CAPITULO 19

487 23 0
                                    

Habían pasado dos días desde aquella conversación con Camila y todo había sido resumido en eso. Solo una pequeña y simple conversación, porque ya no había mencionado más el tema y mis ilusiones de verla se habían resumido a nada.
Algunas veces no entendía a Camila, no sabía si ella sentía la misma necesidad que yo de verle y usar la tecnología para hacerlo posible. Sabía que no tenía demasiado tiempo libre pero no entendía el tiempo que tenía no lo utiliza para eso, aveces me cansaba el solo tener momentos fugaces con ella por qué me tenía que conformar en sus ratos libres, sabía que trabajaba y no podía poner toda su atención en mi y lo entendía hasta cierto punto. Pero algunas veces quería ser egoísta y solo tenerla un día entero para mi, ya no sin la distancia simplemente pasar una tarde de películas con la tecnología de nuestro lado, sonaba demasiado cliché pero no nos podíamos permitir demasiado por la situación en la que estábamos.
Decidí despejarme un poco saliendo a comer con las chicas. Ellas seguían molestas por qué no me había aparecido en la fiesta. De cualquier manera yo había tenido una buena noche en compañía de Camila, pero estaba claro que de eso ellas no sabía nada.
Después de quedarme horas al teléfono con Camila la deje dormir y yo sin querer había hecho lo mismo.
Llegue a la cafetería que siempre nos encontrábamos, ya era costumbre hacerlos, al entrar pude ver a Normani y Ally ya en nuestra mesa de siempre.
—Hey chicas.—Las salude sentándome frente a ellas.
—Laur tú siempre tan puntual.—Ironizó Normani.
—Vaya, no andamos de humor.—Dije rodando los ojos.
Ally solo se rió de nosotras.
—Chicas que amorosas son, por eso las quiero.—Ally dijo abrazando a Normani de lado y tomando mi mano sobre la mesa.
—Ugh Ally tanto amor me asfixia.—Dije a broma quitando mi mano de la de ella.
—Bueno es que tenemos días sin vernos.
—Claro un montón enana.—Dije mirando al mesero.
—Ni te molestes, ya hemos pedido por ti.—Me dijo Normani despreocupada mirándose las uñas.
—Pero que!.—Respondí molesta.
—Laur te tardas demasiado y morimos de hambre.—Ally justificó tratando de calmarme.
—Bien.—Dije cruzándome de brazos.
—Ha pero que madura, ahora falta que haga pucheros.—Se burló Normani.
—Te odio.
—Y yo a ti.
La mire mal por un momento y se volvió a burlar de mi.
—Chicas dejen de pelear.—Ally dijo mirándonos a ambas.
El mesero llego con nuestros pedidos, se me quedo mirando más de lo normal pero lo ignore.
—Buen provecho.—Dijo antes de irse pero dirigiéndose más a mi.
Normani y Ally se me quedaron viendo con una ceja alzada, las ignore mientras yo comenzaba a comer de aquellos spaghettis.
—¿Qué?.—Les dije mirándolas.
—Nada fuera de lo normal, solo que ese chico acaba de coquetear contigo.
—Es cierto "buen provecho".—Dijo Ally apoyando el argumento de Normani asiendo comillas con sus dedos.
Seguí comiendo como si nada, era obvio que lo había notado pero no le iba a dar importancia por obvias razones.
—¿Y?.—Conteste despreocupada.
—Nada, pero es lindo. De hecho ahora mismo te está mirando.—Ally dijo riendo.
—Oh dios es verdad, si que lo flechaste.
Ambas rieron burlándose de mí.
—Claro que no.
Voltee a mirarlo, era él típico chico atractivo de ojos azules. En ese momento nuestras miradas se encontraron lo que indicaba que las chicas tenían razón, levante una ceja y me giré a la mesa de nuevo siguiendo con lo mío.
—Laur, al menos pídele su número.—Sugirió Normani.
—¿Estás loca?, Para que lo iba a querer?.—Respondí casi terminando de comer.
—Para una de nosotras, es obvio que para ti no.
Mis amigas seguían comiendo las mire y reí.
—Pobre, no se da cuenta que soy muy gay para hacerle caso.—Me reí aún más. Tome el vaso lleno de Coca Cola y bebí.
—Exacto pobre de él.—Exclamó Ally.
Continuamos comiendo pero podía sentir su mirada sobre mi.
—Te sigue mirando Laur. Es una pena como no se fijó en mi.—Dijo Normani acomodándose el cabello sacando su lado diva.
—Fácil, soy irresistible.—Dije encogiéndome de hombros.
—Maldita egocéntrica.—Normani me dio una patada debajo de la mesa.
—Loca, no me golpees por decir la verdad.—Me defendí.
—Eres increíble.—Ally dijo riendo un poco.
—Bien, pidamos la cuenta y vámonos de aquí.
Ally le hizo señas a  él chico para que se acercara y a los minutos él estaba frente a mi.
—¿Se les ofrece algo más?.—Preguntó mirándome a cada momento lo que me divertía.
—No gracias, queremos la cuenta.—Ally le respondió amablemente.
—En un momento.
Se fue por la cuenta y no pude dejar de reír con una mano en mi boca para mitigar un poco mis carcajadas.
—Aquí tienen señoritas.
Regreso está vez estaba a un lado de mi, lo mire al recibir la cuenta debo decir que me divertí un poco.
Mis amigas me dieron dinero y lo pusimos encima de la cuenta dejándole un poco de propina.
—Gracias tengan una linda tarde.—Hablo tomando el dinero mirándome una última vez yéndose de la mesa. Las chicas solo sonrieron mirándome levantándose de los asientos.
—Laur Viene hacia acá!.
Yo apenas iba a voltear cuando sentí unos labios sobre los míos.
—Hola Laur.—Keana me saludó efusiva.
—Hey ke.—Le salude de vuelta.
Alcé mi mirada y pude ver cómo el mesero se había quedado en medio del pasillo observando la escena.
—Ya nos vamos.—Les dije soltándome del agarre de Keana.
—Pobre Laur, le rompiste el corazón.—Dijo Normani mirando a aquel chico. Nos dimos la media vuelta y caminamos hacia la salida. Keana se despidió con la mano y lo hice de vuelta.
—Bueno esa decepción se la llevaría tarde o temprano.—Conteste burlona.
—Eres tan gay amiga.—Ally dijo.
—Mucho Ally.

A kilómetros de ti.  (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora