Abby se a ido a su clase. Un poco tarde, pero al fin y al cabo fue. En mi primera clase no iré, luego veré si podre ir a la segunda, pero ahora lo que me desconcentra de todo esto es la respiración del Peliazul. Es entrecorta y a la ver lenta e inconstante. Mi oído se agudiza entre todo el silencioso pasillo oyendo que a cada minuto traga saliva forzosamente, lo que hace que yo repita su acción nerviosa.
No puede ser que lo que pienso sea verdad...me entra el pánico de solo pensarlo. El nos vio, el nos vio a nosotros fuera del colegio. Tiene que ser eso, no hay otra explicación de porque la pelea entre Gabe y el Peliazul.
Pero, ¿Por que tendría que haber una pelea, si solo a sido un beso?.
Aunque Ambar también es su amiga y quizás la este protegiendo de un engaño de parte de su novio. Siento un nudo en la garganta de solo pensarlo...el, el es el novio, la engaño y mas, conmigo.
Llegamos a la enfermería con los gemidos de dolor constantes del Peliazul haciendo que apresure mis pasos hacia la enfermería llegando por fin al encuentro de esta habitación. No me molesto en tocar y entro sin mas ganándome la mirada de reproche del Peliazul. Me encojo de hombros y hago el ultimo esfuerzo por ayudarlo a entrar a sabiondas de saber quien se encontrara dentro de esta habitación. Como lo e imaginado, esta recostado en una de las camillas...la de la izquierda para ser mas precisa. El paso del Peliazul para en seco llevándome consigo...e intentado evitar que llegara a hacer eso llevándolo mas rápido, pero en el segundo que entramos el lo vio, en sus ojos veo decepción y enojo. Gabe se encuentra sumergido en un sueño profundo sin darse cuenta lo que pasa a su alrededor. El Peliazul no deja escapar esa mirada de furia, pero lo retengo y lo guió hacia la camilla que se encuentra del lado opuesto que al de Rowling. Lo ayudo a que se plante en la camilla y que se quede en la misma posición que el sujeto que se encuentra al otro lado de las cortinas de plástico. Busco con la mirada a la enfermera de este lugar pero no hay rastro de su persona. Vuelvo la mirada al rostro de Damien y este se encuentra plácidamente en un sueño, mas haya de la realidad.
Suspiro con cansancio y a paso lento me dirijo hacia la camilla de Rowling mientras que miro de vez en cuando hacia Damien. Siento que no soy guiada por mi propia voluntad sino interponiendo mi corazón ante mi razonamiento consciente de todo lo que estoy haciendo. No debería, pero igualmente lo estoy haciendo. Sin sentido común, obviamente. Me planto delante de su cuerpo durmiente y contemplo su rostro sin expresión alguna mientras su respiración es suave y lenta. Poso mi mano en su mejilla mientras le acaricio el rostro suavemente. Mejillas, frente, ojos, nariz, barbilla hasta que paso mi dedo índice en sus labios percibiendo lo suave que se sienten. Un deseo incontrolable crece dentro de mi. Me acerco aun mas a su rostro teniendo una necesidad indescifrable que me impulsa a querer hacer algo. Mi respiración de vuelve irregular y se mezcla con la suya volviéndose un sin sentido. Mis labios rozan los suyos y disfruto de esta cercanía. Rotativamente, mis ojos van de los suyos a sus labios. Cuando una indecisión crece dentro de mi, de si hacerlo o no, termino por ceder. En el momento que tomo sus mejillas entre mis manos y me dispongo a juntar mis labios con los suyos el ruido de la puerta siendo abierta me pone en alerta y me alejo rápidamente llevándome consigo el despertar de Rowling. Me mira, pero no dice nada. Quien aparece tras de la puerta es la enfermera junto a la noviecita de Gabe. Me vuelvo lentamente hacia el Peliazul cerrando fuertemente los ojos y los puños, negando con la cabeza haberme guiado por algo que no debería de haber intentar hacer.
Miro sobre mi hombro por unos segundos, trago saliva en seco y vuelvo la mirada al sujeto de pelo azul que mira el techo sin mover lo párpados y mirando un punto fijo con aquellos ojos mieles. Poso mi mano en su hombro tratando de llamar su atención, pero obtengo todo lo contrario. La saco rápidamente y me pongo rígida al escuchar la voz femenina de Ambar.
-¿Que a pasado?.
Pregunta con preocupación y yo ruedo los ojos con fastidio. No se que me pasa, pero odio este sentimiento. Lo detesto. Recibe roboticamente la respuesta, como si fuese planeado de anticipación la elaboración de estas palabras.
-Tuve un percance con alguien.
Se abstiene a decir, haciendo que suelte una risa sarcástica silenciosa y ladee la cabeza. Me doy vuelta y los miro a los dos estar agarrados de las manos.
Dejo de ver sus manos unidas viendo frente de mi la particular vestimenta que llevan las enfermeras. Una sonrisa amigable se instala en su rostro que hace que sonría forzosamente y le de paso a que mire al chico que se encuentra en la camilla. Mientras ella se ocupa de eso me decido que lo mejor es irme porque se que sobro aquí. Me giro unos segundos hacia el chico del pelo azul.
-Espero que te mejores.
Este asiente y con los ojos se que me lo agradece aunque este enfadado por lo que e hecho. No es un mal chico sino que ver eso lo hizo enfadar demasiado. Camino para atrás unos pasos hasta que me doy vuelta topando con la mirada intensa de Gabe sobre mis ojos. Paro en seco, pero reaccionando al segundo que la novia se encuentra abrazándolo. Agacho la mirada sintiéndome débil en ese momento, rápidamente me dirijo hacia la puerta, saliendo y cerrando tras de mi, sin pudor. Me apoyo en esta y suelto un suspiro entrecortado, miro hacia arriba tratando de controlar mis ojos vidriosos que amenazan soltar lagrimas ahogadas. Tomo aire repetidas veces para calmar las ganas incontrolables de llorar y finalmente me retiro a la dirección contraria de donde e venido con el Peliazul, dejando atrás la puerta de la enfermería.
Sin previo aviso, una lágrima solitaria resbala por mi mejilla. Dejando a su paso la muestra de mi debilidad.
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Espero que les guste =)
¡Gracias por leer!
Besos de todo corazón :*
Mecatmehome-
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¡GUERRA de skaters!
Teen Fiction-Interesante, una chica skater profesional-se ríe-No sabes ni qué es eso, bonita-lo miró con furia en mis ojos. -Vete a la mierda...-escupo con enojo-Escúchame una cosa, Rowling-me acerco a su oído-Esto es...¡GUERRA de skaters!. Se prohíbe la copi...