Me terminaste gustando [Saúl Ñíguez]

Capítulo 22

- No Saúl -reaccioné -, ésto está mal.

Él suspiró.

- Lo siento, necesitaba hacerlo -lo miré y negué.

- Yo...

- No hace falta que digas nada. Por cierto, espero que te haya gustado el gol, te lo he dedicado -hizo un intento de sonrisa y se fue.

...

Nos subimos al avión, me senté sola. Noa estaba con Antoine y Lucas ni me miraba.

Estaba comenzando a dormirme cuando alguien se sentó a mi lado.

- ¿Te despierto?

- Casi -reí.

- Me ha contado Lucas que Saúl te ha dedicado el gol -susurró Gabi.

- Sí -hice una mueca -. Se ha enfadado conmigo.

- ¿Pero estáis saliendo? -negué -. ¿Entonces?

- Él sabrá, pero aún así yo tengo la culpa -dije cabizbaja.

- Claro que no Lu. ¿Por qué ibas a tenerla?

Le conté todo lo que hablé con Noa, y le añadí lo del beso.

- Vaya... -se frotó la barbilla -. Lleva razón, ahora ya sí que sí debes hablar con él, después de lo del...

Le tape la boca.

- Ni una palabra Capi -reímos. Él negó.

- Te lo prometo -me abrazó.

...

Los chicos se encontraban entrenando, y yo, como siempre, supervisándolos.

El entrenamiento acabó. Sin pensarlo dos veces, paré a Lucas, que estaba pasando por mi lado, y le hablé.

- Lucas, ¿tienes ahora un rato libre? Tenemos que hablar.

- ¿Hablar? ¿El qué?

- ¿Lo preguntas en serio? -asintió -. Simplemente hazme caso.

- Eh... vale, cuando acabe vamos para mi casa y hablamos -asentí.

Un rato más tarde acabó. Nos dirigimos a su casa. El viaje fue silencioso. Llegamos y fuimos directo al salón.

- Bueno, dime -dijo sentándose. Lo imité.

- ¿Por qué no me hablas?

- Es obvio ¿no? -le miré confundida -. No es muy normal que Saúl te dedique un gol.

- ¿Estás celoso?

- No.

- Claro que lo estás, Hernández.

- No te conviertas en Noa -reímos.

- No nos vayamos del tema -suspiré -. Si te molestó me lo tendrías que haber dicho y ya está.

- Lo sé, y lo siento -cogió mis manos -. ¿Algo más de lo que quieras hablar?

- Sí -aparté mis manos de las suyas -. Ayer también... me besó.

- ¡¿Cómo?! -exclamó bastante enfadado.

- Déjame explicártelo -bufé.

Le conté lo del beso con todo detalle. También decidí contarle lo que hablé con Noa.

- Estoy siendo una egoísta, sólo estoy mirando por mí sin saber que a ti te estoy perjudicando -le expliqué conteniendo las lágrimas -. Sé que por mucho tiempo que esté contigo, no voy a olvidarme de Saúl. Los tipos de cariño que os tengo son diferentes. Él me llena un vacío que tú no puedes hacerlo, lo mismo digo al revés. Lucas, tú eres como un hermano para mí, y tarde o temprano ésto no iba a funcionar y posiblemente hubiéramos acabado peor, por eso quiero terminarlo cuanto antes.

Él me miró triste, en cambio me abrazó.

- Sabía que no ibas a ser capaz de olvidarte de él, así que estaba preparado para este momento -sonrió triste.

- Lo siento tanto Lucas -dije acariciando su mejilla.

- A lo mejor todavía no estoy preparado para tener una relación -sonrió -. Pero prométeme una cosa -asentí -, pase lo que pase, no te separes nunca de mi lado.

Le abracé de nuevo.

- Gracias Lucas, gracias -besé su mejilla -. Has sido alguien tan importante para mí en estos días... y espero que lo sigas siendo. No sé lo que habría hecho sin ti.

- Eso no lo dudes -sonrió tras guiñarme un ojo.