidos y prácticamente estaba gritando. No paramos durante unos minutos cuando paró.

-date la vuelta -dijo.

Me levanté y él ocupó mi lugar yo quedando encima de él. Ubiqué su miembro y quedé dentro. Aferré mi mano al fierro que estaba en la cama y tiré de él, eso hizo que Draco gimiera más fuerte y comenzé a hacerlo rápido a medida que pasaba el tiempo. Tomó mis nalgas en sus manos y me empujaba para hacerlo más rápido.
Seguíamos moviéndonos y gimiendo... En un momento ya sentí el mayor extasis y solté el orgasmo, que al parecer el también soltó.
Luego de eso me recosté al lado de él, ambos cansados. Nos tapamos con la sabana y unas frazadas.

Con la poca luz que había solo pude ver sus ojos en mí y una curva en su boca.
Sonreí al mismo tiempo.

-ven aquí -dijo.

Extendió su brazo y me acomodó a su lado. Casi no tenía sueño. Intentamos quedarnos dormidos, pero yo aún seguía despierta, feliz de poder estar por fin segura de mi decisión, y feliz de ella.

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Hola! Los invito a pasar por mi novela corta 'Héroes'.
Ojalá les guste el cap! Lean Héroes!! Mi otra novela corta.

Nos vemos!!