CAPITULO 30

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—Vamos Lauren cambia esa cara—Reprochó mamá.

Sin haberlo querido estaba sentada frente a él. Frente al mentiroso esposo  que fingía seguir enamorado de mamá, él que estaba sentado a lado de la mujer que le había dado toda su vida, como si no pasara nada, como sino lo hubiera estado besándose y haciendo sabrá que cosas más, horas atrás.

—Que quieres que haga mamá, ¿Que finja ser parte de la familia feliz?—Ataque viéndolo a él en todo momento. Papá me lanzo una mirada de advertencia que conocía demasiado bien.
Me daba tanta rabia tener que tragarme todo lo que sabía.

—¿Que te pasa Lauren? De verdad que si has venido hasta aquí para estar con esa actitud, mejor te hubieras quedado en casa.

—Perfecto mamá, me largo.—Me levante del asiento dispuesta a irme no soportaba un minuto más en esta falsa situación.

—Nadie se va, siéntate Lauren—Ordenó mi padre. Lo hice mirándolo molesta, ¿es que aún se creía con derechos de hablarme así?

—Muy bien, ahora ordenemos–Hablo con una sonrisa sinica en su rostro.

Después de haber ordenado todos y comido nuestros respectivos platillos seguíamos en la mesa esperando la cuenta.

—Antes de irnos, quiero decirles que volverán estás tardes familiares, todo lo que quiero es volver a ser la familia unida que éramos antes—Dijo mirándonos a cada uno, deteniéndose en mamá, ella solo apoyo su rostro en el hombro de papá mirándolo con amor.—Debo disculparme por estar tan ausente, pero todo es culpa del trabajo.

—No te preocupes papá nosotros entendemos—Taylor dijo mirándolo como si fuera el mejor papá del mundo, vaya que lejos estaba de la realidad.

—Mike sabes que siempre estaremos aquí esperándote—Mamá dijo besándolo cortamente en los labios. Tuve que quitar mi mirada, era tan desagradable porque volvía a mi mente mi padre besándose desesperadamente con su asistente. Cerré los ojos con fuerza alejando esa horrible escena de mi mente.

—Si "Pa" todo está olvidado—Se unió Chris a apoyar a papá.

—Y tú Lauren, ¿No vas a decirle nada a tu padre?—Propuso mamá.
Todos me miraban expectantes mientras yo solo me encogía de hombros.

—No se que quieren que diga, si está claro que su trabajo es más importante para él que cualquiera de nosotros—Dije en doble sentido mirándolo desafiante, abrió más los ojos al oírme decir aquello pero aún así esbozo una sonrisa.

—¡Lauren!—Me reprendió mamá.

—Déjala Clara, solo está molesta por mi ausencia, pero ya se le pasará.—La tomó de la mano besándola después.

—Aquí tiene su tarjeta señor Jauregui—Se la devolvió dando por finalizada "la comida familiar"

Me levante de mi asiento adelantándome, necesitaba salir y respirar aire fresco. Sentí como mi teléfono vibraba en mi bolsillo, lo saque leyendo el texto de Camila.

Camila:"Te extraño y te amo"

Es tan extraño como un simple texto de Camila puede calmarme tanto. Me sentí por minutos feliz y llena de amor que alejó los recientes problemas en casa.

Lauren:"Te amo tanto que no cabe en mi pequeño corazón."

Le escribí en respuesta bloqueando el teléfono y guardándolo en mi bolsillo de nuevo.

—Vamos Lauren, nos iremos a casa en el auto de papá—Me informó Chris caminando al auto.

No podía subirme como si nada porque sabía que días atrás el lugar que ahora ocupa mamá estaba su asistente.
Me subí y cerré la puerta, mi padre arrancó el auto minutos después. El camino a casa fue demasiado corto gracias a Dios.
Me sorprendí al ver un auto que no conocía aparcado fuera de casa con un gran moño rojo justo en la parte del cofre.
Salimos todos caminado al nuevo Ford gris observándolo detenidamente. Si que era precioso.

—Sabemos que eres la mayor, así que creí correcto que ya era hora y debías tener tu propio coche Lauren.—Papá se acercó a mi poniendo las llaves delante de mi, estire la mano tomándolas, sabía que planeaba callarme con el coche pero no lo iba a desaprovechar, necesitaba un auto.

—Gracias papá.—Fue lo único que pude decir antes de abrir el auto inspeccionándolo por dentro.

—¡Vamos Lauren, Pruébalo!—Me ánimo él. Tome asiento en el coche y lo encendí haciendo rugir el motor.

—Puedes ir a donde quieras si es lo que te estás preguntando—Él dijo quitando el moño del cofre. Cerré la puerta y acelere alejándole de casa.

Aparque delante de la casa de Ally me baje del coche tocando el timbre de su casa un par de veces. Ella salió minutos después.

—¿Que te trae por aquí Jauregui?
Me preguntó. Yo solo le mostré las llaves del coche y me moví para que lo mirará.

—Oh por Dios, ¡Tenemos auto nuevo!—Grito emocionada—¡Esto hay que celebrarlo!

A kilómetros de ti.  (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora